Ok

En poursuivant votre navigation sur ce site, vous acceptez l'utilisation de cookies. Ces derniers assurent le bon fonctionnement de nos services. En savoir plus.

dimanche, 19 juin 2016

Non, l’attentat d’Orlando n’est pas homophobe!

ORLANDO_GAY_TERRORISM_ISIS_DAECH.jpg

Non, l’attentat d’Orlando n’est pas homophobe!
 
Jordi Vives
Journaliste, Rédacteur
Ex: http://www.lesobservateurs.ch
 

De la communauté au communautarisme il n'y a qu'un pas que l'on franchit souvent de manière naturelle sans s'en rendre compte. Aujourd'hui, contrairement à ce que l'on pourrait croire, l'esprit communautaire est très fort et on définit les gens non par les caractéristiques qui les unissent mais par celles qui les différencient des autres. Origines ethniques, orientations sexuelles, catégories socio-professionelles... autant de marqueurs identitaires qui expriment ce que l'on est par rapport à l'autre.

Alors quand un attentat islamiste vise une boite de nuit gay à Orlando et fait cinquante victimes, c'est toute la communauté LGBT à travers le monde qui s'indigne. Un reflexe communautaire naturel que l'on peut difficilement blâmer. Mais quand une personne n'appartenant pas à cette communauté et, qui plus est, un opposant au lobby LGBT, s'indigne également de cette attaque terroriste à Orlando, celle-ci est jugée comme déplacée voir hypocrite. C'est ce qui est arrivé à Christine Boutin. Il est de notoriété publique que la présidente d'honneur du Parti Chrétien Démocrate et les LGBT entretiennent des relations plus qu’exécrables. Aussi quand Christine Boutin exprime sur Twitter sa compassion avec les victimes d'Orlando, la communauté LGBT crie au scandale.

Pourtant, ceux qui considèrent les propos de Christine Boutin comme étant une « honte » oublient une chose. Que l'on soit Christine Boutin ou un militant LGBT, l'espérance de vie face aux tueurs de l’État Islamique est des plus limité. Les terroristes islamistes ne font, eux, aucune distinction entre un chrétien pratiquant et un homosexuel, si ce n'est peut être dans la façon de les massacrer. De même qu'ils ne font pas de distinction entre des jeunes bobos qui vont à un concert au Bataclan et des prolos qui vont voir un match de football au Stade de France.

La guerre que mène l’État Islamique dépasse très largement notre perception du monde actuel. La démarche de cette organisation terroriste s'inscrit dans une guerre qui est à l'échelle des civilisations. Ce qu'ils veulent c'est, au mieux, nous convertir de force à l'Islam, au pire, nous exterminer. C'est donc un véritable défi que nous impose l’État Islamique. Un défi qui est, non pas technique ou militaire, mais quasi-philosophique pour nos sociétés occidentales. Nous qui rejetons par universalisme la réalité même des civilisations, comment pouvons nous être armés moralement face à cet ennemi ?

Aussi il est nécessaire de revoir notre copie et ne plus penser le monde comme un vaste ensemble indéfini. Notre civilisation occidentale marquée par un fort esprit de liberté et donc forcément diverse, n'est pas universel. Le monde entier ne rêve pas de vivre selon notre mode de vie. A l'inverse, à l'intérieur même de notre civilisation, il est, plus que jamais, nécessaire de faire abstraction de nos mésententes. Face à un islamisme conquérant, nous ne pouvons faire preuve de faiblesse. Evidemment nous pouvons nous quereller entre nous sur des sujets loin d'être insignifiants mais lorsque notre civilisation est attaquée, notre riposte se doit de ne souffrir d'aucune division. Alors les militants LGBT et Christine Boutin n'ont pas le choix, s'ils veulent pouvoir continuer à se taper dessus demain, ils doivent, aujourd'hui, s'unir pour continuer à exister.

10:01 Publié dans Actualité | Lien permanent | Commentaires (0) | Tags : orlando, terrorisme, états-unis, homophobie, actualité | |  del.icio.us | | Digg! Digg |  Facebook

La Alianza del Pacífico y la Doctrina Monroe



Ex: http://www.katehon.com

La importancia de la Alianza del Pacífico fue destacada por el analista y economista Jorge González Izquierdo, quien dijo a la AFP que este bloque en lo político “es un contrapeso al grupo que quiso formar el presidente Hugo Chávez de Venezuela”, en alusión a la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA), integrada por Venezuela, Cuba, Bolivia, Nicaragua, Dominica, Ecuador, San Vicente y Las Granadinas y Antigua y Barbuda. Así, tras una fachada neoliberal, se escondería un refinado proyecto de ingeniería geopolítica cuya finalidad última sería dinamitar el proyecto político-integracionista representado por la UNASUR e intensificar la política de aislamiento de los Gobiernos progresista-populista de la región, en especial de Venezuela tras quedar huérfana del alma mater de la Revolución Bolivariana (Chávez) así como finiquitar el proyecto integrador económico del MERCOSUR, proceso de integración económico creado en 1991 tras la firma del Tratado de Asunción entre Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay al que posteriormente se habría incorporado Venezuela como Estado parte, quedando Bolivia, Colombia, Perú, Ecuador, Chile, Surinam y Guyana como “Estados asociados”.

Dicha estrategia fagocitadora tendría como objetivos a medio plazo aglutinar el Arco del Pacífico para integrar además a Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá e incorporar por último al Mercosur (Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay) , siguiendo la teoría kentiana del “palo y la zanahoria “ expuesta por Sherman Kent en su libro “Inteligencia Estratégica para la Política Mundial Norteamericana” (1949). En dicho libro, Kent afirma que “la guerra no siempre es convencional: en efecto, una gran parte de la guerra, de las remotas y las más próximas, ha sido siempre realizada con armas no convencionales: [...] armas [...] políticas y económicas. La clase de guerra en que se emplean [...] (son la) guerra política y la guerra económica.” Los fines de estos tipos de guerra fueron descritos por este autor de la siguiente manera: “en estas guerras no convencionales se trata de hacer dos cosas: debilitar la voluntad y la capacidad de resistencia del enemigo y fortalecer la propia voluntad y capacidad para vencer” y más adelante añade que los instrumentos de la guerra económica “consisten en la zanahoria y el garrote”: “el bloqueo, la congelación de fondos, el ‘boicot’, el embargo y la lista negra por un lado; los subsidios, los empréstitos, los tratados bilaterales, el trueque y los convenios comerciales por otro”.

Colonial-Territories-in-the-Pacific-Basin1.jpg

Brzezinski, México y Cuba

En el discurso de Obama ante el pleno de la VI Cumbre de las Américas celebrado en Cartagena (Colombia) en el 2012, recordó que la Carta Democrática Interamericana declara “que los pueblos de América Latina tienen derecho a la democracia y sus gobiernos tienen la obligación de promoverla y defenderla, por lo que intervendremos cuando sean negados los derechos universales o cuando la independencia de la justicia o la prensa esté amenazada”, advertencia extrapolable a Ecuador y Venezuela.

Por otra parte, la revista Foreign Policy, ( edición de enero-febrero, 2012), publicó un análisis de Brzezinski titulado “After America” (”Después de América”), donde analiza la tesis de la decadencia de los EEUU debido a la irrupción en la escena global de nuevos actores geopolíticos (China y Rusia) y de sus posibles efectos colaterales en las relaciones internacionales. Respecto a México, Brzezinski afirma que "el empeoramiento de las relaciones entre una América (EEUU) en declinación y un México con problemas internos podría alcanzar niveles de escenarios amenazantes". Así, debido al “caos constructivo” exportado por EEUU y plasmado en la guerra contra los cárteles del narco iniciada en el 2.006, México sería un Estado fallido del que sería paradigma la ciudad de Juárez, (la ciudad más insegura del mundo con una cifra de muertes violentas superior al total de Afganistán en el 2009), por lo que para evitar el previsible auge de movimientos revolucionarios antiestadounidenses se procederá a la intensificación de la inestabilidad interna de México hasta completar su total balcanización y sumisión a los dictados de EEUU.

En cuanto a Cuba, las medidas cosméticas tomadas por la Administración Obama (relajación de las comunicaciones y el aumento del envío de remesas a la isla así como el inicio de una ronda de conversaciones sobre temas de inmigración), dejan intacto al bloqueo y no cambian sustancialmente la política de Washington aunque reflejan el consenso de amplios sectores del pueblo norteamericano a favor de un cambio de política hacia la Isla auspiciado por la decisión del régimen cubano de terminar con el paternalismo estatal y permitir la libre iniciativa y el trabajo por cuenta propia. Sin embargo, la renovación automática por parte de EEUU por un año más del embargo comercial a la isla podría suponer para Cuba pérdidas estimadas en cerca de 50.000 millones de $ , no siendo descartable la firma de un nuevo tratado de colaboración militar con Rusia que incluiría la instalación de una base de Radares en la abandonada base militar de Lourdes para escuchar cómodamente los susurros de Washington y la instalación de bases dotadas con misiles Iskander, pudiendo reeditarse la Crisis de los Misiles (octubre 1962).

monroecart.jpg

¿Hacia el final de Petrocaribe?

Petrocaribe fue creado en 2005 por iniciativa de Venezuela con el objetivo de suministrar combustibles a los países miembros en condiciones ventajosas de pago, como créditos blandos y bajas tasas de interés y estaría integrado por 18 países (incluidos Honduras, Guatemala, Cuba, Nicaragua, República Dominicana, Haití, Belice y una decena de islas del Caribe) y según las autoridades venezolanas, el país exporta 100.000 barriles diarios a los países del bloque que generaban una factura de 4.000 millones de dólares, de la cual una parte se paga en "efectivo" y el resto estaría subsidiado. La nueva estrategia de EEUU sería estrechar lazos comerciales y militares con los países de Petrocaribe ante el peligro de contagio mimético de los ideales revolucionarios chavistas al depender en exclusiva de la venezolana Petrocaribe para su abastecimiento energético, empezando por el presidente dominicano Danilo Medina. Así, según la agencia EFE, el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, en una conferencia sobre energía y cambio climático en el centro de estudios Atlantic Council de Washington afirmó que “si Petrocaribe llegara a caer debido a los acontecimientos en Venezuela, podríamos acabar con una grave crisis humanitaria en nuestra región". Asimismo, el pasado enero, el Gobierno estadounidense celebró una Cumbre de Seguridad Energética en el Caribe en la que instó a los países de la región a diversificar sus fuentes de energía, confiar más en las inversiones privadas y reducir así su dependencia de Petrocaribe. Por otra parte, China habría asumido el reto de construir el Gran Canal Interoceánico en Nicaragua para sortear el paso del estrecho de Malaca, (dicho estrecho es vital para China al ser la ruta principal para abastecerse de petróleo pero se habría convertido “de facto” en una vía marítima saturada y afectada por ataques de piratas), por lo EEUU procederá a desestabilizar el gobierno de Daniel Ortega dentro de su estrategia geopolítica global de secar las fuentes energéticas chinas.

Venezuela como víctima colateral de la Guerra Fría EEUU-Rusia

En Venezuela, asistimos a una imposible cohabitación política y a una división casi simétrica de la sociedad venezolana que será aprovechado por EEUU para implantar “el caos constructivo de Brzezinski” mediante una sistemática e intensa campaña desestabilizadora que incluirá el desabastecimiento selectivos de artículos de primera necesidad, la amplificación en los medios de la creciente inseguridad ciudadana y la posterior petición al Ejército para que se erija en “salvador de la Patria”, plan diseñado por la CIA y que contando con la inestimable ayuda logística de Colombia (convertida en el portaaviones continental de EEUU), podría llegar a finiquitar el régimen post-chavista. Así, el acuerdo chino-venezolano por el que la empresa petro-química estatal china Sinopec invertirá 14.000 millones de dólares para lograr una producción diaria de petróleo en 200.000 barriles diarios de crudo en la Faja Petrolífera del Orinoco, (considerado el yacimiento petrolero más abundante del mundo), sería un misil en la línea de flotación de la geopolítica global de EEUU (cuyo objetivo inequívoco sería secar las fuentes energéticas de China), por lo que no sería descartable un intento de golpe de mano inmediato de la CIA contra Maduro.

Brasil y Argentina, los nuevos gendarmes neoliberales de Sudamérica

Brasil forma parte de los llamados países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y aunque se descarta que dichos países forman una alianza política como la UE o la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN), dichos países tienen el potencial de formar un bloque económico con un estatus mayor que del actual G-8 (se estima que en el horizonte del 2050 tendrán más del 40% de la población mundial y un PIB combinado de 34.951 Billones de $) y el objetivo inequívoco de Putin sería neutralizar la expansión de EEUU en el cono sur americano y evitar la posible asunción por Brasil del papel de "gendarme de los neoliberales" en Sudamérica, pues Brasil juega un rol fundamental en el nuevo tablero geopolítico diseñado por EEUU para América Latina ya que le considera como un potencial aliado en la escena global al que podría apoyar para su ingreso en el Consejo de Seguridad de la ONU como miembro permanente, con el consiguiente aumento del peso específico de Brasil en la Geopolítica Mundial.

Recordar que la decisión de la presidenta brasileña Dilma Rousseff de posponer su visita de Estado a Washington (decisión avalada por los principales asesores de Rousseff, entre ellos su antecesor y mentor Lula da Silva), entrañó el riesgo de una peligrosa confrontación entre las dos grandes potencias del continente americano, pues según Lula “los americanos no soportan el hecho de que Brasil se haya convertido en un actor global y en el fondo, lo máximo que ellos aceptan es que Brasilia sea subalterno, como ya lo fue”. Así, Rousseff tras afirmar que "el espionaje ilegal representa una violación de soberanía incompatible con la convivencia democrática entre países amigos", exigió a Estados Unidos explicaciones convincentes de las razones de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) para presuntamente violar las redes de computadoras de la petrolera estatal Petrobras y tras su enérgico discurso en la apertura de la 68 Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), se habría granjeado la enemistad de la Administración Obama que procederá a la implementación del "caos constructivo" en Brasil para desestabilizar su mandato presidencial (impeachement).

Respecto a Argentina, el Gobierno norteamericano felicitó efusivamente a CFK por su victoria electoral a través del portavoz para los asuntos de América Latina de EEUU, William Ostick quien transmitió la voluntad de la administración de Obama de "trabajar productivamente" con el gobierno argentino tras los últimos desencuentros entre ambas administraciones. No obstante, en el encuentro privado que mantuvieron en Cannes CFK y Obama en el marco del G-20, la mandataria argentina no habría sido sensible a las tesis de Obama y no habría aceptado la reanudación de ejercicios militares conjuntos con EE.UU en territorio argentino coordinados por EEUU,( pues de facto habría significado la ruptura de la nueva doctrina militar diseñada para la región por los gobiernos que suscribieron la UNASUR, cuyo primer Secretario General fue precisamente Néstor Kirchner) por lo que CFK se habría convertido en un elemento incómodo para la estrategia fagocitadora de EEUU. Así, tras la victoria de Macri, asistiremos al ingreso de Argentina en la Alianza del Pacífico, quedando tan sólo Venezuela, Ecuador, Nicaragua, Bolivia y Brasil como países díscolos a las tesis de una EEUU que procederá a implementar la política del Big Stick o “Gran Garrote”, (cuya autoría cabe atribuir al presidente de Estados Unidos Theodoro Roosevelt), sistema que desde principios del siglo XX ha regido la política hegemónica de Estados Unidos sobre América Latina, siguiendo la Doctrina Monroe ,“América para los Americanos”. Estaríamos pues en vísperas de la irrupción en el escenario geopolítico de América Latina de una nueva ola desestabilizadora cuyos primeros bocetos ya están perfilados y que terminará de dibujarse en esta década) y que tendrán a Honduras y Paraguay como paradigmas de los llamados “golpes virtuales o postmodernos “que protagonizará EEUU en esta década en el nuevo escenario panamericano, con lo que el concepto de Patria Grande expuesto por Manuel Ugarte en su libro homónimo de 1922 quedará como utopía inalcanzable.

vendredi, 17 juin 2016

Donbass and Syrian Fronts: Two stages of a Single War

poutine-carte-CRIMEE.jpg

Donbass and Syrian Fronts: Two stages of a Single War

Geographic realities are stable and permanent. They actually matter and all the idealistic disguises created to wage useless wars or delaying wars (Carl Schmitt) are only ponderous parasitic burdens to blind the naïve.

Robert Steuckers

Ex: http://deliandiver.org

I have always insisted on the fact that these both war stages were strategically linked. It would be silly to believe that the Syrian situation has nothing to do with the stalemate in East Ukraine. Historically both areas are so-called “gateway regions” on the rimlands around the Russian dominated heartland as the US geostrategist Saul B. Cohen could demonstrate in his works. As the globalist geopolitics of the United States aims at preventing any Pan-Eurasian synergies in the Old World (or on the World Island to take over MacKinder’s vocabulary) or any long term cooperation between Central Europe and Russia, it’s quite natural to let organize by dubious proxies skirmishes or long term wars on territories that could have an important linking function between major regions on the Eurasian continent. The present-day Ukrainian territory East of Crimea linked Europe (represented by the Genoese and Venetian commercial bases) to Asia at the time of Marco Polo, the great Mongol Khans or even later. The Syrian coast was the entrance gate to the long land roads to India and China. The vital necessity to control it, lead to the eight crusades Western Europe waged during our Middle Ages (Spengler explained why the notion of Middle Ages is only valid for Europe).

syrie_finie_png.jpg

Geographic realities are stable and permanent. They actually matter and all the idealistic disguises created to wage useless wars or delaying wars (Carl Schmitt) are only ponderous parasitic burdens to blind the naïve. That’s what MacKinder tried to explain in his too often forgotten book Democratic Ideals and Realities (several modified editions between 1919 and 1947). Today these two gateway regions, if they would be pacified, could secure the transit of goods and raw materials by roads, pipelines and railways between East Asia, Iran and Europe (in the case of Syria) and between China, Russia and Germany (in the case of Ukraine). What matters today are what I would call the post-Marxist and “Listist” projects China is coining thanks to its overflow of cash and in the framework of BRICS or Shanghai Group with the consent of Kazakhstan and Russia. I speak of a “Listist” perspective on continental organization as the main theorist of development in world history is indubitably Friedrich List. He helped to develop the railway communication system in 19th century Germany, accelerating the unification of the country and its industrialization. Without List, no one would have ever spoken of a German political or economic power. He also favoured the digging of canals both in the United States (he was made an American citizen) to link the Great Lakes area to the East coast harbours and in Germany to link all the river basins between the Vistula and the Meuse in the Prussian dominated Northern European plain. Without List’s genius, no one would have ever spoken of an early American global agricultural power as the wheat belt couldn’t have been properly exploited without a bulk transportation link to the Atlantic coast.

According to List, who thought in multipolar continental terms and favoured soft unification projects under the lead of technological development, the role of the State was to sponsor communication to help developing and creative private industrial and technological forces to thrive (Schumpeter). In this sense, List was a “constructive liberal”, a figurehead of a non conservative efficient praxis that could have annihilated the negative aspects of common liberal ideology.

The Chinese pioneers at the end of the moribund Chinese Empire in the late 1890s and at the beginning of the Republican challenge that lead to the nationalist Sun Ya Tsen revolution in 1911 were all mainly inspired by List who had quite a lot of Chinese disciples. After the paralysing troubles of civil war, of civil dissent caused by warlords, by the long Japanese occupation, communist rule and cultural revolution, China abandoned secretly all the Marxist humbug of the Maoist era (not too obviously in order not to stir too much worry among the masses and the party members). They indeed rediscover List and his ulterior followers and programmed plans akin to the ones he once drew for the United States and Germany.

These plans gave economical, industrial and agricultural powers to both countries. Present-day ideological divagations induce confusion and stir conflicts in order not to repeat positive plans to develop communication that were set up and achieved for the benefit of all the people on Earth. Therefore horrible and useless wars are waged in Syria and in the Donbass area and could be extended to the Caucasus (Chechnya, Dagestan, Ossetia), to East Turkey (Kurds against the Turkish government) blocking for long decades the possibility of expanding railways, pipelines and roads.

(Brussels and Forest-Flotzenberg, June 2016).

mardi, 14 juin 2016

États-Unis : les Présidents passent, les néoconservateurs restent

hillneocon.jpg

États-Unis : les Présidents passent, les néoconservateurs restent

Par Karel Vereycken

Ex: http://www.agora-erasmus.be

Vendredi 3 juin 2016 - Wall Street et la City veillent depuis toujours sur la pensée stratégique américaine. Dans un monde où tout le système financier frôle la faillite, affirmer avec détermination et arrogance sa puissance militaire devient en définitive l’ultime caution permettant au système de « tenir ».

Certains se rappellent sans doute du Project for a New American Century (Projet pour le Nouveau Siècle Américain, PNAC) ce think-tank washingtonien d’où sont sortis les plus va-t-en guerre des néoconservateurs américains de l’administration Bush : Richard Perle, John Bolton, Donald Rumsfeld, Frank Gaffney, Paul Wolfowitz, William Kristol et Robert Kagan, un ancien de l’administration Reagan.

L’Amérique, disaient-ils, agissant sous les auspices de Mars, dieu de la guerre, se doit de faire « le sale boulot » contre les puissances émergentes que sont la Russie et la Chine, alors que la vieille Europe, endormie par Venus, la déesse de la paix, sombre dans un pacifisme hautement suspect et coupable.

Les guerres « contre le terrorisme », lancées après le 11 septembre, avec l’inévitable Tony Blair, pour imposer des changements de régime en Afghanistan, en Irak, et ailleurs, c’est eux. Les révolutions de couleur, c’est eux encore.

Si en novembre 2008, le peuple américain, en élisant comme président Barack Obama, avait espéré un moment pouvoir se débarrasser de cette folie guerrière, amère fut la déception.

JPEG - 37.8 ko
Robert Kagan, chef du clan des neoconservateurs, et son epouse, l’ancienne secretaire de Dick Cheney, Victoria Nuland, pressentie pour devenir la prochaine secretaire d’Etat americaine, en cas de victoire d’Hillary Clinton.

Une équipe néoconservatrice à la Maison Blanche

Obama n’a pas seulement nommé en 2013 Susan Rice (sans parenté avec Condoleeza Rice), une louve néoconservatrice « déguisée en mouton » partisane enthousiaste de la guerre contre l’Irak et favorable à ce que les États-Unis fassent un coup d’État au Honduras, comme sa conseillère nationale de Sécurité.

Avec Samantha Power, l’ambassadrice US aux Nations Unies intime de George Soros, et Hillary Clinton, la Secrétaire d’État, c’est Susan Rice qui a organisé la guerre contre la Libye en 2014 et a ordonné la mise à mort barbare de Kadhafi. Rappelons que c’est Mme Clinton, sur l’insistance de Madeleine Albright, qui a fait embaucher la secrétaire de Dick Cheney Victoria Nuland (l’épouse de Robert Kagan). Avec Rice, c’est Nuland qui a organisé le coup d’État en Ukraine pour intimider la Russie en s’appuyant sur les mouvances néo-nazies.

Ainsi, comme des cafards qui auraient pondu leurs œufs dans les murs plâtrés de la Maison Blanche, cette fine équipe est déjà à la manœuvre pour façonner la politique étrangère de la prochaine administration. Les Présidents changent, la politique de Wall Street demeure.

Si le PNAC fut dissout en 2006, dès 2009 le « clan Robert Kagan », sous l’étiquette « Center for a New American Security (Centre pour une nouvelle sécurité américaine – CNAS) », a mis sur pied un nouveau think-tank dont les objectifs diffèrent en rien avec ceux du PNAC. Parmi la trentaine de permanents du CNAS, un bon nombre cumule cette fonction avec un poste dans l’administration Obama.

Hillary Clinton pressentie par le clan Kagan

Pour sa part, Robert Kagan, un ancien de l’administration Ronald Reagan, vient de déclarer que Donald Trump et les Républicains lui donnent la nausée au point qu’il s’oriente désormais vers Mme Clinton dont la politique étrangère lui convient a merveille. Reconnaissante, cette dernière a fait savoir quelle n’exclut pas de nommer son épouse, Victoria Nuland, comme secrétaire d’État !

Le dernier rapport du CNAS, « Étendre la puissance américaine » « Des stratégies pour étendre l’engagement américain dans un ordre mondial compétitif » (mai 2016) vise à fixer le cadre pour cette perspective. Et le 21 mai, un éditorial signé par la rédaction du Washington Post intitulé « L’ordre international de liberté est sous attaque. Les États-Unis doivent le défendre », se réjouit du rapport du CNAS, en défense, comme lors de la guerre froide, du « monde libre ».

En voici quelques extraits :

« Pas un jour ne se passe sans que la démonstration soit faite que l’ordre international de liberté des sept dernières décennies est érodé. La Chine et la Russie tentent de façonner un monde à l’image de leur propre ordre sans liberté ; l’Angleterre se débat pour partir de l’UE ; le candidat en tête aux élections autrichiennes craint les migrants, le commerce et la globalisation et les parties d’extrême droite montent en Europe. Daech répand une violence sans merci sur son propre territoire en Irak et en Syrie et exporte le terrorisme ailleurs. Aux États-Unis, celui qui risque de devenir le candidat républicain Donald Trump a capté des millions de voix en faisant campagne contre quelques uns des fondements du leadership américain tels qu’une alliance défensive avec le Japon et la Corée du Sud, alors que le candidat démocrate Bernie Sanders a attiré des millions d’électeurs en leur promettant des mesures protectionnistes.

Cela mettra au défi le prochain président américain. Car peu importe celui qui occupera le bureau ovale, cela nécessitera du courage et des décisions difficiles pour sauver l’ordre de liberté international. Comme le précise le nouveau rapport du CNAS, cet ordre mérite d’être sauvé et cela vaut la peine de rappeler pourquoi : il a généré une prospérité globale sans précédent, il a sorti des millions de gens de la pauvreté et a permis à des gouvernements démocratiques, jadis rares, de s’installer dans plus de 100 pays et d’empêcher durant sept décennies des guerres cataclysmiques entre les grandes puissances. Ces réalisations impressionnantes nécessitent une nouvelle impulsion des États-Unis et de l’Europe, et pourtant, le débat public va dans l’autre direction. Comme le précisent les auteurs du rapport, beaucoup de gens s’inquiètent du repli sur soi des États-Unis et demandent qu’ils fassent plus et pas moins. Ils ne veulent pas succomber aux valeurs des présidents Vladimir Poutine de Russie et Xi Jinping de Chine, qui rejettent la démocratie, ne sont redevables à personne et rejettent la dignité humaine.


Comment réagir ?

En renforçant toutes les composantes de la puissance américaine : diplomatique, économique et militaire, une solution chère, mais faisable. En Asie, le partenariat transpacifique (TPP), c’est-à-dire l’accord de libre échange doit être ratifié. Les États-Unis doivent continuer à tenter d’intégrer la Chine dans les règles et les traditions de l’ordre international de liberté – un effort de huit administrations américaines – tout en déployant des forces pour affronter les confiscations unilatérales de territoires en mer de Chine méridionale. De la même façon, stabiliser l’Ukraine et la sauver économiquement feront d’elle un bastion contre la subversion violente russe. Plus doit être fait pour protéger les pays baltes… »

 

Tout ceci démontre que tout citoyen qui, au lieu de s’engager dans un combat de fond sur les idées, se satisfait à « voter utile » ou pour « le moindre mal », manque gravement de sérieux en ce qui concerne sa survie et de celle de sa progéniture.

Source : Solidarité & Progrès

lundi, 13 juin 2016

Les étudiants américains et leur lutte contre les «auteurs blancs décédés»

unfair-real.jpg

Les étudiants américains et leur lutte contre les «auteurs blancs décédés» (suite et non fin)

Ex: http://www.pouruneecolelibre.com

Une pétition lancée par des élèves de la prestigieuse université américaine veut « décoloniser » le programme de littérature anglaise qui ne ferait étudier que des auteurs blancs, morts de surcroît.

Étudier Shakespeare serait-il une forme de discrimination ? C’est ce que suggère une pétition lancée par des étudiants de la très prestigieuse université américaine de Yale. Ils veulent « décoloniser » les programmes universitaires. En cause, le cours d’« introduction aux « grands poètes de la langue anglaise », obligatoire en première année de littérature anglaise, qui ne met au programme que des auteurs blancs. Au menu, on trouve en effet les plus grands noms du corpus canonique de la langue anglaise : Geoffrey Chaucer, Edmund Spenser, William Shakespeare, John Donne, John Milton, Alexander Pope, William Wordsworth, et T.S. Eliot.

dead-white-authors.jpg

W. Shakespeare, son étude obligatoire sera préjudiciable
pour tous les étudiants en littérature anglaise de Yale

« Il est temps pour la licence de littérature anglaise de décoloniser — et non pas diversifier — ses cours. Il est inadmissible qu’un étudiant de Yale voulant étudier la littérature anglaise ne lise que des auteurs blancs » écrivent les pétitionnaires. [Note : ceci est faux. Il existe des cours optionnels où l’on étudie des auteurs de couleur, voir par exemple ENGL 306 (Afro-américains), ENGL 352 (Asiatico-américains), etc.] Les élèves demandent l’abolition de l’étude des principaux auteurs anglais, pour « inclure des littératures en rapport avec le genre, la race, le capacitisme [Note : discrimination liée au handicap] et l’ethnicité ». « Une année passée autour d’une table de séminaire où les contributions littéraires des femmes, des personnes de couleur, des queer sont absentes sont néfastes pour tous les étudiants, peu importe leur identité », arguent les pétitionnaires qui parlent un peu vite pour tous les étudiants. S’ils insistent sur le fait que ce programme créerait « une culture spécialement hostile aux personnes de couleur », ils déclarent bien que le programme est nocif, néfaste (harmful) envers tous les étudiants. On aimerait bien en savoir plus sur les étranges raisons qui permettent aux pétiionnaires d’affirmer cela.

La pétition, qui aurait recueilli 160 signatures (la liste est anonyme), n’est pas du goût de tout le monde. « Je suis trop las de commenter de telles sottises », soupire Harold Bloom, un prestigieux professeur d’Humanités de Yale dans le Daily Beast. Kim Holmes, auteur conservateur a, quant à lui déclaré, dans le Washington Times : « Ce n’est pas seulement une offense au savoir, mais à l’idée même d’une éducation libérale. » « Ces gens ne sont pas intéressés par la diversité, mais par la conformité », déplore-t-il. « C’est un mouvement idéologique qui a pour but de fermer les gens à la grande richesse de savoir et de sagesse de la civilisation occidentale. »

Ironie du sort, les étudiants qui réclament un Yale plus « inclusif » intellectuellement ne semblent avoir aucun problème avec le manque patent de diversité politique à l’université Yale. Selon un article écrit en 2012 dans le Yale Daily News, 97 pour cent des contributions politiques des employés de Yale sont allées au Parti démocrate.

Chasse aux « mâles blancs européens morts »

La chasse aux « mâles blancs européens décédés » ne date pas d’hier. C’est une polémique qui revient régulièrement sur le tapis aux États-Unis, en particulier sur les campus américains où le « politiquement correct » règne en maître. L’impératif de « décolonisation » des savoirs universitaires ou de la culture tire ses origines des études dites « postcoloniales ». Née aux États-Unis dans les années 80 sous l’influence notable d’Edward Saïd, cette branche de la sociologie prétend déconstruire l’héritage culturel laissé par la colonisation pour donner une part plus visible aux minorités. En 1992 déjà, le professeur de littérature Bernard Knox avait pris la défense des « Plus anciens mâles blancs européens décédés » dans un livre du même nom où il plaidait pour la préservation des grands classiques.

Yale est à la pointe de ce combat censément antiraciste qui s’apparente à la police de la pensée. En décembre 2015, une professeur avait dû démissionner après avoir envoyé un courriel critiquant la position de l’université sur les déguisements d’Halloweeen.

Les petits Robespierre de Yale

Comme c’est le cas depuis des années, le comité des affaires interculturelles de Yale avait auparavant envoyé un courriel appelant les étudiants à faire preuve de discernement pour les costumes d’Halloween. Il est désormais de mauvais ton aux États-Unis d’arborer un visage noirci au charbon pour incarner un loup-garou, car cela pourrait être interprété comme un dénigrement des Noirs ; ou il est peu recommandé pour les blondes de se déguiser en Mulan ou de porter une coiffe à plumes, car les étudiants indiens américains ou chinois pourraient percevoir ces choix comme « l’appropriation d’une autre culture ». C’est dans ce contexte miné qu’Ericka Christakis a appelé dans son mail les étudiants « à juste détourner la tête » si quelque chose ne leur plaît pas, ou à exprimer leur désaccord. « Les universités américaines… deviennent de plus en plus des lieux de censure… Sommes-nous d’accord ? » écrit-elle. Des mots qui vont déclencher la tempête.

« Sentiment d’invisibilité »

Du coup, son mari est venu à la rencontre des « indignés » de Yale. Mais l’entretien dégénère. « Vous devez vous excuser ! » lance une étudiante qui hurle de plus en plus fort. « Non, je ne suis pas d’accord », répond Christakis, qui écoute avec une patience infinie. Il répète qu’il comprend « la souffrance » des étudiants de couleur, mais qu’il ne s’excusera pas. « Alors, qu’est-ce que vous foutez à ce poste ? » continue l’étudiante afro-américaine, perdant son sang-froid. « Votre boulot ne consiste pas à créer un débat intellectuel… Comment faites-vous pour dormir la nuit ? Vous êtes répugnant », conclut-elle. Scène stupéfiante. Est-on vraiment à l’université de Yale, ce haut lieu de culture ? L’étudiante ne sera ni renvoyée ni réprimandée. Des manifestations vont au contraire démarrer, pour demander la démission… des Christakis.
 
 


Quand Le Figaro s’est rendu sur place quelques jours plus tard, un calme trompeur plane sur Yale. En face de la bibliothèque Sterling, véritable cathédrale d’architecture néogothique, les étudiants s’attardent sur les bancs. Mais la plupart restent silencieux sur la fronde qui couve. Les rares qui parlent ne donnent pas leur nom et s’empressent de souligner à quel point ils se sentent « en phase » avec les revendications des « insurgés ». Ce qui frappe, c’est que leur langage est idéologique et codé. Ils parlent « racisme institutionnel », « privilèges blancs », « sentiment d’invisibilité ». Mais ils restent vagues sur tout exemple concret de racisme. Seul incident évoqué, en dehors du courriel : le fait qu’une étudiante noire aurait été laissée à la porte d’une soirée organisée par la fraternité Sigma Alpha Epsilon. Le videur aurait déclaré que seules « les filles blanches » étaient acceptées. La Fraternité a nié catégoriquement l’incident et rappelé que nombre de ses membres sont noirs. Mais le doute, véhiculé par les réseaux sociaux, persiste. Les étudiants sont également nombreux à penser que les Christakis devraient quitter Silliman, parce qu’ils n’ont pas « protégé » les sensibilités des jeunes dont ils ont la charge. « Ils ont profité de leur position de pouvoir », répètent-ils.

Zachary Young, 20 ans, qui préside une association dédiée à la libre parole, a recueilli 800 signatures pour défendre le couple. Membre du collège Silliman, cet étudiant se dit indigné de la manière dont Nicholas Christakis, « un libéral, très à l’écoute », a été traité : « Les étudiants disent être déstabilisés de le croiser à la salle de gym ! C’est puéril ! » « S’ils veulent se battre pour la justice sociale, qu’ils aillent voir les discriminations qui persistent dans les ghettos noirs de New Haven, à quelques kilomètres. Ils parlent du “privilège blanc”, mais ne voient-ils pas qu’ils font aussi partie des privilégiés ? » renchérit une étudiante étrangère qui taira son nom de peur d’être « lynchée » par ses pairs…

« Règne du politiquement correct »

Ces deux jeunes conservateurs — une rareté sur les campus — disent aussi « ne pas être surpris par la révolte » vu « le règne du politiquement correct ». Zach Young mentionne la vague récente d’annulations d’invitations de conférenciers jugés « non conformes », comme la musulmane laïque Ayaan Hirsi Ali ou la directrice du FMI, Christine Lagarde, au nom « du droit à ne pas être offensé ». « Je ne suis pas d’accord avec l’idée qu’il existe ici une oppression raciale systémique vis-à-vis des minorités. Cette université est certainement l’une des plus inclusives du pays », dit-il, notant en riant que les conservateurs sont peut-être les plus discriminés. L’avocat Floyd Abrams, ancien de Yale et spécialiste du premier amendement, estime qu’« il faut répondre au malaise des étudiants de couleur ». Mais il met en garde « contre la tendance grandissante à exiger des limitations à la liberté de parole, notamment dans les salles de classe ». « Exiger de mettre au rancart des œuvres intellectuelles majeures sous prétexte qu’elles pourraient offenser certains, c’est très dangereux. Si les Christakis étaient poussés à partir, ce serait un signe terrible envoyé par l’université. »

Yale cède et embauche davantage de professeurs afro-américains

Après avoir pris son temps, Yale a finalement refusé l’ultimatum étudiant et conforté les Christakis à leur poste. Acceptant en revanche d’autres revendications, comme l’embauche de davantage de professeurs afro-américains, la mise en place d’un soutien psychologique plus actif et de formations des enseignants aux questions de discrimination.

Cette navigation prudente traduit l’inquiétude des autorités, alors que les protestations se sont répandues comme une traînée de poudre à travers d’autres universités du pays, touchant plus d’une centaine de campus. Le président de l’université du Missouri a dû par exemple démissionner sous la pression d’associations étudiantes noires et de l’équipe de football universitaire, pour ne pas avoir eu une politique d’inclusion des minorités suffisamment « active » après les émeutes de Ferguson. La grève de la faim d’un étudiant inspiré par ces événements a visiblement joué un rôle déclencheur. Mais ce qui frappe, comme à Yale, c’est qu’aucun fait précis de discrimination n’a motivé la « révolte », juste des sentiments diffus d’isolement et la découverte d’une croix gammée dessinée avec des excréments dans des toilettes…

« Déconstruction du modèle occidental »

Signe du vent révolutionnaire qui souffle, un professeur « coupable » de ne pas avoir annulé un examen pendant les manifestations a failli être forcé à la démission pour avoir manqué d’« empathie »…

Rapporter à a police tout « discours haineux »  

L’administration évoque désormais la création de règles enjoignant aux étudiants de rapporter à la police tout « discours de haine » qu’ils pourraient entendre en classe. « Une mesure très dangereuse », dit l’avocat Floyd Abrams. À Claremont McKenna College, en Californie, la doyenne a dû quitter son poste parce qu’elle avait proposé de faire plus pour intégrer « ceux qui ne sont pas dans le moule CMC », une formule jugée… raciste ! Au prestigieux collège Amherst, les étudiants exigent de débaptiser l’établissement — qui doit son nom à un général britannique de l’époque prérévolutionnaire — au motif qu’il avait suggéré de combattre les Indiens avec des couvertures infectées. Ils ont aussi réclamé des « excuses de la direction » pour « l’héritage institutionnel de la suprématie blanche » ainsi que pour « l’hétérosexisme, le cissexisme, la xénophobie » et autres discriminations. À Princeton, un débat féroce a surgi à propos d’un panneau mural mettant en scène l’ancien président Woodrow Wilson, soudain décrété infréquentable en raison de son passé esclavagiste…

Nombre de voix conservatrices comme libérales soulignent en revanche que les griefs des étudiants semblent largement nourris de la revanche identitaire véhiculée par le corps enseignant « progressiste » qui a fait main basse sur les humanités dans les facultés, faisant des études critiques et de la « déconstruction du modèle occidental » sa doxa.

Des universités de moins en moins blanches 
 
Ce mouvement s’étend en même temps que la clientèle des universités américaines devient de moins en moins blanche. Les blancs sont ainsi désormais minoritaires à Yale (voir ci-dessous) alors qu’ils formaient encore 77,4 % de la population américaine en 2014. Et pourtant Yale n’est classé que n° 124 au palmarès de la diversité ethnique des universités américaines.
 
Diversité ethnique de Yale (étudiants, 1er degré)
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
« Les héritiers postmodernes des marxistes ont ressuscité le prisme dominant-dominé en remplaçant simplement les ouvriers par les minorités sexuelles ou raciales. Le but est resté le même : lire le monde comme une éternelle bataille entre l’homme blanc, colonialiste et machiste, et ceux qu’il aurait toujours et seulement opprimés », regrettait ce printemps le professeur de théorie politique de l’université de Georgetown Joshua Mitchell. En écho à sa préoccupation, d’autres intellectuels s’inquiètent d’une révolution « culturelle » si préoccupée de diversité qu’elle annihile tout espoir de créer un socle commun entre communautés. Ainsi le New York Times rapporte-t-il la contre-attaque des anciens d’Amherst, qui se sont vigoureusement opposés en interne au changement de nom de leur alma mater. « Nous stérilisons l’histoire en éliminant les anciennes mascottes, a noté William Scott, diplômé de 1979, sur un site internet des anciens étudiants. C’est comme de brûler les livres. »

Nous assistons à la révolte de « petits Robespierre », avertit le Wall Street Journal. Clairement, la révolution culturelle des plus jeunes et leur tendance à la victimisation systématique commence à inquiéter les aînés.

Voir aussi

Des universités politiquement correctes qui doivent « protéger » leurs étudiants


Canada — Liberté d’expression et d’opinion menacée dans les universités

00:05 Publié dans Actualité | Lien permanent | Commentaires (2) | Tags : actualité, université, états-unis | |  del.icio.us | | Digg! Digg |  Facebook

dimanche, 12 juin 2016

James Burnham – Like Gramsci, Only Better

James_Burnham2.jpgIt is not enough to view intellectuals as the makers of political change through their transmutation of culture. It is also necessary to consider the state and the elite who will rule it. Politics becomes impossible to conduct without the type of hardworking, ruthless, and ambitious people who generally make up the political class.

James Burnham was an American political theorist who was a somewhat influential figure within the circles of American post-war conservatism. Like some others who joined the conservative movement during that time, Burnham was an ex-Trotskyite who had lost his faith in Communism and come over to the conservative side of politics. Among others, Burnham influenced the late Sam Francis, who was a journalist within the conservative movement, but who was later purged because of his heretical views on race and other topics. It was through some of Francis’ excellent articles published at Radix that I was introduced to Burnham to begin with.

One of the most important and engaging topics for the Alt-Right is the relation between culture and politics: so-called metapolitics. In this context, the Marxist theorist Antonio Gramsci is often put forward as an important thinker because of his thoughts about hegemony, the prerequisites for political change, and the necessity for intellectuals. My personal view, which I have argued for elsewhere, is that Gramsci is best understood as a form of constructivist, meaning someone who believes that reality is not a given but that it can be shaped and changed by ideas. As I read Gramsci, the Marxist trajectory is not as much revealed as it is created by convincing people of its truth. Borrowing a term from Simon Hix, Gramsci could be called a ‘strategic constructivist’, meaning someone who uses ideas strategically to reach a political goal.

There are, however, several weaknesses in Gramsci as a thinker. His first fault is, of course, that he was a Marxist, and was attempting to save a failing theory. Furthermore, he wrote down his thoughts under anything but ideal circumstances, having been jailed by the Italian state. As a result of this, his writing is often unsystematic, and the good points have to be singled out from a vast number of lesser points. I think that Gramsci touched on important topics, but much of his claim to fame was established by others after his death. Roger Scruton writes in his Thinkers of the New Left that the Left wanted a hero, after all the others had been defamed, and that they found a heroic figure in Gramsci as the martyr of their cause.

Gramsci touched upon important topics, and he was, to a degree, an original thinker. But there is much lacking in his analysis, and this is unfortunate. Gramsci’s analysis needs to be complemented by a more thorough one. Toward this end, I would like to discuss some of the ideas which were advocated by Burnham. It is my opinion that Burnham touched upon topics which, as with Gramsci, deal with the prospect of political change and how to bring a new political elite to power. The difference, as I see it, is that Burnham does a better job than Gramsci.

Managerial-revolution-1941.jpgHis books of greatst interest are The Machiavellians and The Managerial Revolution. The first one is mainly about the political theories of a number of thinkers who Burnham considered to be a part of what he called the Machiavellian tradition. The main argument of the book is that politics, defined as a struggle for power, can never be removed from human existence. In every society, there must be one group of people who rule, and one group who is the subject of that rule. In the second book, Burnham makes the case that a revolution is well under way, but not the type of revolution which is often advocated by the Left. The managerial revolution is taking place within the bureaucracy of the modern state, and is the revolution of the managers, at the expense of other forms of leadership.

In the first chapter of The Machiavellians, Burnham discusses the poet Dante Alighieri as an example of someone who promoted ideas which in practice had a different purpose than that which was stated by their author. The point of the chapter is to introduce a type of thinking which Burnham calls ‘anti-formalism’, and which is divided into two different meanings: the formal and the real. The formal meaning is the intention as it is explicitly stated by the author, and the real meaning is what this intention actually implies. Using Dante as an example, Burnham points to the fact that Dante advocated a number of normative principles which he believed should be defining characteristics of a good government. Dante also advanced the idea that the Emperor of the Holy Roman Empire should be sovereign in relation to the Pope.

Burnham further explores the meaning of anti-formalist thinking in the second chapter of The Machiavellians, which is about Machiavelli himself. In this chapter, Burnham elaborates on the Machiavellian tradition and its prospects for a political science. Burnham’s position is that politics should be studied in a scientific way, freed from various normative concepts, ethical systems, and the demands that they can make on a science. The Machiavellian way of thinking should not, says Burnham, be condemned because of its lack of adherence to some ethical system. It should only be judged in terms of how well its conclusions match the facts, as with all forms of science. Moreover, a political science should not pretend that politics is anything other than what it is: a struggle for power.

machiaV6IXJHqzL._UY250_.jpgWhen it comes to Dante, Burnham goes on to place his seemingly independent normative principles in their proper context. He shows that Dante had been involved in an extensive and lengthy conflict between the Ghibelline and the Guelph factions. Dante and the faction to which he belonged lost to their rivals, and he went to the Holy Roman Emperor to ask for his support. When these facts were presented, it became quite clear that Dante had put forward his principles with the hope of winning the good graces of the Emperor, and thus attempted to justify his rule. That is the true meaning of De Monarchia, as Burnham sees it.

Using Dante as an example can seem rather difficult to relate to, since he is virtually unknown as a political theorist, and is more or less exclusively regarded as a great poet. I think it’s more useful to apply the same analysis to schools of thought more relevant to our day instead. For illustrative purposes, we can say something about feminism. When feminism becomes involved in politics, it is often or always the case that its proponents advocate their suggested policies from the standpoint of normative principles; chiefly, equality between the sexes. From this standpoint, they often point out problems such as the idea that there are more men than women on executive boards, that male cultural symbols dominate the public sphere, that women in general have a more difficult time on the labour market because of motherhood, male discrimination, and so on. Or, in the case of Sweden, they claim that mothers in general make greater use of paid parental leave than do their husbands.

The suggested solution to perceived problems such as these are often to advocate various measures to be taken by the government. Agencies within the government should be allowed to dictate corporate policy and tell them who to hire and who not. Measures should be taken to do away with male symbols from public spaces. Parents should be forced to share parental leave equally, regardless of the wishes and needs of the individual family. Some feminist theorists, such as Nancy Fraser, propose openly that the government should assume control over corporate life in order to make sure that they hire equally, and that extensive and costly social strategies aimed at women can be paid for through taxation. The assumption made by people such as Fraser and her colleagues is that increased state powers are necessary in order to come to terms with inequality.

We could take Fraser and other feminists at face value and debate whether equality and their other proposed political measures are good or bad. But if we are to apply anti-formalism, we would instead draw the conclusion that these values are less important than the measures of power that they justify. And these particular principles justify encroachment by the state – and more specifically, certain groups within the state – at the expense of the business community and civil society. This is not really about which policies are good or bad, but about which groups are to decide on these things at the expense of other groups. As Burnham eloquently puts it:

We think we are debating universal peace, salvation, a unified world government, and the relation between state and church, when what really is at issue is whether the Florentine Republic is to be run by its own citizens or submitted to the exploitation of a reactionary foreign monarch. We think, with the delegates at the council at Nicea, that the discussion is concerned with the definition of God’s essence, when the real problem is whether the Mediterranean is to be politically centralized under Rome, or divided. We believe we are disputing the merits of a balanced budget and a sound currency when the real conflict is deciding what group shall regulate the distribution of the currency. We imagine we are arguing over the moral and legal status of the principle of the freedom of the seas when the real question is who is to control the seas. (Burnham, The Machiavellians, p. 16)

It shouldn’t be a surprise that Burnham had a cynical view of the role of some intellectuals and scientists. He held the view that those who contend for power will always find someone who is willing to be their spokesman and justify their rule through a philosophical or scientific system. Burnham elaborated his view on ideology further in The Managerial Revolution. The important thing here is that ideologies should be viewed as an expression of group interests. If an ideology happens to be dominant in a society, then it is connected to the group currently in power. This is the important thing for our purpose; not whether an ideology is true or false, good or bad, but rather that it expresses the will to power of a particular group.

Ideologies are often frowned upon as unscientific, or even mythic in essence. Burnham would agree completely with this view. But that doesn’t mean that  ideologies are not important and useful. Ideologies can convert people to a cause that they would not otherwise support. Ideologies can make people forget their own interests and instead pursue the interests of another group. If a group cannot produce a coherent ideology, can it be said to have any will to power? My answer is no. The Left has done a very good job during the course of the twentieth century in producing powerful and attractive ideological systems: Marxism, socialism, feminism, post-colonialism, and psychoanalysis. We also have ideologies emerging from what can be seen as a form of Right: neo-liberalism, Americanism, and individualism. Moreover, we have endless combinations of these ideologies.

webS+ZBL._SX298_BO1,204,203,200_.jpgIt is important not to overlook the importance of the managerial state, and the importance of the state in general. It is not enough to merely philosophise; there needs to be a political elite and a physical structure which underpins this elite. We can take Sweden as an example. Sweden took a turn toward the Left during the 1960s and never really recuperated. This was not achieved solely through the work of intellectuals and Leftist philosophical theories. What happened in addition to this was that a large number of people were recruited to work as functionaries and civil servants in the ever-growing state machinery. Social workers, teachers, and administrators were recruited and formed a bureaucracy the like of which Sweden had never experienced before. They became the new class of managers. Regardless of what kind of government gets elected, this establishment stays more or less the same.

Burnham deals with the question of the elites in Chapter Three, in which he discusses the theorist Gaetano Mosca. In this chapter, he stresses the importance of the ruling class:

From the point of view of the theory of the ruling class, a society is the society of its ruling class. A nation’s strength or weakness, its culture, its prosperity, its decadence, depend in the first instance upon the nature of its ruling class. (Ibid., p.67)

The ruling class is the group of people who can be successful in the struggle for power, namely politics. Typically, it is made up of people who can break through in the struggle and face its challenges. These people are usually not the wise and self-reflecting types. More successful traits include ambition, ruthlessness, and the capacity for hard work. Everyone who has ever been involved in politics knows that hens and peacocks seldom, or never, live long in a world dominated by wolves, vultures, and centipedes – in a word, predators. But taken at face value, no elite is so raw and unrefined. Usually, as Burnham emphasises, it expresses itself through some form of political formula or myth. As I stated above, the meaning of ideology is to express and direct the will to power of a particular group.

I draw the following conclusions from this discussion:

I: To begin with, it is not enough to view intellectuals as the makers of political change through their transmutation of culture. It is also necessary to consider the state and the elite who will rule it. Politics becomes impossible to conduct without the type of hardworking, ruthless, and ambitious people who generally make up the political class. Oswald Spengler described Caesarism as no one else could, but he could never have been a Caesar himself. Gramsci assigned the so-called ‘organic intellectuals’ an important role as the makers of political change, but they are not enough in themselves.

II: Nevertheless, the intellectuals are important. A group which contends for power needs a political myth or ideology to express its will to power and to justify their struggle and coming ascension to the position of the ruling class. It would seem that a group lacking such a formula will achieve no success in its endeavors. The political agents need to work together with the intellectuals: one group to formulate the ideas, and one group to express them. The present political elite justifies their actions through the framework of Cultural Marxism; it would have been impossible for them to act without this framework.

III: From a scientific point of view, Burnham is superior to Gramsci because he tells the truth about all politics, and not just about the politics of his adversaries. If we are to take Gramsci at face value, his theory describes how the Marxists are hindered in their struggle to express the true interests of the working class because they are under the spell of the bourgeois hegemony. The real meaning of Gramsci’s theory was, however, not to describe facts about political life but rather to create a myth strong enough to motivate the working class into changing their preferences, and throw in with the Left as it was. These Machiavellian insights can be applied to all political ideas – and not just from the perspective of one particular position.

To conclude, I think that the success of the Alt-Right will come when ambitious and somewhat ruthless people pick up its ideas and use them to serve their ambition. Such a person is Donald Trump, who represents the ideas of nationalism and populism. But this could never have happened without intellectuals who ‘memed into existence’, to use a clever and true phrase. Trump would still only be a successful businessman and TV celebrity without the nationalist ideas which he advocates, and which in turn justifies his struggle for power. The success of the ideas of the Alt-Right will mean the success of a new elite, and the success of this elite will mean the success of the Alt-Right.

About The Author

Anton Stigermark earned his bachelor’s degree in political science at Lund University and is currently pursuing his master’s degree at Uppsala University. As a writer of essays his main interest lies in culture, old and new, political theory, and intellectual history in the more general sense.

vendredi, 03 juin 2016

Andreas von Bülow: Kollateralschäden der US Strategie zur Weltherrschaft

Andreas von Bülow:

Kollateralschäden der US Strategie zur Weltherrschaft

samedi, 28 mai 2016

Les guerres de genre de Hillary Clinton

HillaryGenderCard.jpg

Les guerres de genre de Hillary Clinton

Ex: http://zejournal.mobi

Est-ce que les hommes qui votent pour H. Clinton vont finir en enfer ? Je n’en suis pas sûr. Nous savons que les femmes qui votent pour un candidat mâle y ont une place réservée, comme l’a prophétisé la vieille juive féministe Madeleine Albright, car elle est bien placée pour y entrer. Non seulement cette dame a l’air d’une créature sortie tout droit de l’enfer, mais en outre elle y siège de plein droit, pour avoir justifié le meurtre d’un demi-million d’enfants irakiens, parmi d’autres hauts faits. Mais alors qu’est-ce qui attend les hommes qui franchissent la barrière du sexe? Personnellement je ne les condamnerais pas. Cela  ferait du tort à Mm. Trump et Sanders, parce que les hommes n’ont pas de schéma « gender » en tête. Les hommes votent pour la cause qu’ils préfèrent, et ils détestent qu’on insinue que leur vote soit déterminé par ce qu’ils sont, et non par ce qu’ils pensent.

Les « minorités visibles » agissent selon ce qu’elles sont ; ce qui les  rend prévisibles et faciles à manipuler. H. Clinton a obtenu 90% du vote noir au Mississippi, un  résultat embarrassant pour Kim Jong Un de Corée du Nord. Les juifs ont donné 70% de leurs bulletins de vote à Obama, et le donnent à n’importe quel candidat à la présidence qui se réclame des Démocrates. Ce sont les politiques identitaires qui rendent possibles de tels scores ; et c’est précisément ce pour quoi elles ont été inventées et mises en circulation, avant toute autre raison. Vous n’avez quand même pas cru que les grands opérateurs se soucient le moins du monde des femmes, des noirs, des gays, des mères célibataires latinos, ou des jeunes désorientés qui risqueraient de se tromper de WC ?

La cause des minorités visibles a été inventée et mise en circulation pour des raisons techniques, parce que premièrement elles permettent d’occuper l’esprit des gens avec des absurdités triviales, deuxièmement elles permettent aux instigateurs de se draper dans le manteau de la justice, et troisièmement elles rendent les élections encore plus lisses et prévisibles que le choix du successeur du roi des Saoud ou de la reine d’Angleterre.

hillgendgtL._SX331_BO1,204,203,200_.jpgCes manœuvres visent leur ennemi principal, l’homme pensant. La masculinité est devenue un gros mot, selon un sondage qui révèle que seuls 2% des garçons anglais se considèrent comme « complètement mâles ». L’incarnation de la juste colère contre l’Occident, Poutine le Téméraire, est décrit comme un « macho », raison suffisante pour pousser au changement de régime en Russie. Dans un remake de Ghostbusters, les courageux guerriers contre les esprits du mal sont tout-féminin (une femme noire corpulente: voilà la formule encore plus politiquement correcte) tandis que l’homme blanc aspire à un poste de secrétaire pour la troupe. Dans un un univers culturel plus large, écrit Isabel Hardman, les hommes figurent dans les publicités comme des gens sans espoir, des bouffons gras tenant une bière dans une main et une paire de pinces pour barbecue dans l’autre, alors que les femmes vous font les yeux doux, et ont la main mise sur toutes choses, la maison, la voiture, la famille. Dans ce monde de masculinité en déroute, la victoire de Mrs. Clinton et la guerre qui s’en suivra sont inévitables.

Inévitablement, à moins que l’homme pensant américain retrouve ses esprits et sa place d’honneur dans cette société. Le commandement par les femmes n’est pas nouveau, et cela n’a jamais été une bonne chose. A l’aube de la civilisation, le culte féminin de Cybèle avait conduit à des castrations massives de jeunes hommes. Les cheffes menaient à la guerre et aux troubles encore plus vite que les chefs mâles. En Israël, notre dirigeante la plus célèbre, Golda Meir, est celle qui a nous a menés à la guerre sanglante d’octobre 1973. Et c’est Margaret Thatcher qui avait lancé la marine britannique contre les Argentins, et avait livré une guerre cruelle contre les mineurs britanniques.

Depuis Elisabeth I° d’Angleterre jusqu’à Catherine de Russie, les reines ont généralement poussé à la guerre. Frau Merkel a attiré les réfugiés pour l’invasion de son pays. Hillary Clinton a déjà quelques guerres derrière elle : elle a soutenu la guerre pour le Kossovo qui est devenu une base pour Daech en plein cœur de l’Europe. Sa guerre en Libye a installé une autre base de Daech sur le continent africain, et envoyé des vagues de réfugiés en Europe; et elle a remis ça en Syrie. Peut-être qu’elle serait plus indiquée pour se faire nommer au Caliphat voulu par Daech, plutôt que pour la présidence US.

Le dernier écrit de Jeffrey Stacey sur le site du Council for Foreign Affairs ne laisse pas de place au  doute : Clinton veut la guerre, et ses acolytes, comme Stacey, approuvent cette orientation. Obama est trop timide, pour eux, et Trump est le nouvel Hitler parce que (vous ne devinerez jamais) il ne veut pas faire la guerre aux Russes. Certains hommes, comme Stacey, sont nés pour servir Cybèle.

Le lien entre l’activisme juif et le féminisme violent est devenu plus évident que jamais, à l’occasion de la campagne électorale. Subterfuge juif classique, ils envoient une femme provoquer l’homme, et ensuite ils l’accusent de manquer à ses devoirs chevaleresques. Les activistes juives provoquent Trump et ceux qui le soutiennent (voir le cas de Julia Ioffe) juste pour arriver à la conclusion souhaitée : « que se passera-t-il si Donald Trump  est élu ? » Julia Ioffe a répondu : « nous avons vu comment il pousse ses supporteurs à attaquer les médias, ce qu’il mijote c’est de changer les lois contre la diffamation pour pouvoir poursuivre plus facilement les journalistes. » Le harcèlement supposé de la part des supporteurs de Trump n’est pas directement lié au candidat, admet le journal. Mais il a  fomenté une culture de la violence dans ses meetings, en encourageant ses fans à riposter contre ceux qui lui manifestent de l’hostilité »

Les Russes acceptent la menace clintonienne avec un fatalisme tranquille. Vladimir Poutine et son peuple sont décidés à rester  les maîtres du bras de fer des nations. Cela ne mène pas  forcément à la collision, parce qu’il y a de la place pour tout le monde, à moins que les autres veuillent la collision, comme le souhaite Clinton apparemment. La solution est entre les mains des Américains, des hommes américains : est-ce qu’ils retrouveront leur estime d’eux-mêmes et enverront la Clinton écrire ses mémoires et faire des conférences pour les banquiers, ou bien l’enverront-ils à la Maison Blanche pour se condamner eux-mêmes au rôle de courtisans dans la société?

Les femmes sont formidables et ce sont des créatures adorables ; les hommes recherchent leur amour, et s’inclinent devant elles avec admiration. Mais elle ne valent rien comme dirigeants. Les reines barbares étaient connues pour leur cruauté, y compris contre leurs « sœurs » à l’occasion. Hillary Clinton est capable  de les surpasser toutes, parce que la guerre qu’elle est capable de déclencher surpassera les guerres d’autrefois. La guerre nucléaire avec la Russie et la Chine ou contre celle-ci sera la dernière page de l’histoire de l’humanité telle que nous la connaissons ; et d’ailleurs, c’en sera fini aussi des guerres de « genre ».

Traduction : Maria Poumier

vendredi, 27 mai 2016

Is Jonah Goldberg Right About Fascism?

gottpaulb626e6785062374d45b25cc6e7f.jpg

Is Jonah Goldberg Right About Fascism?

By

At the recent Scholars’ Conference (sponsored by the L von M Institute) I asserted that while anti-New Deal commentators between the two wars were not entirely wrong in their analysis of fascism, current attempts to identify fascism with the Left are rarely more than GOP rhetoric.  Since this point may have puzzled my listeners, it may be helpful to explain what my statement meant. My clarification may be all the more necessary since I said roughly the same thing on Tom Woods’s radio program, without going into details. In the 1930s and 1940s, such critics of the New Deal and FDR’s liberal internationalism as John T. Flynn, Albert J. Nock, Garet Garrett and Frank Chodorov were fond of associating the politics of the American government with European fascism. This criticism went back to the 1930s and in the case of Flynn, was originally aimed at the Italian fascist regime. Flynn and his followers feared that fascism, which like the New Deal offered a halfway house between capitalism and socialism, was more insidious for the West than Communism:  “A man could support publicly and with vehemence this system of the Planned Economy without incurring the odium of being too much of a radical for a polite and practical society.” Fascism with its “Planned Capitalism,” insisted Flynn, was the “direct opposite of liberalism.” (Flynn in this passage was using the word liberal in its true historical sense.) This newly conceived regime was “an attempt, somewhere between Communism and capitalism, to organize a stable society and to do it by setting up a state equipped with massive powers over the lives and fortunes of its citizens.”

The Roosevelt Myth_Flynn.jpgFlynn’s still highly readable The Roosevelt Myth includes accurate, well-phrased observations, however much they may overestimate the staying power of the fascist model. But in his assumption that the fascist state would have long-term appeal, Flynn was hardly alone. In 1933, FDR and his Brain Truster Rexford Tugwell thought that fascism would be here to stay, and as late as 1940, James Burnham viewed it as one of the several forms of the modern administrative state —and possibly the most successful form that it would assume in the course of the twentieth century.

I should also indicate at this point what Flynn and his confreres never said. They did not claim that fascists were leftists, at a time when New Dealers and the editorial board of the very leftist New Republic imagined that Mussolini was their ideological ally. Critics of the New Deal who discerned overlaps between Mussolini and FDR pointed to a shared managerial style of rule. They viewed fascist Italy and welfare-state America as related threats to a liberal society, and the fact that FDR in the early and mid-1930s, before Mussolini’s sudden about-face and alliance with Nazi Germany, expressed admiration for his Italian counterpart, seemed to prove the validity of Flynn’s comparison.  I would not hold it against Flynn, Garrett, and Nock that they failed to anticipate my own arguments about Italian fascism. From their historical position, they may not have seen this development as a make-believe revolutionary movement, which came to power largely as a check on the revolutionary Left.

This was not obvious to most American observers in the 1930s, who may have been more likely to have noticed the political resemblances between fascist Italy and New Deal America. The extensive labor legislation introduced in America in the 1930s looked at least on paper like the “Labor Charter” introduced by Mussolini’s government in 1926. The pump-priming efforts undertaken by both governments to deal with the Great Depression were noticeably similar. Nor was there any reason in the early or mid- 1930s or perhaps even later for an intelligent foreign observer to think that fascism would soon be on its way out. By the early 1930s, there was a “fascist international” that sought to compete with the Communist movement for support throughout the world.  Italian fascist journalists were then taking the side of indigenous populations against English colonialism. (The Italian fascist government generally viewed England as their main rival; however between 1933 and 1936 Mussolini’s hostility was transferred temporarily to Nazi Germany.)

godwinslaw.jpgWhile New Deal critics tried to understand fascism in their time, today’s GOP propagandists do not try to understand anything about this interwar movement. They make their living by labeling the Democrats “fascists” and then identifying fascism and the Democrats with the Left.  Jonah Goldberg’s best-selling pseudo-scholarship Liberal Fascism (2007) may be the most popular example of this propaganda technique but (alas) Goldberg’s nonsense is far from the worst of its genre. In researching my monograph, I unearthed so many abuses of the “f” word by GOP publicists and conservatism, inc., that I finally gave up cataloging them. I also discovered that no one (except perhaps for old-fashioned Habsburg monarchists) really believes that “fascism” was or is a leftist movement. When neocons start screaming about “Islamofascism,” I doubt that they’re suggesting that Muslim terrorists and multicultural Americans are ideological soulmates.

By this point fascism is not an ideological reference point but the verbal equivalent of a chair that one throws at one’s enemy’s head. Just a few minutes ago, I found this substantiated when neoconservative luminary Robert Kagan announced that “Trump will bring fascism to America.” Finally, I can’t believe that anyone but a total idiot would imagine that American affirmative action programs (when enforced by Democrats but supposedly not Republicans) resemble Hitler’s exclusion of Jews from professions and from German citizenship during the 1930s. When I encountered this comparison in Goldberg’s turgid screed, I remember saying to myself I hope he’s joking or simply lying to sell books to Dittoheads. Any other reason for his lunatic statements is too scary to consider.

In any case, I get exasperated by those who try to trace Goldberg’s opinions back to Flynn and other anti-New Deal critics of fascism. Contrary to what is suggested in the introductory chapter of Fascism: Career of a Concept Goldberg and his fellow-publicists in the GOP establishment are not offering an interpretation of fascism that goes back to the interwar American Right. These specialists in PR have never thought seriously about the “f” word and happily run together Italian fascism, German Nazis, Hillary Clinton and whatever else the GOP establishment is currently running against.  By contrast, Flynn and others of his time and persuasion were better-informed analysts. Their critical commentaries on the “fascist revolution” and its relation to the New Deal are still worth revisiting.

00:05 Publié dans Histoire | Lien permanent | Commentaires (0) | Tags : paul gottfried, fascisme, histoire, états-unis | |  del.icio.us | | Digg! Digg |  Facebook

jeudi, 26 mai 2016

L’erreur stratégique d’Hillary Clinton

hillary-angrydddd.jpg

L’erreur stratégique d’Hillary Clinton

par Pierre Toullec

Ex: http://www.katehon.com

Tout au long des élections américaines de 2016, retrouvez chaque vendredi l’analyse de Pierre Toullec, spécialiste de la politique américaine, en exclusivité pour Breizh Info ! L’occasion de mieux comprendre les enjeux et les contours d’élections américaines finalement assez mal expliquées par la majorité de la presse subventionnée – sponsor démocrate de longue date. L’occasion également d’apprendre ce qui pourrait changer pour nous, Européens, suite à l’élection d’un nouveau président de l’autre côté de l’Atlantique.

L’erreur stratégique de Hillary Clinton

La division au sein du Parti républicain reste profonde et dangereuse pour son avenir et pour les élections de novembre 2016. Cependant, une opportunité de conserver la mainmise sur le pouvoir au Congrès pourrait se présenter. A droite, les deux derniers adversaires de Donald Trump, le sénateur Ted Cruz et le gouverneur John Kasich, ont abandonné la course suite à la victoire du milliardaire dans l’Indiana. Le processus de nomination chaotique qui a duré des mois est terminé et le Parti républicain sera donc représenté par Donald Trump aux élections présidentielles.

Dans le même temps, la primaire démocrate qui, au contraire,  s’était déroulée de manière relativement paisible, avec une bonne entente entre Hillary Clinton et Bernie Sanders, prend un tournant violent, à la fois dans le langage mais aussi physiquement !

Cette évolution est liée au fait que Clinton ne parvient pas à vaincre Sanders. Au cours des mois de février et mars, l’ex-première dame a accumulé les victoires principalement dans le Sud, avec des marges impressionnantes, comme en Caroline du Sud (78 % des voix), en Louisiane (71 % des voix) ou encore au Mississippi (82,6 % des voix).  Etant donné la répartition à la proportionnelle des délégués au sein des primaires démocrates, pour les observateurs politiques, ces victoires auraient dû lui permettre de prendre une forte avance sur son adversaire. C’était bien le cas : les délégués engrangés durant les votes du Sud ont apporté à Hillary Clinton une telle avance qu’elle se considéra très tôt comme la gagnante et que désormais les Démocrates devaient se réunir derrière sa candidature.

Ses victoires dans cette partie des Etats-Unis ont été liées à des facteurs spécifiques au Sud. Hillary Clinton est populaire auprès des minorités, notamment noires, qui sont présentes en grand nombre dans ces Etats et y représentent la majorité des électeurs démocrates. De plus, son époux était gouverneur de l’Arkansas, un Etat au cœur du Sud et fut un président particulièrement apprécié de la communauté afro-américaine pour ses politiques de discrimination positive. Enfin, dès le début de la campagne, Hillary Clinton s’est orientée comme héritière naturelle des années Obama, un pari gagnant pour s’assurer le soutien des minorités.

Ainsi à la mi-mars, la candidate était donnée déjà gagnante. Son adversaire ne s’est pas résigné. Au contraire, Bernie Sanders a utilisé l’argument des victoires de Clinton dans le Sud pour affirmer qu’elle n’est qu’une candidate « régionale » incapable de gagner dans le reste du pays. Il n’avait d’ailleurs pas essayé de la combattre dans ces Etats, préférant se concentrer dans des territoires plus favorables. Il semble que les faits lui aient donné raison : depuis le 15 mars, le sénateur Sanders accumule les victoires et rattrape progressivement son retard.


L’état de la primaire démocrate A l’exception de l’Oklahoma, il est clair sur cette carte que Hillary Clinton est parvenue à remporter l’intégralité des Etats du « Sud ». Cependant, depuis que ces Etats ont fini de voter, à quelques exceptions, les victoires se sont faites rares dans le reste du pays
L’enthousiasme de Clinton a joué contre elle. Sûre de sa victoire, elle a commencé dès la mi-mars à se détourner de la primaire démocrate pour se préparer à l’élection nationale de novembre contre le futur candidat républicain. L’argent et l’organisation ont commencé à manquer pour les primaires qui ont suivi du fait de cette réorientation stratégique. Comme en 2008, Hillary Clinton a fait l’erreur de penser avoir gagné alors que le match n’était pas terminé.

La conséquence de cette erreur est particulièrement grave dans cette élection. En effet, il est désormais certain qu’aucun des deux candidats n’aura suffisamment de délégués pour remporter la primaire le de la convention nationale de juillet. Hillary Clinton conserve un avantage car elle a le soutien de la majorité des super-délégués, mais ces derniers peuvent changer d’avis à tout moment, en particulier s’ils voient que le vent tourne définitivement en faveur de Bernie Sanders.

*Les Super-délégués démocrates sont les cadres et les élus du parti. Ils sont libres de leur vote le jour de la convention nationale. La majorité d’entre eux s’est engagée à soutenir Hillary Clinton mais ils sont libres de changer d’avis jusqu’à la convention démocrate qui se tiendra du 25 au 28 juillet 2016. En 2008, une majorité de super-délégués s’était engagée à soutenir Hillary Clinton au début de la campagne mais a décidé d’élire Barack Obama alors que Clinton avait 300.000 voix d’avance sur lui dans la primaire.


*Les Super-délégués démocrates sont les cadres et les élus du parti. Ils sont libres de leur vote le jour de la convention nationale. La majorité d’entre eux s’est engagée à soutenir Hillary Clinton mais ils sont libres de changer d’avis jusqu’à la convention démocrate qui se tiendra du 25 au 28 juillet 2016. En 2008, une majorité de super-délégués s’était engagée à soutenir Hillary Clinton au début de la campagne mais a décidé d’élire Barack Obama alors que Clinton avait 300.000 voix d’avance sur lui dans la primaire.

hillary_lead_color_revolution.jpg


Le sénateur a été clairement sous-estimé par les dirigeants du parti. Les super-délégués sont désignés parce qu’ils représentent le Parti démocrate à un poste d’élu à l’échelle nationale ou locale. Or, la vague « Bernie Sanders » ne s’est pas faite uniquement sur les délégués à remporter. Ces victoires lui ont permis de placer ses fidèles à des postes stratégiques voire à la direction des partis locaux dans plusieurs Etats. Cette situation change la donne car elle menace directement les super-délégués : ceux qui soutiennent Clinton alors que leur Etat a voté pour Bernie Sanders pourraient se voir éjectés du parti lors des primaires pour le Congrès et les postes d’élus représentant le parti démocrate. Si Bernie Sanders continue d’accumuler les victoires, de plus en plus de super-délégués pourraient se voir forcés de modifier leur soutien pour garantir leur poste.

Le danger de l’enthousiasme féminin

L’une des plus grandes forces derrière la candidature de Hillary Clinton, au-delà du soutien des minorités, vient du soutien féminin. De très nombreuses femmes soutiennent et votent pour Hillary car elles veulent garantir l’élection de la première femme présidente des Etats-Unis, ou au moins la première nomination d’une femme à la tête d’un des deux grands partis américains. Il est clair que cet enthousiasme lui a permis de gagner plusieurs votes. Aujourd’hui, la campagne de Clinton se retrouve face à une difficulté particulièrement délicate à gérer : des milliers de femmes veulent être élues déléguées pour se rendre à la convention de juillet et voter pour elle lors de cet événement. La conséquence première est que la campagne de Clinton se retrouve débordée par le travail de sélection des délégués car il y a beaucoup trop de candidats, et particulièrement de candidates.

Sur le principe, un tel enthousiasme est généralement bénéfique lors d’une élection. Le problème central est qu’il est lié ici au genre de la candidate et non à ses idées ou à ses propositions. Actuellement, la campagne de Clinton a beaucoup de mal à sélectionner ses futurs délégués à cause de cet afflux massif de candidates. Autrement dit, sa campagne n’est pas en mesure de faire une sélection solide sur les délégués qui la soutiennent. Ceci signifie que de nombreuses femmes (notamment) seront présentes à la convention pour voter pour elle, mais ces délégués peuvent partager les idées de Bernie Sanders. Même si Hillary Clinton parvient à être nominée par la convention, nombre de ses propres supporters pourraient alors voter contre ses idées et faire valider un programme politique en désaccord avec le programme de Hillary Clinton, et pire, pourrait donner les clefs du parti démocrate aux proches de Bernie Sanders, mettant en péril une potentielle présidence Clinton qui pourrait se retrouver avec le parti qui l’a élue hostile à sa gouvernance !

La division démocrate : l’opportunité gagnante pour Donald Trump ?

Enfin, Hillary Clinton peut tout à fait remporter la nomination et garantir ainsi la victoire de Donald Trump. Au début de la campagne, la candidate a souffert dans plusieurs Etats de la présence du milliardaire car plusieurs dizaines de milliers de ses soutiens sont allés voter dans la primaire républicaine en faveur de Trump. Malgré cela, les sondages donnaient Clinton largement vainqueur contre le candidat républicain.

Depuis, alors que le ton a commencé à monter entre les deux adversaires démocrates, de plus en plus d’électeurs de Bernie Sanders s’engagent dans un mouvement « Never Hillary » semblable à celui que des républicains continuent de monter contre Donald Trump.

La tension est si forte entre les deux camps que de plus en plus de soutiens de Bernie Sanders affirment aujourd’hui être prêts à voter pour Donald Trump si Hillary représente le parti démocrate. Ceci était impensable il y a encore quelques mois, mais il y a de nombreuses similarités entre les candidatures des deux hommes. Certes leurs programmes diffèrent, mais ils ont tous les deux construit leur discours autour d’un message « anti-Washington », « anti-élites » et « anti-Wall Street ». Cette image d’outsiders qu’ils partagent favorise fortement le candidat républicain.

Cette évolution ne s’observe pas seulement dans les intentions de votes et dans les sondages. Les conventions des différents Etats deviennent de plus en plus chaotiques, avec des violences verbales et physiques ! La convention démocrate du Nevada qui s’est tenue au cours du week-end dernier a vu des militants des deux bords s’insulter, se menacer de mort et envoyer sur les militants adverses des projectiles, principalement des chaises et des bouteilles en verre ! Les soutiens de Bernie Sanders ont accusé la direction du parti démocrate du Nevada de violer les règles des votes de désignation des délégués et de favoriser Hillary Clinton. Ce mercredi, sur CNN, le directeur de campagne de Bernie Sanders lui-même a accusé la direction du Parti démocrate de truquer les conventions d’Etats et certains votes pour garantir la victoire de Clinton.

En réaction, de plus en plus de soutiens de Bernie Sanders rejoignent les rangs des « Démocrates pour Trump ». Ce mouvement s’est vu notamment dans l’évolution rapide dans les sondages. Donald Trump a toujours du mal à regrouper son camp et nombre d’électeurs républicains se tournent vers le parti libéral ou sont en recherche d’un autre candidat à présenter sous l’étiquette « conservateur ». Cependant, sa victoire désormais garantie lui a permis de voir l’opposition de droite à sa candidature diminuer.

hill50mglUb2m1slqt1mo1_1280.jpg

Mais le plus fort mouvement observable au cours des dernières semaines est la rapide augmentation du nombre de démocrates pro-Sanders qui se disent prêts à voter pour Trump si Hillary Clinton remporte la nomination ! Le mouvement devient tellement important que la direction de la campagne de Sanders travaille à renverser la tendance. La menace est si forte que Bernie Sanders lui-même est intervenu pour dire à ses électeurs que s’il perd la primaire, il ne faut pas qu’ils aillent voter pour Trump mais bien qu’ils votent pour Hillary Clinton. Pour la première fois depuis très longtemps, deux sondages (Fox News et Rasmussen) ont donné Donald Trump gagnant en cas de duel contre Hillary Clinton, notamment grâce aux soutiens de Bernie Sanders.

Mais la division des démocrates ne va pas que dans un sens. Les supporters de Hillary Clinton aussi commencent à se détourner de Bernie Sanders. Dans deux sondages, en cas de duel Trump – Sanders, le même mouvement apparait. Une forte partie de l’électorat de Hillary Clinton commence à exprimer son refus de voter pour Sanders et préférer voter pour Trump, donnant ces deux candidats au coude à coude.

Depuis le début de la semaine, les événements s’aggravent entre les deux camps. Le parti démocrate du Nevada a officiellement déposé une plainte auprès du parti national le lundi 16 mai demandant la condamnation publique de la campagne de Bernie Sanders, un mouvement qui n’a pas manqué d’attiser la colère des militants du sénateur du Vermont. Le lendemain, la présidente du parti démocrate, Debbie Wasserman Schultz, a exprimé par le biais d’un communiqué de presse son inquiétude face à la montée des tensions internes au parti. Sa direction doit dans les prochains jours organiser une rencontre entre les dirigeants des campagnes de Clinton et Sanders pour tenter d’apaiser la situation.

Il y a seulement quelques semaines, les démocrates étaient impatients de voir la nomination de Donald Trump du côté républicain, pariant sur le fait que sa victoire en juillet aurait garanti la victoire démocrate en novembre. L’erreur stratégique de Hillary Clinton en mars a créé une division d’une violence non vue au sein du parti démocrate depuis la primaire de 1968. Cette erreur pourrait bien donner sur un plateau la présidence des Etats-Unis à Donald Trump, comme ce fut le cas pour Richard Nixon cette année-là.

Retrouvez les articles précédents :

1 – L’Iowa et Ted Cruz (5 février 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/02/05/usa-iowa-retour-sur...)

2 – Le New Hampshire et Donald Trump (12 février 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/02/12/new-hampshire-retou...)

3 – Le décès du juge Scalia (19 février 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/02/19/elections-usa-les-c...)

4 – L’ascension de Donald Trump (26 février 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/02/26/39697/etats-unis-do...)

5 – Qui a réellement gagné le Super-Tuesday du 1er mars ? (4 mars 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/03/04/40056/elections-ame...)

6 – La convention républicaine de 2016 : l’arrivée d’une crise politique majeure ? (11 mars 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/03/11/40308/elections-ame...)

7 – La primaire républicaine : une course à deux ou à trois ? (18 mars 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/03/18/40559/etats-unis-la...)

8 – Les conséquences des attentats du 22 mars sur les élections américaines (25 mars 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/03/25/40896/consequences-...)

9 – 2016 : la compétition des impopulaires ? (2 avril 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/04/02/41152/elections-ame...)

10 – Le 5 avril 2016 : un tournant dans les primaires ? (8 avril 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/04/08/41594/usa-5-avril-2...)

11 – L’Etat de New York : la surprise (22 avril 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/04/22/42453/elections-usa...)

12 – Donald Trump : la victoire au bout des doigts ? (29 avril 2016) (http://www.breizh-info.com/2016/04/29/42803/elections-ame...)

Crédit photo : DR + flickr
[cc] Breizh-info.com, 2016 dépêches libres de copie et diffusion sous réserve de mention de la source d’origine

mercredi, 25 mai 2016

From Golden Dollar to Petro Dollar to Narco Dollar

narco-dollar.jpg

F. William Engdahl
From Golden Dollar to Petro Dollar to Narco Dollar

Ex: http://journal-neo.org

The role as world reserve currency is something no financial hegemon in history has willingly surrendered. It took two world wars for the City of London and Bank of England to reluctantly concede hegemony of the Pound Sterling to the Dollar. As Henry Kissinger is said to have remarked decades ago, “If you control the money, you can control the entire world.” Whether or not Kissinger ever said that publicly, he and his patron, David Rockefeller, certainly believed it. Now, with US government debt shooting past $19 trillion and the true state of the American economy and its infrastructure at its worst since the Great Depression, with most Americans living on the brink of financial disaster, the brilliant financial engineers of Wall Street and Washington have once again come up with a scheme to prolong the role of Dollar as King in the world economy.

The recent Panama Papers revelations by a select group of Western mainstream media including the New York Times, BBC and Süddeutsche Zeitung, were notable as a brazen attempt to attack foreign leaders such as Russia’s Vladimir Putin and China’s Xi Jinping for alleged corruption. Notably, the leaked files of the Panama law firm, Mossack Fonseca, so far have failed to leak even one significant name of a US citizen hiding money in offshore accounts of the Panama facilitators.

While the world’s eyes were on the identities of alleged offshore money holders, they failed to consider the longer-term consequence of the huge revelations. The one country so far to benefit from the Panama Papers revelations is the country that is rapidly becoming the new “Panama” or better, the new Switzerland, namely the United States of America, the initiator of attacks on other hot money havens offshore over the past two decades.

Golden Dollar Era

Over the past seventy two years ever since the US and select wartime allied governments met in Bretton Woods, New Hampshire in 1944 to decide the shape of the postwar monetary order, the US dollar has reigned supreme in the world economy. By end of the War in 1945 the US Federal Reserve held the overwhelming bulk of world monetary gold.

Fort_knox_gold_thumb.gifAs war erupted in Europe in September 1939 with Hitler’s and Stalin’s dismemberment of Poland, European gold was flooding into the United States. In 1935 US official gold reserves had been valued at just over $9 billion. By 1940 after the onset of war in Europe, they had risen to $20 billion. As desperate European countries sought to finance their war effort, their gold went to the United States to purchase essential goods. By the time of the June 1944 convening of the international monetary conference at Bretton Woods, the United States controlled fully 70% of the world’s monetary gold, an impressive advantage. That 70% did not even include calculating the captured gold of the defeated Axis powers of Germany or Japan, where exact facts and data were buried in layers of deception and rumor.

For the following quarter century, the gold-backed US dollar reigned supreme as the rest of the world, especially war-ravaged Western Europe, scrambled to find dollars to pay US imported goods to rebuild their industrial base. The dollar was literally “as good as good,” much as the Pound Sterling had been a century earlier.

Yet by the end of the 1960’s the dollar world had undergone significant change. The economies of France and especially of West Germany had emerged with a new state-of-the-art industrial base and was rapidly becoming an export power challenging American obsolescent industrial goods. The US industrial base had last undergone substantial modernization some three decades before. Europe and later Japan, were posing a competitive challenge to US industry. More alarming for Wall Street banks like David Rockefeller’s Chase Manhattan, Citibank or JPMorgan, as US trade dollar earnings of German companies like Mercedes, VW or BMW or Siemens were accumulating in the coffers of the German Bundesbank or Bank of France during the 1960’s an alarming change in policy emerged.

dg279337.jpgFrench President Charles de Gaulle, acting on advice of his conservative financial adviser, Jacques Rueff, ordered the Bank of France to begin to redeem its rapidly accumulating trade surplus dollars for gold, something then legal under the rules of Bretton Woods. The conservative German Bundesbank followed in demanding US gold for dollars. In 1968 in one of the first crude versions of their Color Revolutions, the CIA and US State Department toppled President de Gaulle in the events known as the May 1968 student revolt. Despite the replacement of de Gaulle by former Rothschild banker, Georges Pompidou, the foreign demand for Federal Reserve gold redemptions increased as Washington budget deficits to finance the ill-conceived Vietnam War exploded.

saupload_volker.jpgBy August 1971, President Nixon was advised by his Assistant Treasury secretary, Paul Volcker, a former executive at Rockefeller’s Chase Manhattan Bank, to essentially tear up the Bretton Woods Treaty and declare the US dollar a free-floating paper no longer redeemable in gold. The Federal Reserve’s gold reserves over the previous several years had been drained by foreign central banks fearful of the import of US dollar inflation as Washington refused pleas to devalue the dollar to re-stabilize the system. Rueff and France were calling for a 100% dollar devaluation against the Franc or Deutschmark.

Petrodollar era is born

By 1973, in developments I describe in detail in my book, A Century of War, as well as in Myths, Lies & Oil Wars, Wall Street and the Federal Reserve “solved” the problem of a dollar in free-fall—it had devalued some 40% against the Franc, D-mark and Yen after August, 1971—by orchestrating, with the skillful and deceitful diplomacy of then-Secretary of State, Henry Kissinger, an OPEC oil price embargo following outbreak of the October, 1973 Yom Kippur War. By early 1974 the price of OPEC oil had been set some 400% above that of 1971. The dollar value soared against other major currencies as Germany, France and the rest of the oil-hungry world scrambled to find 400% more dollars to import their oil. Kissinger at the time wrote about “recycling petrodollars.” The dollar would be backed, not by gold, but by oil.

kissinger2.jpg

To be certain that the petrodollar system held, and that OPEC, led by Saudi Arabia, would never be tempted to sell for D-marks, Francs or Yen as those countries tried, Washington took special measures. On June 8 1974, US Secretary of State Henry Kissinger signed an agreement establishing a US-Saudi Arabian Joint Commission on Economic Cooperation. Its official mandate was co-operation in the field of finance.”

By December 1974 the US Treasury had signed an agreement in Riyadh with the Saudi Arabian Monetary Agency, whose mission was, “to establish a new relationship through the Federal Reserve Bank of New York with the (US) Treasury borrowing operation. Under this arrangement, SAMA will purchase new US Treasury securities with maturities of at least one year,” explained Assistant Secretary of the U.S. Treasury, Jack F. Bennett, later to become a director of Exxon. Wall Street banker, David Mulford of Credit Suisse-FirstBoston was sent by Washington to SAMA in to seal the deal.

Bennett’s memo was addressed to Secretary of State Kissinger, dated February 1975, explaining the arrangements agreed two months before. As part of the secret agreements between Washington and Riyadh negotiated by Bennett, Saudi Arabia, in return for generous US defense equipment purchases and guarantees of its military security, agreed that OPEC would accept only US dollars for their oil, not German Marks despite their clear value, not Japanese Yen nor French Francs or even Swiss Francs, but only American dollars.

That was the essence of the petrodollar system which over the past decade or more has been eroding as Russia, China, Iran and even the EU challenge the role of the dollar as reserve currency. Russia and China, in a defensive move have agreed to energy trade for oil and gas paid not in dollars but in own currencies. Iran recently announced it will accept only Euros for its oil. More and more the days of the dollar demise are being proclaimed.

A new Narco-dollar system?

Now, however, it appears the financial wizards of Wall Street and the US Treasury have come up with a new life-extension idea.

In what must be termed at least a clever attempt to solve the looming crisis of the dollar, a new role of the dollar is emerging from the rubble of the offshore banking crisis triggered by the suspicious hacking of the Panama Papers. The under-regulated United States is rapidly becoming the “new Switzerland” in attracting “hot money” which includes everything from narco dollars from the international drug traffic to hiding of funds offshore by corrupt politicians.

For the past decade or more the US Government and revenue agency have pressured discreet offshore banking centers from Switzerland to the Cayman Islands to British Virgin Islands and beyond allegedly to clamp down on US tax-evading citizens hiding money abroad from the IRS or terrorists moving money to finance Al Qaeda and the likes. But the US government itself has rigidly refused to abide by the new international money reporting rules it caused to be created.

gunsdrugsracismmoney-630x310.jpg

Now, according to a January report in the Bloomberg financial magazine, the result is that the United States itself, in places like Reno, Nevada or South Dakota or Wyoming, are fast becoming the “new Switzerland” hot or secret money havens.

Bloomberg quotes a Zurich attorney, Peter A. Cotorceanu, a lawyer at Anaford AG, “The USA, which has been so sanctimonious in its condemnation of Swiss banks, has become the banking secrecy jurisdiction du jour…That ‘giant sucking sound’ you hear? It is the sound of money rushing to the USA.”

The attraction of secrecy havens inside the US comes from the fact that a very strict money reporting standard set out by the Paris-Based OECD in 2014 has not been signed by four countries: Bahrain, Nauru, Vanuatu—and, guess who…the United States.

In the last months, taking advantage of the Washington hypocrisy, some of the world’s largest private banking managers including Rothschild Trust North America LLC. based in Reno, Nevada. Geneva-based Cisa Trust Co. SA, which advises wealthy Latin Americans, is applying to open in Pierre, South Dakota to “serve the needs of our foreign clients,” said John J. Ryan Jr., Cisa’s president.

Trident Trust Co., one of the world’s biggest providers of offshore trusts, moved dozens of accounts out of Switzerland, Grand Cayman, and other locales and into Sioux Falls, South Dakota in December, ahead of a January 1 disclosure deadline. Commenting on the new phenomenon, Andrew Penney of Rothschild & Co. stated that the US “is effectively the biggest tax haven in the world.”

Making the process even more positive for the dollar, a 2010 USA law, the Foreign Account Tax Compliance Act, or Fatca, requires financial firms to disclose foreign accounts held by US citizens and report them to the IRS or face steep penalties. With the US refusing to sign the OECD disclosure rules, US offshore dollars are also flooding back into Reno and other new US banking secrecy havens.

Further, to make other offshore banking centers unattractive, a law implemented in 2011 requires Panama-registered agents to provide client information when requested on all new incorporations, and the British Virgin Islands has adopted restrictions on due diligence. In an investors’ conference recently in San Francisco, Rothschild’s Penney stated in remarks cut from the published version of his remarks, that the US Government lacks “the resources to enforce foreign tax laws and has little appetite to do so.” ix

Now with one of the largest international offshore money facilitators, Panama’s Mossack Fonseca, admitting it is being forced to wind down, the way is clear to make the USA the new Switzerland or Panama. Drug cartels of the world are already clearly informed and a good share of the estimated $1.6 trillion of criminal funds annually are searching new safe havens in Reno and other US hot money havens. From a golden dollar to a petro dollar to now a narco dollar. It’s pretty pathetic for the country that was once the world’s leading industrial technology leader.

F. William Engdahl is strategic risk consultant and lecturer, he holds a degree in politics from Princeton University and is a best-selling author on oil and geopolitics, exclusively for the online magazine “New Eastern Outlook”

http://journal-neo.org/2016/05/09/from-golden-dollar-to-p...

samedi, 21 mai 2016

Eastern Europeans Strike Back After Bill Clinton Slams Poland, Hungary for 'Putin-Like Dictatorship'

00-russia-and-poland-09-08-14.jpg

Eastern Europeans Strike Back After Bill Clinton Slams Poland, Hungary for 'Putin-Like Dictatorship'

There's still some spirit in these NATO vassals

Funny thing. No matter how western-oriented Eastern Europeans (ooops sorry, "Eastern-Central Europeans") are and how eager they are to distance themselves from the likes of Russians they can never quite get Westerners to see them as anything but Russians-lite. 

putin-2.jpg

They can be in NATO and the EU but to fully-fledged Westerners they will always remain a mere poor copies of truly advanced and civilized societies in the west proper. In only the latest reminder of this ex-US president Bill Clinton accused Poland and Hungary of tossing away democracy they only ever enjoyed thanks to the USA in favor of Russian-style "authoritarian dictatorship" and xenophobia: 

“Poland and Hungary, two countries that would not have been free but for the United States and the long Cold War, have now decided this democracy is too much trouble,” Clinton said on Friday at a campaign stop for his wife, probable Democratic presidential nominee Hillary Clinton. “They want Putin-like leadership: just give me an authoritarian dictatorship and keep the foreigners out.”

Naturally, this historic revisionism took the "Eastern-Central Europeans" aback, but fortunately for them they did not take it lying down. The Hungarians were clear:

Hungary’s Foreign Minister Peter Szijjarto said it was the Hungarian people who fought for the country’s freedom and Clinton didn’t have the right to snipe at voters who gave power to Prime Minister Viktor Orban.

“No one, not even former U.S. President Bill Clinton can allow himself to insult Hungarian people,” Szijjarto said in an e-mailed statement on Tuesday.

“Bill Clinton may not like the decision of the Hungarian people, but this is no reason for the former American president to offend them,” he added.

The Poles combined their response with some damage control and covering for the American, but if anything they were even more colorful:

Poland’s foreign ministry said in an e-mailed statement that the comments were “unfair,” spoken during a heated election campaign and not in line with the views of President Barack Obama’s administration.

Former Polish Prime Minister Kaczynski, who is also the party’s head, took the criticism of the former US president directly to heart, advising Bill Clinton to have his state of mind checked by a doctor.

“If anyone says there is no democracy in Poland, it means that he is in a state that you need to examine by medical means,” Kaczynski told a briefing on Tuesday, as cited by TASS.

“I can say only one thing – that the media, various factors in the world, triggered a situation of a giant misunderstanding. Perhaps it affects the consciousness of the former president of the United States,” he added, trying to downplay the sharp tone of Clinton’s remark by offering his own explanation.  “Otherwise, I cannot explain it to myself,” he concluded.

Union européenne : un projet aux origines… américaines!...

hachfeld-eu-usa-free-trade.jpg

Union européenne : un projet aux origines… américaines!...

par Caroline Galacteros

Ex: http://metapoinfos.hautetfort.com

Nous reproduisons ci-dessous un article de Caroline Galactéros, cueilli sur son site Bouger les lignes et consacré aux origines américaines du projet d'union européenne... Docteur en science politique et dirigeante d'une société de conseil, Caroline Galactéros est l'auteur de  Manières du monde, manières de guerre (Nuvis, 2013).

Union européenne : un projet aux origines… américaines

La campagne anglaise du Brexit est l’occasion pour nos cousins Britanniques de s’interroger sur les origines du projet européen pour comprendre les modalités de cette intégration ad hoc qui n’a jamais su trancher entre les deux modèles classiques que sont la confédération et la fédération. Avec un Parlement que d’aucuns jugeront très sévèrement, plus préoccupé d’organiser le ballet de lobbyistes de tous poils missionnés pour infléchir sa déjà trop molle consistance que de représenter un « peuple » européen introuvable, avec surtout une Commission européenne tentaculaire qui réunit des pouvoirs à la fois exécutif, législatif et judiciaire, l’Union européenne ressemble de plus en plus dans son fonctionnement à une Union soviétique dont l’idéologie serait un néolibéralisme anglo-saxon mâtiné d’ordolibéralisme allemand. Ce cocktail paradoxal et détonnant a été préparé consciencieusement et méthodiquement depuis le Traité de Rome (ou plutôt les deux traités) instaurant en 1957 la Communauté économique européenne (CEE) et la Communauté européenne de l’énergie atomique (Euratom). S’étant étendue largement et rapidement aux anciennes républiques socialistes soviétiques depuis 20 ans, l’Union européenne est aujourd’hui bloquée dans son fonctionnement, incapable d’apporter la cohérence politique nécessaire pour transformer le Vieux continent en « Europe-puissance ». A la faveur de la crise migratoire – qui a révélé spectaculairement la faiblesse politique et la vulnérabilité culturelle de l’Union –, la renaissance d’un réflexe souverainiste diffus, déformé et instrumentalisé par des populismes parfois inquiétants, s’affirme rapidement dans plusieurs pays. Au Royaume-Uni, mais également en France, en Finlande, aux Pays-Bas, en République Tchèque, en Hongrie ou en Pologne, l’euroscepticisme gagne du terrain. Face à cette défiance croissante des peuples européens devant une hydre bruxelloise invasive mais impuissante, les dirigeants s’aveuglent ou se braquent, tels Jean-Claude Juncker, président de la Commission européenne, qui avait déclaré dans un entretien au Figaro le 29 janvier 2015 sur fond de crise grecque : « il n’y a pas de choix démocratique contre les Traités ». Surprenante et très inquiétante formule …

1973.jpg

En réalité, cette embolie progressive de la construction européenne pourrait trouver en partie ses origines dans un défaut de jeunesse irrémédiable que le journaliste britannique Ambrose Evans-Pritchard a récemment décrit avec lucidité et que l’on pourrait résumer ainsi : l’Union européenne est moins un projet européen tourné vers l’avenir qu’un projet américain inscrit dans le cadre de la Guerre froide et d’une vision d’un monde unipolaire dominé par l’hégémon des USA. Ainsi influencée par Washington – ce que l’affaire du TAFTA montre très bien – et sortie de l’Histoire pour ne demeurer qu’un immense marché commercial et un ventre mou politique et culturel, l’Union européenne n’est que le bloc oriental d’une vaste Otanie qui s’étend désormais de l’Alaska aux Pays Baltes.

Dans The Telegraph, Ambrose Evans-Pritchard rappelle ainsi comment les Etats-Unis ont largement financé la construction européenne et comment ils se sont servis de ces fonds pour en contrôler le cours et menacer quand il le fallait les prétentions à l’indépendance de certaines nations européennes – à commencer par la France gaulliste !

Nous reprendrons dans cet article les illustrations d’Evans-Pritchard à l’appui de cette thèse d’une Grande Otanie.

  • La déclaration Schuman du 9 mai 1950, qui a donné le ton de la réconciliation franco-allemande et préparé le Traité de Rome, a été largement commanditée par le secrétaire d’Etat américain Dean Acheson à une réunion à Foggy Bottom. Le directeur de cabinet de Robert Schuman a ainsi déclaré que « tout avait commencé à Washington », rappelant au passage que les Etats-Unis avaient menacé en septembre 1950 de couper les financements du plan Marshall face aux réticences de Paris.
  • Jean Monnet est souvent vu comme le Père fondateur d’une Europe fédérale. On oublie trop souvent qu’il passa le plus clair de son temps aux Etats-Unis et a été pendant la Guerre les yeux et les oreilles de Franklin D.Roosevelt. Le Général de Gaulle le considérait comme un agent américain, ce que la biographie d’Eric Roussel (1) confirme peu ou prou en détaillant la manière dont le héraut du fédéralisme européen travailla avec les différentes administrations américaines.
  • Les documents déclassifiés des archives du Département d’Etat américain ont assez peu fait l’objet d’analyses étendues. Il y aurait pourtant du grain à moudre ! Ces textes montrent sans équivoque comment la construction européenne a été largement financée par la CIA et comment Washington a fait pression pour que les Britanniques prennent part à l’aventure, de sorte à servir de “cheval de Troie” à leurs cousins de l’autre rive de l’Atlantique.
    • Ainsi, un mémorandum américain du 26 juillet 1950 décrit la campagne de promotion destinée à favoriser l’instauration d’un véritable Parlement européen. Ce texte est signé du Général William J. Donovan, chef du American wartime Office of Strategic Services, “ancêtre” de la CIA.
    • L’organisme de la CIA chargé de surveiller le processus d’intégration européenne était l’American Committee for a United Europe (ACUE), dirigé par Donovan. En 1958, un an après la signature du Traité de Rome, ce Comité de la CIA a financé 53,5% des fonds destinés aux organisations européennes fraichement instituées (CEE et Euratom).
    • D’après Evans-Pritchard, plusieurs papiers attestent du fait que les agents de la CIA mis à la tête de l’ACUE considéraient les « Pères fondateurs de l’Europe » comme de « petites mains » auxquelles ils avaient fortement déconseillé de trouver des financements alternatifs pour la construction européenne de sorte à ne pas affaiblir la mainmise de Washington.
    • Un mémo daté du 11 juin 1965 demande au vice-président de la CEE de poursuivre coûte que coûte le projet d’une Union monétaire européenne, mais de manière furtive, en empêchant tout débat, de sorte que « l’adoption de telles propositions finisse par devenir inéluctable ».

Cette influence américaine sur le destin du Vieux continent pouvait se comprendre dans le contexte de la Guerre froide et de la mise en oeuvre du « containment » de l’URSS décidée par le président Truman à partir de 1947. Néanmoins, il est probable que les peuples européens n’ont pas alors mesuré, et ne mesurent pas plus aujourd’hui l’étendue de cette emprise américaine. La puissance du Deep state américain (i.e “l’Etat profond” pour reprendre le concept utilisé notamment par le politiste Peter Dale Scott) et notamment des Services de renseignement était telle qu’elle laissait peu de place au déploiement de démocraties européennes fondées en premier lieu sur la souveraineté des différents peuples du continent. Or, c’est l’Union européenne qui a servi ce projet américain, ce qui laisse une marque indélébile sur la crédibilité démocratique et l’indépendance de cette organisation. Pis, si nous savons aujourd’hui une partie de ce qui se passa réellement aux débuts de la construction européenne, il faudra attendre encore longtemps pour découvrir avec précision le rôle que jouèrent les Etats-Unis dans l’extension de l’UE aux ex-Républiques socialistes et soviétiques, de conserve avec celle de l’OTAN, de 1991 à aujourd’hui. A cette aune, les futurs historiens mettront sans doute en perspective le rôle joué par la crise ukrainienne de 2014-2015, inscrite dans cette consolidation d’une vaste Otanie qui aille le plus à l’Est possible. L’ancien Directeur du renseignement à la DGSE, Alain Juillet, l’a reconnu assez clairement dans une récente interview accordée au magazine ParisMatch.

2000px-US-MarshallPlanAid-Logo.svg.png

Reste la question anglaise… Il est évident que l’identité britannique, profondément marquée par son insularité tant géographique que culturelle, est par essence et depuis l’origine peu perméable à une quelconque forme de soumission à une logique ou à des structures continentales. Mais précisément. L’Angleterre qui a toujours préféré “Le Grand large” et s’est fort longtemps et en bien des domaines alignée sur les ambitions et positions américaines sans états d’âme, rend son positionnement actuel d’autant plus signifiant. Elle fuit manifestement la déroute continentale non pour condamner la renaissance souverainiste des États européens mais contre l’autoritarisme des structures bruxelloises qui cumulent les handicaps de la rigidité administrative technocratique et celle d’une patente faiblesse politique et économique. L’importance accordée à la notion de « souveraineté » dans le débat sur le Brexit et non seulement aux aspects économiques de ce possible bouleversement européen, illustre parfaitement cette conscience politique des Britanniques et aussi peut-être une relative autonomisation par rapport à Washington. L’idée d’être aux ordres d’une Europe dont l’inspiration vient de Washington mais dont les gardes-chiourmes se trouvent à Berlin plus encore qu’à Bruxelles dépasse l’entendement anglais. So shocking. Il paraît que Sa Majesté la Reine Elizabeth pencherait elle-même du côté du Brexit ...

Caroline Galactéros (Bouger les lignes, 13 mai 2016)

(1) ROUSSEL, Eric, Jean Monnet, éd. Fayard, 1996.

jeudi, 19 mai 2016

Le protestantisme évangélique, fer de lance du Nouvel Ordre Mondial en Chine?

evch5939.jpg

Le protestantisme évangélique, fer de lance du Nouvel Ordre Mondial en Chine?


Par Laurent Schiaparelli
Ex: http://lesakerfrancophone.fr

La Chine, grâce à son particularisme culturel, sa longévité civilisationnelle et sa puissance économique, est un des derniers bastions en Asie que l’Empire aura du mal à soumettre à son projet de Nouvel ordre mondial. Le protestantisme évangélique est un des chevaux de bataille de l’Empire pour imposer son modèle dans le monde. La Chine est dans le collimateur, et le sait.

La présence ininterrompue du christianisme en Asie débute au XVIe siècle, avec l’arrivée de Magellan aux Philippines. Souvent associés au colonialisme en Asie, les missionnaires étant jésuites, franciscains, dominicains, le christianisme jouit aujourd’hui d’une image de modernité, par opposition aux religions locales, synonymes de tradition.

Symbole de cette modernité, le christianisme a accompagné les transitions démocratiques en Corée du Sud et aux Philippines. C’est ce glissement des églises chrétiennes, en particulier du protestantisme évangélique, du religieux vers le social, puis vers le politique, qui pose problème dans certains pays asiatiques, la Chine en particulier, même si cela ne fait pas encore les gros titres.

On trouve une présence chrétienne dans à peu près tous les pays de l’Asie de l’Est. Au Japon depuis le XVIIe siècle, à Taïwan, en Mongolie, en Corée du Sud (10% de catholiques et 20% de protestants), à Hong Kong, etc. : les protestants, tantôt baptistes, adventistes, méthodistes, pentecôtistes, se taillent la part du lion, grâce à l’influence géopolitique américaine dans ces pays.

De la même manière aux Philippines, où les catholiques (augustins) évangélisèrent les premiers, dès l’arrivée de Magellan, le catholicisme fut progressivement en compétition avec le protestantisme évangélique à partir du rachat des Philippines par les États-Unis en 1898.

A Taïwan, un territoire revendiqué par la Chine, et obligé des États-Unis, le catholicisme (propagé par les jésuites) n’a pas pu s’y développer de façon significative, en dépit de sa présence antérieure au protestantisme. Les églises à Taïwan sont, malgré les liens diplomatiques officiels de Taipei avec le Saint-Siège, à très grande majorité protestantes.

Malgré cette présence déjà importante, l’Asie est pressentie pour être le plus grand foyer d’expansion du christianisme dans le monde au cours du siècle à venir. Pour atteindre cet objectif, il sera donc nécessaire d’évangéliser de nouveaux territoires et de nouvelles populations. C’est précisément ce que les églises évangéliques baptistes américaines font en Mongolie (500 églises protestantes, et une petite présence catholique), au Vietnam, en Birmanie, en Chine et en Corée du Nord.

La Corée du Nord, paradoxalement surnommée le royaume ermite en dépit de son interdiction de tout culte religieux, peut sembler un choix étrange pour envoyer des missionnaires chrétiens évangéliser une population qui n’est autorisée à pratiquer aucune religion, et qui pour la plupart est plus préoccupée par des questions de subsistance. Il faut donc se poser la question de l’objectif de ces pasteurs, qui entrent plus ou moins clandestinement en Corée du Nord, non pas avec les valises pleines de produits de première nécessité, comme on on est en droit de l’attendre, mais avec des valises pleines de bibles traduites en coréen.

Si l’objectif n’est pas humanitaire, alors quel est-il, et pourquoi a-t-il été jugé supérieur à l’impératif humanitaire? Cet objectif ne peut donc être que de fédérer des convertis autour d’une idéologie autre que celle qui émane du gouvernement. Il s’agit donc d’encouragement à la sédition, puisque les missionnaires vont proposer à la population une religion qui, quelle qu’elle soit, leur est interdite par leur gouvernement. Située à la frontière orientale de la Chine du Nord, la Corée du Nord présente un intérêt stratégique pour les États-Unis, et c’est ainsi qu’il faut comprendre l’intérêt des missions protestantes évangéliques pour cette région.

Les missionnaires qui traversent sporadiquement la frontière sino-coréenne, ou qui accueillent les Nord-Coréens qui s’exilent vers la Chine, sont des pasteurs américains, canadiens, sino-coréens ou américano-coréens, basés en Chine, où leur présence est acceptée. Tel fut le cas du missionnaire protestant Kenneth Bae, arrêté en Corée du Nord en 2012, accusé de préparer une insurrection d’inspiration religieuse, qu’il avait baptisée Operation Jericho, référence biblique aux murs de la ville qui furent détruits par les trompettes des Israélites.

En Chine, le christianisme a fait une remarquable percée dans les vingt à trente dernières années, grâce à la tolérance du régime de Pékin, et sa compréhension de l’importance d’un retour de la spiritualité dans une société qui en avait été privée pendant toute la période maoïste.

La grande majorité des églises chrétiennes accréditées en Chine sont protestantes (principalement baptistes, influence des pasteurs sino-américains oblige), car elles ne dépendent pas du Vatican, qui n’a pas de relations diplomatiques avec la Chine. Elles ne répondent pas non plus, en théorie, à une autorité religieuse supérieure venant d’un autre État, comme le Pape, qui, du point de vue de Pékin, aurait une influence jugée excessive sur ses fidèles en Chine (il existe des précédents historiques…), et entrerait en concurrence avec la suprématie du Parti.

Donc, en apparence, le protestantisme évangélique ne présente pas de danger pour Pékin, et remplit une fonction bien précise, en apparence inoffensive, de redonner une spiritualité à une population qui en demande, et qui est autorisée à choisir entre plusieurs formes de bouddhisme, le christianisme, le taoïsme et l’islam.

CHINE-THANKSGIVING.jpg

Le problème est que le protestantisme évangélique vient des États-Unis, et que cette foi est gérée comme une multinationale : département de la stratégie (méthodes de travail), ressources humaines (recrutement et formation des pasteurs), marketing (publications, séminaires), logistique, relations publiques (rayonnement international grâce à une collaboration avec des artistes chrétiens, chanteurs, musiciens, acteurs, etc., qui tournent dans le monde entier).
Il est donc naturel que les églises protestantes évangéliques soient devenues, elles aussi, un outil de politique étrangère au service de l’Empire, comme l’attestent certaines informations émanant de personnalités de l’église évangélique elle-même, qui déplorent les relations incestueuses avec la CIA depuis plus de cinquante ans.

Il est établi que le travail de terrain des pasteurs dans les régions reculées du monde entier est systématiquement soumis à des séances de debriefing à Washington.

En plus des nombreux témoignages, souvent rétractés par la suite, de personnalités de la nébuleuse évangélique, et de personnalités à la retraite de l’industrie du renseignement, il est intéressant de rappeler la confession du Président américain Gerald Ford à ce sujet en 1975, sur l’utilisation passée, et fort probablement future, de missionnaires comme agents de la CIA, en violation flagrante du principe de séparation de l’État et de l’Église.

Ce qui ressort de ces révélations est que l’hégémonie américaine continue d’être promue dans le monde par une nébuleuse d’agents de propagande extraordinairement diversifiée, la religion et l’humanitaire jouant le rôle de fer de lance.

Le travail, dès les années 1960 en Amérique du Sud, de la fondation Wycliffe Bible Translators (aussi connue sous le nom de Summer Institute of Linguistics, ou SIL), associée à l’église évangélique Southern Baptists et à la famille Rockefeller (propriétaires de la Standard Oil) pour pacifier les populations pauvres locales, les convertir au christianisme évangélique, et les exproprier de gré ou de force pour prendre possession des ressources locales (au profit, incidemment, de la Standard Oil), semble avoir été financé par la communauté du renseignement américain. Ce travail d’évangélisation et de pacification est décortiqué dans le remarquable ouvrage Thy Will Be Done, The Conquest of the Amazon, de Gerard Colby et Charlotte Dennett, publié chez Harper Collins en 1995.

Cet ouvrage mentionne notamment deux points intéressants :

– Dès 1930, The Laymen’s Foreign Missions Inquiry (l’enquête sur les missions d’évangélisation des profanes à l’étranger), à l’initiative de John D. Rockefeller Jr. (Standard Oil) et de John Mott (pasteur méthodiste, dirigeant des YMCA et fondateur en 1948 du Conseil œcuménique des églises) a commandité une recherche de terrain sur toute l’Asie, et publié un rapport en 1932 appelé Rethinking Missions (Repenser les missions d’évangélisation).

– Une relation, connue aujourd’hui de tous, entre la CIA et l’agence indépendante du gouvernement des États-Unis USAid (qui comme son nom ne l’indique pas, dépend de la branche exécutive du gouvernement fédéral américain) au Laos et ailleurs en Asie, datant de l’époque de la Guerre du Vietnam:

«Le directeur d’USAid sous l’administration Nixon, John Hannah, a reconnu publiquement qu’USAid a financé des opérations de la CIA au Laos, et des révélations ultérieures établissent bien l’existence d’une telle collaboration en Équateur, en Uruguay, en Thaïlande et aux Philippines. Ces révélations pourraient causer du tort à toutes les missions d’évangélisation, mais le Summer Institute of Linguistics (SIL) était particulièrement vulnérable […] Dès les années 1960, SIL tirait de confortables revenus de l’USAid par le biais de gouvernements étrangers destinataires de l’aide USAid, ou directement de programmes financés par l’USAid dans les domaines de l’éducation bilingue et l’établissement de coopératives de développement agricole. À ces revenus venait s’ajouter une aide en équipement venant de surplus militaires, incluant des hélicoptères qui étaient exfiltrés du Vietnam et donnés à SIL

De nombreux exemples récents attestent que ces pratiques ont fait des émules, comme en atteste l’enquête du gouvernement américain en 1976 sur les liens de la CIA coréenne (KCIA) avec la secte évangélique du révérend Moon, et continuent depuis, au Venezuela, en Corée du Nord, en Birmanie, et à Singapour, où plusieurs pasteurs ont été accusés et incarcérés pour activités de sédition contre l’État.

En Birmanie aujourd’hui, les pasteurs baptistes convertissent en masse les membres des groupes ethniques (les Ho, les animistes, les bouddhistes Asho, etc.) historiquement opprimés par le régime de Rangoon. Comme à l’accoutumée, l’Empire endoctrine et forme les opposants naturels des régimes qui sont sur sa route, pour plus tard attaquer ces mêmes régimes par dissident interposé. Suivant les techniques de guérilla, ils travaillent en églises-cellules (cell-churches).

cmimg_52513.jpg

Il existe depuis quelques années une forte activité de ces églises protestantes baptistes en Birmanie, notamment à la frontière avec la Chine. On peut imaginer que ce développement ne doit pas manquer d’attirer l’attention de Pékin, qui pourrait se sentir, là aussi, encerclé et pénétré par une force d’influence extérieure, qui au contraire du Vatican, ne dit pas son nom, n’a pas de centre, n’a pas de leader, mais n’en est pas moins influente sur les esprits. Le fonctionnement des églises-cellules, qui vouent une sorte de culte de la personnalité au pasteur venu de l’étranger, ou ayant une relation proche avec les États-Unis, fait parfois penser à celui de sectes, notamment celles du mouvement protestant néo-charismatique.

En quoi une importante communauté évangélique peut-elle être une source d’inquiétude pour un gouvernement asiatique?

L’intervention avérée de pasteurs et autres intervenants accrédités (télévangélistes, conférenciers, chanteurs, etc.) dans les églises évangéliques pour donner des consignes de vote à leurs fidèles, comme ce fut le cas en Corée du Sud, donne une idée de ce qui attend les pays asiatiques qui laissent se répandre le protestantisme évangélique hors de tout contrôle.

En octobre 2011, lors d’élections en Corée du Sud, un groupe de chrétiens protestants a été accusé par la Commission électorale de la Communauté urbaine de Séoul d’envoyer des courriels de nature politique à des citoyens non-pratiquants et non-membres de leurs groupes, contenant une consigne de vote pour un candidat conservateur.

Dans des pays où il n’y a pas d’élections comme la Chine, la Birmanie ou la Corée du Nord, l’action des convertis, souvent choisis délibérément parmi les classes défavorisées (minorités ethniques, populations paupérisées), bien que pas uniquement, peut mener à des actions de nature anti-gouvernementale. Ce fut le cas récemment en Chine, à Wenzhou (la Jérusalem de la Chine), où l’opposition de fidèles protestants à la destruction d’une église décidée par le gouvernement local s’est soldée en faveur des manifestants. Comme le dit un pasteur chinois à cette occasion, «le gouvernement chinois se méfie de l’Église chrétienne, mais ne peut se mettre à dos 70 millions de fidèles» (dont 10 à 12 millions de catholiques de l’église officielle).

C’est justement ce militantisme grassroot, préconisé par les méthodes de prosélytisme et d’évangélisme baptiste, qui pose problème au gouvernement, car il prend vite une dimension politique, renforcée par son association à diverses ONG et autres acteurs de la société civile, souvent financés depuis l’étranger.

On remarque dans la littérature protestante évangélique une constante, celle de parler de persécution des chrétiens en Asie, alors que le nombre d’églises ne cesse d’y augmenter depuis 30 ans. Il s’agit encore de cette technique éprouvée sous d’autres latitudes, selon laquelle un agresseur se décrit comme victime de la situation qu’il a créée : ici, elle permet de dénoncer des États policiers non démocratiques (le Mal absolu), tout en fédérant les fidèles à l’étranger, pour qu’ils donnent de leur personne et partent évangéliser à leur tour, et lever des fonds pour les victimes (Le Bien).

Si persécution sporadique de chrétiens il y a en Asie, elle est éventuellement le fait d’une concurrence avec d’autres religions en cours d’implantation, comme l’islam dans le sud des Philippines, et non du fait de gouvernements, qui ne font que tenter de maîtriser l’expansion d’une foi considérée comme étrangère, et qui recourt à des techniques de guérilla pour se répandre.

Religion_in_China,_year_2010.png

Le protestantisme évangélique a beau s’autodéclarer religion autochtone, ce n’est qu’un mantra destiné à convertir plus de fidèles qui auraient des réticences à adopter une foi jugée étrangère par leur gouvernement.

Ce n’est que lorsque l’ordre public est fortement perturbé, comme à Wenzhou ou en Corée du Nord, qu’un pasteur peut se retrouver emprisonné et les fauteurs de trouble arrêtés. Rien qu’en Chine, entre 1949 à 2015 (mais en fait entre 1978 et 2015, puisque la liberté de religion a été anéantie pendant la révolution culturelle qui dura jusqu’en 1976), le nombre de protestants est passé de 1 à 70 millions, reconnus par l’État, avec leurs églises (plus de 50 000 aujourd’hui), et leur interlocuteur gouvernemental (le Mouvement patriotique des Trois Autonomies) : peut-on parler de persécution des protestants en Chine?

Les réunions que le Parti sanctionne sont celles tenues illégalement dans les maisons des fidèles, avec des pasteurs étrangers inconnus des services d’immigration ou du ministère de tutelle des religions en Chine, venant sur des visas touristiques, ne déclarant pas leur occupation ni l’objet de leur visite en Chine. Ce sont ces églises illégales qui sont à l’origine de l’envoi de missionnaires en Corée du Nord. «Nous voulons aider, et c’est plus facile pour nous que pour un pasteur anglais, sud-coréen ou américain», déclare anonymement un pasteur d’une église illégale en Chine.

Il semble donc établi que le prosélytisme protestant évangélique en Asie est un véhicule comme tant d’autres de pénétration de l’Empire, dans sa quête d’imposer son Nouvel Ordre Mondial.

Est-ce qu’une collaboration avec le Vatican ne serait pas finalement plus bénéfique au gouvernement chinois et au Vatican? Le catholicisme est bien moins prosélyte que son pendant protestant, ce qui est d’ailleurs bien la raison pour laquelle il perd du terrain en Afrique, en Asie et en Amérique du Sud. Il est aussi plus détaché traditionnellement de la politique, comme en atteste une lettre adressée en 2007 par le Pape Benoît XVI aux catholiques de Chine, tentant d’établir une méthode de collaboration avec l’autorité de tutelle des catholiques de Chine, l’Association patriote catholique de Chine (qui, pour être autorisée, a dû officiellement désavouer le Pape).

Ce qui pouvait être perçu comme une tentative du Pape Benoît XVI de travailler vers une normalisation des relations avec la Chine sur une base de respect mutuel est peut être moins vrai depuis l’arrivée du Pape François.

Il est probable que Pékin aurait été plus à l’aise de continuer les négociations avec le Pape Benoît XVI, qui oscillaient entre des périodes de consensus puis de différends,  plutôt qu’avec son successeur, qui est plus préoccupé de générer un bruit de fond médiatique sur des questions sociétales, plutôt que spirituelles. Les prises de position du Pape François, publiquement pro-immigration, pro-LGBT et droit-de-l’hommistes ne sont pas pour rassurer Pékin, pour qui ces trois questions sont d’anciennes préoccupations qui ne disparaîtront pas de sitôt. Tout d’abord, la crainte d’une immigration incontrôlée de réfugiés nord-coréens si le régime de Corée du Nord s’effondrait; la décision année après année de maintenir l’interdiction du prosélytisme LGBT; et une définition des droits de l’homme différente de la version messianique et moralisatrice de l’Occident.

L’expansion agressive du protestantisme évangélique américain en Asie, aux frontières nord, est et sud de la Chine et en Chine elle-même, ne peut qu’inquiéter le gouvernement chinois. Le rapprochement avec le catholicisme, moins prosélyte et moins porté au discours politique, est une alternative que le régime chinois pourrait envisager. Seule la question de l’ordination des évêques continue de diviser le Vatican et l’Association patriote catholique de Chine, après avoir été en passe d’être résolue sous Benoît XVI, avec des ordinations concertées pendant quelques années.

Malheureusement, les récents développements au Vatican, les prises de position sociétales de la nouvelle papauté, qui causent l’incompréhension même en Occident, ne peuvent que refroidir toute velléité de rapprochement avec le Vatican que la Chine aurait pu avoir, alors qu’il aurait été bénéfique aux deux États.

Le régime chinois, contraint de faire un choix entre un évangélisme baptiste agressif et cheval de Troie de l’Empire, et une mouture nouvelle du catholicisme, droit-de-l’hommiste, moraliste et véhiculant elle aussi les valeurs du même Empire, mais dans une version européenne et jésuite (et donc aussi avec une forte composante évangélique), n’aura peut-être d’autre choix que de maintenir le statu quo voire de durcir le ton vis-à-vis de tous les Chrétiens de Chine.

Laurent Schiaparelli

Article original pour Le Saker Francophone

dimanche, 15 mai 2016

George Hawley’s Right-Wing Critics of American Conservatism

Hawley+book.jpg

George Hawley’s Right-Wing Critics of American Conservatism

Review:

George Hawley
Right-Wing Critics of American Conservatism [2]
Lawrence, Kansas: University of Kansas Press, 2016

Most academic studies of White Nationalism and the New Right do not rise above politically correct sneers and smears. They read like ADL or SPLC reports fed through a postmodern buzzword generator. Thus the growing number of serious and balanced academic studies and White Nationalism and the New Right are signs of our rising cultural profile. It is increasingly difficult to dismiss us.

pid_16428.jpgFor instance, The Struggle for the World: Liberation Movements for the 21st Century [3], the 2010 Stanford University Press book on anti-globalization movements by Charles Lindholm and José Pedro Zúquete contains a quite balanced and well-informed chapter on the European New Right. (See Michael O’Meara’s review here [4].) Moreover, Zúquete’s 2007 Syracuse University Press volume Missionary Politics in Contemporary Europe [5] contains extensive chapters on the French National Front and Italy’s Northern League.

Political scientist George Hawley’s new book Right-Wing Critics of American Conservatism is another important contribution to this literature, devoting a chapter to the European New Right and another chapter to White Nationalism. I’m something of an expert in these fields, and in my judgment, Hawley’s research is deft, thorough, and accurate. His writing is admirably clear, and his analysis is quite penetrating.

Naturally, the first thing I did was flip to the index to look for my own name, and, sure enough, on page 265 I found the following:

In recent years, elements of the radical right in the United States have exhibited greater interest in right-wing ideas from continental Europe. In 2010, the North American New Right was founded by Greg Johnson, the former editor of the Occidental Quarterly. While clearly focused on promoting white nationalism in the United States, the North American New Right is heavily influenced by both Traditionalism and the European New Right, and its website (http://www.counter-currents.com/) regularly includes translations from many European New Right intellectuals. The site also embraces the New Right’s idea of metapolitics, noting that the time will not be right for white nationalists to engage in more conventional political activities until a critical number of intellectuals have been persuaded that their ideas are morally and intellectually correct.

The work of my friends at Arktos in bringing out translations of European New Right thinkers is also mentioned on page 241.

Hawley’s definitions of Right and Left come from Paul Gottfried, although they accord exactly with my own views and those of Jonathan Bowden: the Left treats equality as the highest political value. The Right does not regard equality as the highest political value, although there is a range of opinions about what belongs in that place (pp. 11-12). Libertarians, for instance, regard individual liberty as more important than equality. White Nationalists think that both liberty and equality have some value, but racial health and progress trump them both.

Natreview.jpgIn chapter 1, Hawley argues that modern American conservatism was defined by William F. Buckley and National Review in the 1950s. The conservative movement was a coalition of free market capitalists, Christians, and foreign policy hawks. Hawley points out that based on ideology alone, there is no necessary reason why any of these groups would be Right wing or allied with each other. Indeed, the pre-World War II “Old Right” of people like Albert Jay Nock and H. L. Mencken tended to be anti-interventionist, irreligious, and economically populist and protectionist rather than free market. National Review was also philo-Semitic from the start and increasingly anti-racist, whereas the pre-War American Right had strong racialist and anti-Semitic elements. What unified the National Review coalition was not a common ideology but a common enemy: Communism.

In chapter 2, Hawley also documents the role of social mechanisms like purges in defining post-war conservatism. Buckley set the pattern early on by purging Ayn Rand and the Objectivists (for being irreligious) and the John Birch Society (for being conspiratorial and cranky), going on in later years to purge anti-Semites, immigration restrictionists, anti-interventionists, race realists, etc. The same pattern was followed with the firing of race realists Sam Francis from The Washington Times and Jason Richwine from the Heritage Foundation. Indeed, many of the leading figures in the movements Hawley chronicles were purged from mainstream conservatism.

Mainstream conservatism embraces globalization through free trade, immigration, and military interventionism. Thus Hawley devotes chapter 3, “Small is Beautiful,” to conservative critics of globalization, with discussions of the Southern Agrarians, including Richard Weaver and Wendell Berry, communitarian sociologists Robert Nisbet and Christopher Lasch, and economic localists Wilhelm Röpke and E. F. Schumacher. I spent a good chunk of my 20s reading this kind of literature, as well as the libertarian and paleoconservative writers Hawley discusses in later chapters. Thus Hawley’s book can serve as an introduction and a syllabus to a lot of the Anglophone literature that I traversed before coming to my present views.

The Southern Agrarians are particularly interesting, because of they were the most radical school of American conservatism, offering a genuinely anti-liberal and anti-modernist critique of Americanism, with many parallels to what later emerged from the European New Right. The Agrarians also understood the importance of metapolitics. Unfortunately, they were primarily a literary movement and had no effect on political policy. Although I am not a Southerner, I spent a lot of time reading first generation Agrarians like Allen Tate, Donald Davidson, and John Crowe Ransom, plus Weaver, Berry, and Marion Montgomery, and their influence made me quite receptive to the European New Right.

Christians form an important although subaltern bloc in the conservative coalition, thus Hawley devotes chapter 4 to a brief discussion of “Godless Conservatism,” i.e., attempts to make non-religious cases for conservatism. Secular cases for conservatism will only become more important as Christianity continues to decline in America. (Hawley deals with neopagan and Traditionalist alternatives to Christianity in his chapter on the European New Right.)

dec13.jpgChapter 5, “Ready for Prime Time?” is devoted to mainstream libertarianism, including Milton Friedman, the Koch Brothers, the Cato Institute, Reason magazine, the Ron Paul movement, and libertarian youth organizations. Chapter 6, “Enemies of the State,” deals with more radical strands of libertarianism, including 19th-century American anarchists like Josiah Warren and Lysander Spooner, the Austrian School of economics, Murray Rothbard, Hans-Hermann Hoppe, Lew Rockwell, the Mises Institute, and the Libertarian Party. Again, Hawley has read widely with an unfailing eye for essentials.

I went through a libertarian phase in my teens and 20s, and I understand from the inside how someone can move from libertarian individualism to racial nationalism. In 2009, when I was editor of The Occidental Quarterly, I sensed that the Ron Paul and Tea Party movements would eventually send many disillusioned libertarians in the direction of White Nationalism. Thus, to encourage our best minds to think through this connection and develop arguments that might aid the conversion process, TOQ sponsored an essay contest on Libertarianism and Racial Nationalism [6]. Since 2012, this trend has markedly accelerated. Thus I highly recommend Hawley’s chapters to White Nationalists who lack a libertarian background and wish to understand this increasingly important “post-libertarian” strand of the Alternative Right.

Chapter 7, “Nostalgia as a Political Platform,” deals with the paleoconservative movement, covering its debts to the pre-War Old Right, M. E. Bradford, Patrick Buchanan, Thomas Fleming and Chronicles magazine, Sam Francis, Joe Sobran, the paleo-libertarian moment, and Paul Gottfried.

screen322x572.jpegPaleoconservatism is defined in opposition to neoconservatism, the largely Jewish intellectual movement that largely took over mainstream conservatism by the 1980s, aided by William F. Buckley who dutifully purged their opponents. Since the neoconservatives are largely Jewish, and many of the founders were ex-Marxists or Cold War liberals, their ascendancy has meant the subordination of Christian conservatives and free marketeers to the hawkish interventionist wing of the movement. Now that the Cold War is over, the primary concern of neoconservative hawks is tricking Americans into fighting wars for Israel.

Paleoconservatives, by contrast, are actually conservatives. They are defenders of Western civilization and its moral traditions. Many of them are Christians, but not all of them. To a man, they reject multiculturalism and open borders. They are populist-nationalist opponents of economic globalization and political empire-building. Most of them are realists about racial differences.

The paleocons, therefore, are the movement that is intellectually closest to White Nationalism. Indeed, Sam Francis is now seen as a founding figure in contemporary White Nationalism, and both Gottfried and Sobran have spoken at White Nationalist events. Paleoconservatives were also the first Americans to pay sympathetic attention to the European New Right. Thus it makes sense that Hawley places his chapter on paleoconservatism before his chapters on the European New Right and White Nationalism.

Hawley is right that paleoconservatism is basically a spent force. Its leading figures are dead or elderly. Aside from Patrick Buchanan, the movement never had access to the mainstream media and publishers. Unlike mainstream conservative and neoconservative institutions, the paleocons never had large donors and foundations on their side. Beyond that, there is no next generation of paleocons. Instead, their torch is being carried forward by White Nationalists or the more nebulously defined “Alternative Right.”

Chapter 8, “Against Capitalism, Christianity, and America,” surveys the European New Right, beginning with the Conservative Revolutionaries Oswald Spengler, Ernst Jünger, and Arthur Moeller van den Bruck; the Traditionalism of René Guénon and Julius Evola; and finally the New Right proper of Alain de Benoist, Guillaume Faye, and Alexander Dugin.

31slbDCcakL._SL500_BO1,204,203,200_.jpgChapter 9, “Voices of the Radical Right,” covers White Nationalism in America, with discussions of progressive era racialists like Madison Grant and Lothrop Stoddard; contemporary race realism; the rise and decline of such organizations as the KKK, American Nazi Party, Aryans Nations, and the National Alliance; the world of online White Nationalism; and Kevin MacDonald’s work on the Jewish question — which brings us up to where we started, namely the task of forging a North American New Right.

Hawley’s concluding chapter 10 deals with “The Crisis of Conservatism.” Neoconservatism has, of course, been largely discredited by the debacle in Iraq. Since the Republicans are the de facto party of whites, especially white Christians with families, the deeper and more systemic challenges to the conservative coalition include the decline of Christianity in America, the decline of marriage and the family, and especially the growing non-white population, which overwhelmingly supports progressive policies. The conservative electorate is shrinking, and if it continues to decline, it will eventually be impossible for Republicans to be elected, which means the end of conservative political policies.

There is, however, a deeper cause of the crisis of conservatism. The decline of the family and the growth of the non-white electorate are the predictable results of government policies — policies that conservatives did not resist and that they will not try to roll back, ultimately because conservatives are more committed to classical liberal principles than the preservation of their own political power, which can only be secured by “collectivist,” indeed “racist” measures to preserve the white majority. Conservatives will conserve nothing [7] until they get over their ideological commitment to liberal individualism.

Hawley predicts that as the conservative movement breaks down, some Americans will turn toward more radical Right-wing ideologies, leading to greater political polarization and instability. Of the ideologies Hawley surveys, he thinks the localists, secularists, libertarian anarchists, paleocons, and European New Rightists have the least political potential. Hawley thinks that the moderate libertarians have the most political potential, largely because they are closest to the existing Republican Party. Unfortunately, libertarian radical individualism would only accelerate the decline of the family, Christianity, and the white electorate.

Of all the movements Hawley surveys, only White Nationalism would address the causes of the decline of the white family and the white electorate. But Hawley thinks that White Nationalism faces immense challenges, although the continued decline of the conservative movement might also present us with great opportunities:

Explicit white nationalism is surely the most aggressively marginalized ideology discussed here. As we have seen, advocating racism is perhaps the fastest way for a politician, pundit, or public intellectual to find himself or herself a social pariah. That being the case, there is little chance that transparent white racism will again become a major political force in the United States in the immediate future. However, the fact that antiracists on the right and left are extraordinarily vigilant in their effort to drive racists from public discourse can be viewed as evidence that they believe such views could once again have a large constituency, should racists ever again be allowed to reenter the mainstream public debate. Whether their fears in this regard are justified is impossible to determine at this time. What we should remember, however, is that the marginalization of the racist right in America was largely possible thanks to cooperation from the mainstream conservative movement, which has frequently jettisoned people from its ranks for openly expressing racist views. If the mainstream conservative movement loses its status as the gatekeeper on the right, white nationalism may be among the greatest beneficiaries, though even in this case it will face serious challenges. (p. 291)

Right-Wing Critics of American Conservatism is an important academic study, but it has a significant oversight. The meteoric rise of Donald Trump illustrates the power of another Right-wing alternative to American conservatism, namely populism. Populism is a genuinely Right-wing movement, because although it is critical of economic and political inequality as threats to the integrity of the body politic, populism is nationalistic. It does not regard citizens and foreigners as of equal worth.

I also noticed a couple of smaller mistakes. F. A. Hayek is twice referred to as a Jew, which is false, and on page 40 Hawley refers to Young Americans for Liberty when he means Young Americans for Freedom. Hawley uses the repulsive euphemism “undocumented immigrant” and repeatedly uses the word “vicious” to describe ideas he dislikes, but as a whole his book is relatively free of the tendentious jargon of liberal academics.

I highly recommend Right-Wing Critics of American Conservatism [2]Hawley is clearly not a friend of conservatism or White Nationalism. He’s something far more useful: a frank and fair-minded critic. Conservatives, of course, lack the capacity for self-criticism and self-preservation. So they will ignore him, to their detriment. But White Nationalists will read him and profit from it.

Article printed from Counter-Currents Publishing: http://www.counter-currents.com

URL to article: http://www.counter-currents.com/2016/05/right-wing-critics-of-american-conservatism/

URLs in this post:

[1] Image: http://www.counter-currents.com/wp-content/uploads/2016/05/HawleyCover.jpg

[2] Right-Wing Critics of American Conservatism: http://www.amazon.com/gp/product/0700621938/ref=as_li_tl?ie=UTF8&camp=1789&creative=9325&creativeASIN=0700621938&linkCode=as2&tag=thesavdevarc-20&linkId=B3FDFPYGYKSEBF4W

[3] The Struggle for the World: Liberation Movements for the 21st Century: http://www.amazon.com/gp/product/B005ZKKS1G/ref=as_li_tl?ie=UTF8&camp=1789&creative=9325&creativeASIN=B005ZKKS1G&linkCode=as2&tag=thesavdevarc-20&linkId=4AV4RLLWIQSXLRUC

[4] here: http://www.counter-currents.com/2010/07/against-the-armies-of-the-night/

[5] Missionary Politics in Contemporary Europe: http://www.amazon.com/gp/product/0815631499/ref=as_li_tl?ie=UTF8&camp=1789&creative=9325&creativeASIN=0815631499&linkCode=as2&tag=thesavdevarc-20&linkId=WYRYTYVV4TLV25PY

[6] Libertarianism and Racial Nationalism: http://www.toqonline.com/archive/2011-2/spring-11/

[7] Conservatives will conserve nothing: http://www.counter-currents.com/2016/02/why-conservatives-conserve-nothing/

Un responsable américain attise les tensions à la frontière entre l’Inde et la Chine

China-India-Border-Disputes.jpg

Un responsable américain attise les tensions à la frontière entre l’Inde et la Chine

Auteur : Kumara Ira
Ex: http://zejournal.mobi

Le consul général des États-Unis à Calcutta, Craig L. Hall, a approuvé de façon provocante des revendications territoriales indiennes visant la Chine au cours d’une réunion le 28 avril avec le ministre- président de l’État d’Arunachal Pradesh, dans le nord-est de l’Inde, Kalikho Pul.

Se référant à des revendications chinoises sur une partie de l’Arunachal Pradesh, Hall a déclaré que le gouvernement américain considérait l’Arunachal Pradesh comme partie intégrante de l’Inde. L’Arunachal Pradesh — situé stratégiquement entre le Bhoutan à l’ouest, la Birmanie à l’est, et la Chine au nord — comprend plusieurs zones également revendiquées par la Chine, telles que Tawang, le site du célèbre monastère de Tawang.

Hall a appelé au développement des infrastructures dans cette région éloignée et stratégique, où la construction de routes et d’infrastructures de transport est vitale pour le déploiement de la puissance militaire. Il a également appelé à des coentreprises et partenariats entre les USA et l’Inde dans le commerce et les échanges, pouvant être organisés par le consulat de Calcutta (Kolkata). « Le consulat, » a déclaré Hall, « sait que des sociétés américaines sont intéressées par des contrats de travaux pour le développement des infrastructures en Inde et dans le Nord-Est en particulier, avec un accent particulier sur l’Arunachal Pradesh ».

Arunachal_Pradesh_Seal.svg.png

Les commentaires de Hall étaient une tentative calculée pour attiser le conflit frontalier entre l’Inde et la Chine et ont été faits quelques jours seulement après que le conseiller de la sécurité nationale de l’Inde, Ajit Doval, a visité Beijing (Pékin) pour des discussions sur la résolution de la question frontalière.

En 1962, l’Inde et la Chine ont mené une guerre d’un mois sur la frontière himalayenne contestée, qui a fait plus de 4000 victimes. La guerre avait éclaté après une série d’incidents frontaliers violents à la suite du soulèvement tibétain de 1959, soutenu par la CIA, contre le régime chinois. Après la défaite de l’insurrection, l’Inde avait accordé l’asile au chef du bouddhisme tibétain, le Dalaï-Lama, et à ce jour le siège du gouvernement tibétain en exil est à Dharamsala dans le nord-ouest de l’Inde.

L’Inde et la Chine partagent une longue frontière qui traverse plusieurs régions contestées, dont une grande partie de l’Arunachal Pradesh et de l’Aksai Chin. Ce dernier est situé entre les régions autonomes chinoises du Xinjiang et du Tibet et est revendiqué par l’Inde comme faisant partie de la région du Ladakh dans le Jammu-et-Cachemire. Au cours de la Guerre sino-indienne de 1962, les forces chinoises ont envahi l’Arunachal Pradesh dont elles se sont retirées plus tard, mais elles ont étendu leur contrôle sur l’Aksai Chin.

Les commentaires de Hall reviennent à jeter de l’huile sur le feu du conflit frontalier sino-indien. Ils montrent que dans le cadre de son « pivot vers l’Asie », qui vise à isoler la Chine et à préparer la guerre contre elle, Washington est prêt à soutenir les revendications territoriales de l’Inde, considérées par Beijing comme des menaces à l’intégrité territoriale de la Chine.

Les remarques de Hall viennent au moment où l’Inde, s’alignant de plus en plus sur l’offensive stratégique des États-Unis contre la Chine, cherche à tirer parti de ses relations avec Washington pour atteindre au statut de puissance mondiale. L’Inde développe rapidement son armée et exige que les États d’Asie du Sud la reconnaissent comme l’hégémon régional.

Les États-Unis font pression pour que l’Inde devienne un État de première ligne dans son « pivot » anti-Chine. En avril, ils ont obtenu l’accord « de principe » de New Delhi pour un Protocole d’entente bilatéral d’échange logistique (Lemoa) qui donnera aux Etats-Unis l’accès à des bases militaires indiennes pour le réapprovisionnement, la réparation et le repos.

La Chine s’est fermement opposée aux commentaires de Hall. Mercredi, Beijing a déclaré que toute intervention « irresponsable » d’un tiers dans le différend frontalier sino-indien, « compliquerait » la question.

Le ministère chinois des Affaires étrangères a déclaré: « La question de la frontière entre la Chine et l’Inde porte sur la souveraineté territoriale de la Chine et les sentiments du peuple chinois. Toute tierce partie doit respecter l’histoire et la réalité concernant la question frontalière, respecter les efforts déployés par la Chine et l’Inde pour résoudre les différends territoriaux par la négociation, éviter de s’impliquer dans les conflits ou de prendre parti sur les questions relatives à la propriété du territoire contesté ».

main-qimg-9d516b24b93665f2467d48d8d98a8222.jpg

Il a ajouté: « Des négociations saines entre la Chine et l’Inde sur la question de la frontière ainsi que la paix et la tranquillité des zones frontalières ces dernières années ont créé des conditions favorables à la croissance des relations bilatérales et à leur développement respectifs ».

Les remarques de Hall constituent une provocation délibérée de plus contre la Chine par l’impérialisme américain à l’heure où il attise les tensions dans toute la région.

Arunachal-Pradesh-Tourism-Tawang.jpg

Dans le cadre de son « pivot » anti-chine « vers l’Asie », les États-Unis sont en train de fomenter le séparatisme en Chine, en particulier au Tibet et au Xinjiang. Des responsables américains ont récemment assisté à une conférence des organisations séparatistes chinoises financées par les États-Unis à Dharamsala, en Inde. Washington cherche à exploiter des conflits sociaux et ethniques acerbes — ayant leurs racines dans la politique réactionnaire du régime chinois, qui a de plus en plus fomenté le nationalisme chinois « Han » depuis la restauration du capitalisme en Chine dans les années 1980 — pour menacer la Chine d’une fragmentation selon des lignes ethniques.

Comme dans la région chinoise proche, où les minorités ethniques souffrent de la pauvreté et de la répression de Beijing, le nord-est de l’Inde est la région la plus pauvre et la moins développée du pays et est en proie aux tensions ethniques et aux insurrections.

« C’est l’endroit le plus complexe d’Asie », dit Sanjoy Hazarika, le président et directeur du Centre d’études du Nord-Est et de la recherche politique de New Delhi. « Vous avez 220 groupes ethniques pressées dans un territoire en forme de triangle, lié à l’Inde juste par un minuscule couloir ».

Comme dans le Jammu-et-Cachemire, New Delhi a depuis des décennies donné, dans l’Arunachal Pradesh et six autres États du Nord, de vastes et draconiens pouvoirs à l’armée en vertu de la notoire Loi sur les pouvoirs spéciaux des forces armées, pour y supprimer de nombreux mouvements sécessionnistes armés ethno-nationaux et anti-gouvernementaux. En raison de la pauvreté et de l’insécurité générale, des centaines de milliers de personnes de cette région défavorisée ont émigré vers les grandes villes indiennes pour y chercher un emploi, où ils sont souvent confrontés à la discrimination.

Washington craint que la Chine puisse exploiter les insurrections dans le nord de l’Inde, encourageant le séparatisme en Inde pour riposter à la promotion du séparatisme en Chine par Washington et il répond en s’ingérant de façon irresponsable dans les différends entre New Delhi et Beijing.

En même temps que Washington œuvre agressivement pour intégrer l’Inde dans son offensive stratégique contre Beijing, la longue rivalité entre l’Inde et la Chine et leurs conflits frontaliers, deviennent de plus en plus étroitement liés à la rivalité stratégique encore plus explosive entre les États-Unis et la Chine, poussant ainsi l’Asie, sinon le monde entier, vers une nouvelle conflagration.


- Source : WSWS

samedi, 14 mai 2016

Donald Trump: possible père refondateur de l'Union Européenne

Trump_Mass_Deportations-0d003.jpg

Donald Trump: possible père refondateur de l'Union Européenne

par Jean-Paul Baquiast

Ex: http://www.europesolidaire.eu

L'opinion mal informée attribue généralement à Robert Schumann et ses homologues le mérite d'avoir été les pères fondateurs de l'Europe. En fait, comme ceci a été révélé depuis, ces « européens » avaient été des instruments de Washington, CIA interposée, pour faire de l'Europe un glacis militaire et économique leur permettant de commencer à mener la guerre contre l'URSS
Celle-ci a laissé place depuis à la Russie, mais la guerre américaine n'a jamais cessé et l'Europe n'a jamais été capable de prendre son indépendance politique et son autonomie militaire et économique.

La France sous le gaullisme avait pendant quelques années résisté à ce rôle d'alliée subordonnée, mais après 1968 (provoqué d'ailleurs par la CIA comme on l'a su depuis pour faire tomber De Gaulle) elle n'a eu de cesse de servir au mieux ce qu'il faut bien continuer encore à nommer l'impérialisme américain. Nicolas Sarkozy, premier des atlantistes, s'était ainsi immédiatement attaché à faire rentrer la France dans l'Otan et à initialiser au Moyen Orient les guerres qu'attendaient les intérêts pétroliers et stratégiques d'outre Atlantique.

Il en résulte aujourd'hui que l'Europe n'a ni diplomatie propre, ni moyens de défense autonome' par rapport aux forces armées américaines, ni volonté de concurrencer vraiment les entreprises et les banques américaines, ne fut-ce qu'en se protégeant par un minimum de protectionnisme. Aujourd'hui elle se laisse imposer les « sanctions » à l'égard de la Russie et les négociations dites du Tafta ou TTIP dont la véritable consigne peut se résumer par un simple mot « buy american ».

Or ce que les Européens n'ont jamais eu le courage de faire, Donald Trump s'il accède à la présidence les obligera peut-être à s'y résoudre. Le programme de celui-ci se précise peu à peu. S'il l'applique – à condition de n'être pas assassiné auparavant – l'Union européenne devra se résoudre à se doter d'une défense vraiment européenne, Donald Trump ayant déjà affirmé qu'il n'assurerait pas ce rôle. Par ailleurs, l'Union devra apprendre à voir dans la Russie un partenaire possible, « Le Donald » ayant affirmé vouloir cesser enfin une guerre froide à l'égard de Moscou jamais interrompue depuis la 2e guerre mondiale. Au plan économique, il dit enfin vouloir par le protectionnisme redonner de la vigueur à l'économie réelle américaine rendue exsangue par les impératifs de mondialisation imposés par Wall Street.

Aujourd'hui 3 mai, il a surpris tous les bien-pensants du néolibéralisme en annonçant qu'il n'hésiterait pas, par le protectionnisme, à se défendre des offensives économiques de la Chine. Celle-ci profite en effet du libre-échange imposé par les élites financières mondialisées pour inonder l'Amérique de produits à bas coûts, ruinant ce faisant ce qui restait à cette dernière de ressources industrielles propres.

Si comme prévisible, Trump accède à la Présidence, si ensuite il ne renonce pas à mettre en œuvre le programme annoncé, s'il trouve enfin aux Etats-Unis les compétences nécessaires pour mettre celui-ci en application, l'Union européenne sera nolens volens obligée d'en tenir compte et de s'adapter.

Concrètement notamment, cela voudra dire que, comme la fait dans une certaine mesure la France, elle se dotera d'une défense vraiment européenne, qu'elle réinvestira en propre dans les industries et la recherche, notamment dans le domaine numérique et finalement qu'elle négociera sans demander d'autorisation les coopérations qui lui paraitront utiles avec la Russie et le reste du monde. Elle devra enfin rebâtir et protéger ses frontières, en généralisant notamment un protectionnisme sélectif indispensable à son développement.

Si les pays européens s'y résolvent, les manuels d'Histoire pourront présenter Donald Trump comme le vrai et premier père de l'Europe. Il aura fait sans nécessairement le rechercher ce que nul Européen n'avait été avant lui capable de faire.

 

vendredi, 13 mai 2016

USA : fomenter un « golpe » institutionnel au Brésil pour tenter de casser les Brics

DILMA-ROUSSEFF-640x468.jpg

USA : fomenter un « golpe » institutionnel au Brésil pour tenter de casser les Brics

Ex: http://www.leblancetlenoir.com 

Le foutoir continue et s'amplifie même, au Brésil, où la présidente élue, Dilma Rousseff est sous le coup d'une destitution pour un motif mineur : débits budgétaires reportés d'une année sur l'autre, pour pouvoir annoncer un déficit inférieur. Un processus utilisé régulièrement par tous les partis au pouvoir. Les députés ont voté à une large majorité la demande de destitution. Ces parlementaires « golpistes » qui se sont prononcés pour la destitution sont aussi clairs qu'un élu des Haut-de-Seine ! Beaucoup ont gamellé auprès de Petrobras, machine à sous généreuse, d'autres sont poursuivis pour crimes et corruption…Au total, 60 % des 594 membres du Congrès du Brésil font face à des accusations graves comme corruption, fraude électorale, déforestation illégale, enlèvements et homicides. Quant à leur chef de file, le président de la chambre des députés Eduardo Cunha, il est lui-même mis en accusation par le Tribunal Suprême. Cette même Cour l'a écarté de ses fonctions pour avoir tenté d’entraver l’enquête sur les faits de corruption dont il est accusé ! C'est l'arroseur arrosé. Adversaire de Dilma Rousseff, il est l’homme qui avait déclenché « l'impeachment », en acceptant, en décembre, une demande de destitution de la présidente, une prérogative du chef du perchoir. Il a été remplacé par son vice-président Waldir Maranhao. Celui-ci a provoqué un retentissant coup de théâtre en annulant le vote de l'assemblée plénière des députés qui avaient approuvé le 17 avril la procédure de destitution de Dilma Rousseff.

Mais, nouveau coup de théatre, quelques heures plus tard, le président du Sénat Renan Calheiros a ordonné dans l'après-midi la poursuite de la procédure, ignorant la décision "intempestive" de suspension prise quelques heures plus tôt par le président par Waldir Mananhao le président intérim du Congrès des députés...lui-même revenu sur sa décision à la suite de pressions puissantes et multiples ! Quant on parle de foutoir, c'est un terme encore bien faible… Le sénat va donc, dès aujourd'hui "destituer" la présidente.

Le coup d'état « non violent » a donc repris pour destituer une présidente démocratiquement élu, et installer un des politiciens les plus corrompus – qui, d’une façon qui ne doit rien au hasard – se trouvent être préféré par l'establishment politique étasunien, bafouant ainsi la démocratie et les 54 millions de personnes qui ont réélu la première femme présidente du Brésil, il y a seulement 18 mois. La personne que les oligarques brésiliens et leurs organes de presse tentent d'installer en tant que président : le vice-président Michael Temer est l’incarnation de la contamination par la corruption au service des oligarques. Il est profondément impopulaire.

Deux faces d’un même pays s’affrontent par partis interposés, le Brésil des riches et celui des pauvres. Il s'agit bien de manœuvres de renversement illégal d'un pouvoir élu démocratiquement. Il est mené par l'opposition de droite : la droite politique qui veut échapper aux condamnations judiciaires et revenir aux affaires ; et la droite judiciaire qui utilise les enquêtes et leur médiatisation de façon partisane et en violant au passage les libertés publiques. Que des millions de personnes appuient ce coup d'État dans la rue n'y change rien. D'autres l'avaient fait avant eux il y a 50 ans, lorsqu'un coup d'Etat militaire avait été acclamé par des millions de Brésiliens, la presse, et la majorité de la classe politique. La dictature a duré 21 ans. Et certains en rêvent de nouveau.

rouss21652-jpg_3209192.jpg

La bourgeoisie brésilienne ne se satisfait pas de sa condition de classe dominante. Elle exige des conditions qui lui permettent d'exploiter sans entrave la force de travail dont elle dispose : les plus pauvres, les sans-terres. Et les classes moyennes sont exaspérées non pas parce que leur niveau de vie se dégrade mais parce qu'elles voient les plus démunis gagner un peu plus de droits ! Cette pseudo élite ne reconnaît le principe de majorité que lorsqu’il répond à ses intérêts. Les banksters tout comme la bourse jouent à fond la destitution de la présidente de gauche (quelle horreur !). BNP-Paribas pense d'ailleurs qu'il est "temps de redevenir positif sur les perspectives économiques du Brésil...à condition que le vice-président Michel Temer "réussisse à réunir une équipe solid et à obtenir le soutien d'une partie du congrès pour prendre des mesures certes impopulaires mais au combien nécéssaire". Même des banques françaises jouent contre la présidente élue. Insupportable ingérence.

Voilà la conspiration qui veut foutre en l'air Dilma Rousseff. Certes le Parti des Travailleur a trahi sa promesse d'être un parti "propre", "éthique". Il s'est fondu dans le système, en partie pour mener des politiques d'inclusion que rejetait l'écrasante majorité de la classe politique (qu'il lui a fallu acheter), en partie parce que des politiciens du PT ont profité de l'exercice du pouvoir pour s'enrichir personnellement. Certes Dilma gouverne peu et mal. Sous la pression de la crise économique résultant de la chute des prix des matières premières dont le Brésil est un grand pourvoyeur mondial, elle a dû renoncé à mener des politiques sociales et de croissance. Mais ce ne sont pas des raisons valides pour faire démettre une présidente élue démocratiquement.

L'objectif des « golpistes » est de s'attaquer à la souveraineté populaire, exprimée par le vote et de la mettre sous la tutelle de la magistrature dont les membres, non élus et protégés de tout contrôle social, sont engagés dans un programme de changements rétrogrades qui ne sont pas exprimés. Contre la gauche – qu'ils vomissent – tout leur est bon, y compris un putsch militaire.

Mais derrière ces basses manoeuvres - que l'on retrouve aussi au Vénézuela - on devine les sales pattes des officines secrètes – CIA entre autres - qui magouillent sournoisement pour imposer la politique de Washington. A travers le Brésil, ce qui est visé, c'est l'alliance économique des BRICS (Brésil, Russie, Inde, Chine, Afrique du Sud). Car quelle meilleure façon de contrecarrer les actions réussies de cette alliance qui ose se dresser face à « l'Empire » que de placer au Brésil un gouvernant oligarchique à la botte des intérêts étasuniens ?

Bonne ambiance pour les J.O. !

http://www.agoravox.fr/actualites/international/article/u...

lundi, 09 mai 2016

London School of Economics velt vernietigend oordeel over TTIP

LSE-3560_ba6c82fc5a_z.jpg

London School of Economics velt vernietigend oordeel over TTIP

Vrijhandelsverdrag met Amerika gaat Europese belastingbetalers miljarden kosten

Oproep: Onderteken petitie voor referendum over het TTIP, dat al ruim 120.000 handtekeningen heeft gekregen

Bijna 600.000 banen verloren door vrijhandelsverdrag, gemiddeld inkomen daalt in Noord Europa met ruim € 4800,

De gerenommeerde London School of Economics velt in een rapport een vernietigend oordeel over het TTIP vrijhandelsverdrag dat de EU met de VS wil sluiten. Volgens de economische experts herbergt het TTIP grote risico’s voor Europa en brengt het ons nauwelijks iets goeds. Opmerkelijk is dat de Britse premier Cameron opdracht gaf voor het onderzoek, maar toen de uitkomst hem niet aanstond, het vervolgens werd weggemoffeld.

Tegenstanders van het TTIP, die zich hebben verenigd in ‘Global Justice Now’, hebben de Britse versie van de wet openbaarheid bestuur gebruikt om het LSE-rapport, dat uit 2013 dateert, boven tafel te krijgen. De conclusies in dat rapport zullen het premier David Cameron waarschijnlijk nog moeilijker maken om het Britse volk ervan te overtuigen in juni voor een langer verblijf in de EU te stemmen.

TTIP gaat Europese belastingbetalers miljarden kosten

Volgens de London School of Economics zal het TTIP de Britse (en Europese) belastingbetalers vooral heel erg veel geld gaan kosten. Voordelen zijn er nauwelijks. De beweringen van politici dat Europese investeerders het in de VS makkelijker zullen krijgen, zijn op zijn best zeer twijfelachtig.

De economen wijzen op het vergelijkbare NAFTA akkoord tussen de VS en Canada. De Canadezen zijn daardoor al miljarden kwijtgeraakt aan dure rechtszaken die door Amerikaanse investeerders werden aangespannen. Ook in het TTIP krijgen deze investeerders de macht om Europese overheden voor het gerecht te dagen. Gezien de ervaringen in Canada zal het enorme sommen belastinggeld gaan kosten om met hen te schikken. Europa wordt daarin zelfs kwetsbaarder voor de VS dan Canada.

De LSE ontrafelt een tweede leugen van de politici: extra investeringen in de economie zullen er niet of nauwelijks komen, ook niet uit India of China, omdat investeerders nu al meer dan voldoende ruimte en rechtszekerheid hebben op de Britse en Europese markten. Ook in dit opzicht is het TTIP enkel gunstig voor de Amerikanen, maar wel ten koste van investeerders uit andere landen. De Amerikanen azen met name op volledig vrije toegang tot het nog in ontwikkeling zijnde Oost Europa.

Politici weigeren details verdrag bekend te maken

De slechte ervaringen die Canada met het NAFTA vrijhandelsverdrag heeft, dreigen met het TTIP ook de onze worden. Geen wonder dat premier Cameron het onderzoek onmiddellijk achter slot en grendel opborg, en in plaats daarvan gewoon doorging met het opnoemen van de in werkelijkheid niet bestaande voordelen van het verdrag voor Europa. De Britse leider overlegde gisteren nog met twee andere grote voorstanders van het TTIP, de Amerikaanse president Obama en de Duitse bondskanselier Merkel.

Ook Merkel heeft tot nu toe geweigerd de details van het TTIP openbaar te maken, reden waarom er bij onze Oosterburen afgelopen weekend nog massale demonstraties werden gehouden. In politiek Den Haag doet men er zoals gewoonlijk hoofdzakelijk het zwijgen toe als er weer eens zal worden ingestemd met besluiten of verdragen waarvan men beseft dat deze schadelijk zijn voor de Nederlandse werknemers en belastingbetalers.

Bijna 600.000 Europese banen zullen verloren gaan

Vorig jaar waarschuwde de Britse vakbond GMB dat de EU na het sluiten van het TTIP vrijhandelsverdrag met de VS overspoeld zal worden met tot nu toe verboden zwaar giftige chemicaliën die erom bekend staan kanker, geboorteafwijkingen en ontwikkelingsstoornissen te veroorzaken.

In 2014 bleek uit een onafhankelijk onderzoek van het Global Development & Environment Institute dat van de beloofde stimulatie van de werkgelegenheid in Europa niets terecht zal komen, en er de komende 10 jaar juist 583.000 banen verloren zullen gaan. Ook zullen de gemiddelde lonen in Noord Europa jaarlijks met maar liefst € 4848,- dalen als gevolg van het TTIP.

‘Veiligheid en gezondheid burgers op het spel’

De Europese Commissie beweert dat het TTIP de Europese economie een impuls van € 120 miljard kan geven, maar critici houden vol dat alleen al het feit dat de onderhandelingen achter gesloten deuren worden gehouden bewijst dat naast de werkgelegenheid en het inkomen ook de veiligheid en de gezondheid van de Europese burgers doelbewust op het spel worden gezet.

Teken petitie voor referendum over TTIP

Om al deze redenen is er een online petitie gestart voor een referendum over het TTIP- en CETA verdrag (CETA: vergelijkbaar verdrag met Canada). Wij roepen iedereen op om deze petitie, die al bijna 121.000 handtekeningen heeft gekregen, te ondertekenen (let op: u krijgt na afloop een email waarmee u uw ondertekening moet bevestigen, anders telt deze niet mee). Zodra de 300.000 zijn gehaald, heeft de regering geen andere keus dan een referendum te organiseren. Het grote succes van het recente Oekraïne referendum bewijst dat ondertekening wel degelijk zin heeft!

Xander

(1) Deutsche Wirtschafts Nachrichten

Zie ook o.a.:

25-04: Britse reactie op Obama’s pleidooi voor EU en TTIP: Waarom luisteren naar president die wereld in chaos stortte?

2015:
25-06: Senaat VS akkoord met TPP, geeft Obama dictatoriale macht
06-06: Bilderberg 2015: Westerse elite wil contant geld uitbannen (/ Grenzen Amerika en Europa moeten nog verder open voor miljoenen immigranten – ‘Planetair regime’ in oprichting)
05-06: EU moet zwaar giftige chemicaliën toelaten door vrijhandelsakkoord met VS

2014:
14-11: Vrijhandelsakkoord met VS vernietigt ruim half miljoen Europese banen
28-09: Vrijhandelsverdrag: EU schakelt macht nationale parlementen uit (/ ‘Sluizen herverdeling welvaart eurozone worden geopend’)

Somnolent Europe, Russia, and China

ours-hibernation.jpg

Somnolent Europe, Russia, and China

Can the world wake up?

By

PaulCraigRoberts.org

On September 19, 2000, going on 16 years ago, Ambrose Evans-Pritchard of the London Telegraph reported:

“Declassified American government documents show that the US intelligence community ran a campaign in the Fifties and Sixties to build momentum for a united Europe. It funded and directed the European federalist movement.

“The documents confirm suspicions voiced at the time that America was working aggressively behind the scenes to push Britain into a European state. One memorandum, dated July 26, 1950, gives instructions for a campaign to promote a fully fledged European parliament. It is signed by Gen. William J. Donovan, head of the American wartime Office of Strategic Services, the precursor of the CIA.”

The documents show that the European Union was a creature of the CIA.

As I have previously written, Washington believes that it is easier to control one government,the EU, than to control many separate European governments. As Washington has a long-term investment in orchestrating the European Union, Washington is totally opposed to any country exiting the arrangement. That is why President Obama recently went to London to tell his lap dog, the British Prime Minister, that there could be no British exit.

eu_us_flag.jpg

Like other European nations, the British people were never allowed to vote on whether they were in favor of their country ceasing to exist and them becoming Europeans. British history would become the history of a bygone people like the Romans and Babylonians.

The oppressive nature of unaccountable EU laws and regulations and the EU requirement to accept massive numbers of third world immigrants have created a popular demand for a British vote on whether to remain a sovereign country or to dissolve and submit to Brussels and its dictatorial edicts. The vote is scheduled for June 23.

Washington’s position is that the British people must not be permitted to decide against the EU because such a decision is not in Washington’s interest.

The prime minister’s job is to scare the British people with alleged dire consequences of “going it alone.” The claim is that “little England” cannot stand alone. The British people are being told that isolation will spell their end, and their country will become a backwater bypassed by progress. Everything great will happen elsewhere, and they will be left out.

If the fear campaign does not succeed and the British vote to exit the EU, the open question is whether Washington will permit the British government to accept the democratic outcome.

Alternatively, the British government will deceive the British people, as it routinely does, and declare that Britain has negotiated concessions from Brussels that dispose of the problems that concern the British people.

Washington’s position shows that Washington is a firm believer that only Washington’s interests are important. If other people’s wish to retain national sovereignty, they are simply being selfish. Moreover, they are out of compliance with Washington, which means they can be declared a “threat to American national security.” The British people are not to be permitted to make decisions that do not comply with Washington’s interest. My prediction is that the British people will either be deceived or overridden.

It is Washington’s self-centeredness, the self-absorption, the extraordinary hubris, and arrogance, that explains the orchestrated “Russian threat.” Russia has not presented herself to the West as a military threat. Yet, Washington is confronting Russia with a US/NATO naval buildup in the Black Sea, a naval, troop, and tank buildup in the Baltics and Poland, missile bases on Russia’s borders, and plans to incorporate the former Russian provinces of Georgia and Ukraine in US defense pacts against Russia.

When Washington, its generals, and European vassals declare Russia to be a threat, they mean that Russia has an independent foreign policy and acts in her own interest rather than in Washington’s interest. Russia is a threat because Russia demonstrated the capability of blocking Washington’s intended invasion of Syria and bombing of Iran. Russia blunted one purpose of Washington’s coup in the Ukraine by peacefully and democratically reuniting with Crimea, the site of Russia’s the Black Sea naval base and a Russian province for several centuries.

Perhaps you have wondered how it was possible for small countries such as Iraq, Libya, Syria, Yemen, and Venezuela to be threats to the US superpower. On its face Washington’s claim is absurd. Do US presidents, Pentagon officials, national security advisors, and chairmen of the Joint Chiefs of Staff really regard countries of so little capability as military threats to the United States and NATO countries?

No, they do not. The countries were declared threats, because they have, or had prior to their destruction, independent foreign and economic policies. Their policy independence means that they do not or did not accept US hegemony. They were attacked in order to bring them under US hegemony.

In Washington’s view, any country with an independent policy is outside Washington’s umbrella and, therefore, is a threat.

Venezuela became, in the words of US President Obama, an “unusual and extraordinary threat to the national security and foreign policy of the United States,” necessitating a “national emergency” to contain the “Venezuelan threat” when the Venezuelan government put the interests of the Venezuelan people above those of American corporations.

venezxresdefault.jpg

Russia became a threat when the Russian government demonstrated the ability to block Washington’s intended military attacks on Syria and Iran and when Washington’s coup in the Ukraine failed to deliver to Washington the Russian Black Sea naval base.

Clearly Venezuela cannot possibly pose a military threat to the US, so Venezuela cannot possibly pose an “unusual and extraordinary threat to the national security of the US.” Venezuela is a “threat” because the Venezuelan government does not comply with Washington’s orders.

It is absolutely certain that Russia has made no threats whatsoever against the Baltics, Poland, Romania, Europe, or the United States. It is absolutely certain that Russia has not invaded the Ukraine. How do we know? If Russia had invaded Ukraine, the Ukraine would no longer be there. It would again be a Russian province where until about 20 years ago Ukraine resided for centuries, for longer than the US has existed. Indeed, the Ukraine belongs in Russia more than Hawaii and the deracinated and conquered southern states belong in the US.

Yet, these fantastic lies from the highest ranks of the US government, from NATO, from Washington’s British lackeys, from the bought-and-paid-for Western media, and from the bought-and-paid-for EU are repeated endlessly as if they are God’s revealed truth.

Syria still exists because it is under Russian protection. That is the only reason Syria still exists, and it is also another reason that Washington wants Russia out of the way.

Do Russia and China realize their extreme danger? I don’t think even Iran realizes its ongoing danger despite its close call.

If Russia and China realize their danger, would the Russian government permit one-fifth of its media to be foreign owned? Does Russia understand that “foreign-owned” means CIA owned? If not, why not? If so, why does the Russian government permit its own destabilization at the hands of Washington’s intelligence service acting through foreign owned media?

China is even more careless. There are 7,000 US-funded NGOs (non-governmental organizations) operating in China. Only last month did the Chinese government finally move, very belatedly, to put some restrictions on these foreign agents who are working to destabilize China. The members of these treasonous organizations have not been arrested. They have merely been put under police watch, an almost useless restriction as Washington can provide endless money with which to bribe the Chinese police.

ngochina0822_LDD001_0.jpg

Why do Russia and China think that their police are less susceptible to bribes than Mexico’s or American police? Despite the multi-decade “war on drugs,” the drug flow from Mexico to the US is unimpeded. Indeed, the police forces of both countries have a huge interest in the “war on drugs” as the war brings them riches in the form of bribes. Indeed, as the crucified reporter for the San Jose Mercury newspaper proved many years ago, the CIA itself is in the drug-running business.

In the United, States truth-tellers are persecuted and imprisoned, or they are dismissed as “conspiracy theorists,” “anti-Semites,” and “domestic extremists.” The entire Western World consists of a dystopia far worse than the one described by George Orwell in his famous book, 1984.

That Russia and China permit Washington to operate in their media, in their universities, in their financial systems, and in “do-good” NGOs that infiltrate every aspect of their societies demonstrates that both governments have no interest in their survival as independent states. They are too scared of being called “authoritarian” by the Western presstitute media to protect their own independence.

My prediction is that Russia and China will soon be confronted with an unwelcome decision:accept American hegemony or go to war.

dimanche, 08 mai 2016

Republicans Feel Trump Terror

donald-trump-melania.jpg

Republicans Feel Trump Terror

By

Ex: http://www.lewrockwell.com

NEW YORK –  It’s been a treat watching the arrogant, Masters of the Universe Republicans wring their hands and ululate over the terror that is Donald Trump.

Most of my serious Republican friends don’t know what to do:  they yearn to be close to power, but fear backing Trump will make them pariahs at their local golf club. So they are still hiding in the closet.

‘I am Shiva, destroyer of worlds!’ That’s Trump’s message to America’s oligarchs. And scared they should be because of even a modest Trump revolution would threaten their corrupt, stultified political system and their wallets.

As a former conservative Republican who has watched his lifelong party become a vehicle for special interests and religious fundamentalists, I say ‘blow it to smithereens.’ Build a new party that represents America’s 99%, not the gilded 1%. 

I’m sick of reading the New York Times sneer at ‘uneducated white male workers who support Trump.’ What about all the welfare recipients who are the core of Hilary Clinton’s supporters?

Trump vows to make the trains run on time. But at a deeper level, he threatens three of the nation’s most sacred cows: 1. imperial war-making, the American Empire,  and the military industrial complex; 2. the vast power of Wall Street and its shameful  tax breaks; 3. the Israel lobby and its undue influence over US foreign policy.

No wonder his candidacy has produced so much fierce opposition and cries of anguish. Trump is remarkably brave, or incredibly foolish, to gore all these sacred cows at the same time.

Still, Trump is answering a deep current in American politics, dating from the Founding Fathers, that wants to avoid foreign entanglements and wars. Foes call this isolationism. In the Trump view, the US has drained its resources and mental energy waging wars abroad that have brought it no benefit at all except a rickety empire.

In 2015, US warplanes dropped 23,144 heavy bombs on six Muslim nations. US forces are now fighting in Iraq, Syria, Pakistan, Afghanistan, Yemen, Somalia and West Africa. Do we really wonder why so many furious Muslims want revenge against the west? Trump has yet to understand this.

But Trump is right when he says no more foreign wars. Equally important, it’s time to begin dismantling the US Empire which is precisely what invites attacks we call ‘terrorism.’

Today, NATO does not defend the US or Europe. It is a control mechanism that keeps Europe under American strategic domination. It should have been ditched when the Soviet Union collapsed. Instead, we see the Washington neocons who control the Obama administration’s policy planning to send a full US armored brigade to Russia’s western border and intensifying air and naval patrols there. Madness, and likely stepping stones to a new war.

Candidate Trump advocates grown-up dialogue and cooperation with Russia and an end to Hillary Clintons’ crass war-mongering and hates Putin campaign.  

Trump’s call for ‘even-handed’ US policy in the Mideast was greeted with fury and horror by Israel’s partisans who are now asking Washington for $4.2 billion in annual military aid.

But Trump’s daring effort to forge peace in the Mideast has run head-on into the mighty US Israel lobby which helped orchestrate a ferocious anti-Trump media campaign.

Now, it appears Trump has met his match. Pro-Israel billionaire Sheldon Adelson has just made peace with Trump and announced he will support the Republican candidate. This sends an important message out to Israel’s supporters to lay off the Donald. In return, Trump just announced he actually favors more Israeli settlements on the Occupied West Bank.

Meanwhile, the slighted Republican establishment is still sulking and won’t endorse Trump – yet. Its leaders are right when the say Trump must change his speech regarding Mexicans and Muslims. But they don’t really care about either.

What they really do care about is the danger of cutting the Pentagon’s $700 billion annual budget, protecting the military industrial complex, and defending Wall Street from government investigation. After all, it’s Wall Street that funds Congress.

The Republicans opposing Trump are not, as they claim, conservatives. They are advocates of big, big government, foreign wars, welfare for favored industries, tax breaks for farmers and key supporters. And, of course, almost half of GOP voters call themselves fundamentalist Christians, making today’s party a semi-theocratic, far right political movement.

Real conservatives are for low taxes, small government, no foreign wars and states rights. Rather what Trump is preaching.

samedi, 07 mai 2016

Westerse elite in paniek nu Trump definitief Cruz heeft verslagen

Pourquoi-Melania-Trump-va-beaucoup-faire-parler-d-elle.jpg

Westerse elite in paniek nu Trump definitief Cruz heeft verslagen
 
Ex: http://xandernieuws.punt.nl

Burgers in Amerika en Europa beginnen eindelijk op te staan tegen de extreemlinkse globalistische Nieuwe Wereld Orde elite, die onze grenzen, culturen en welvaart met islamitische massa immigratie wil uitwissen

De Amerikaanse media deden er de afgelopen weken nog alles aan om met vaak extreem negatieve berichtgeving en peilingen die een nek-aan-nek race voorspelden te voorkomen dat Donald Trump ook in Indiana de voorverkiezingen zou winnen. Tevergeefs: Trump behaalde gisteren een verpletterende overwinning, die Cruz tandenknarsend deed besluiten zich uit de race voor de Republikeinse nominatie terug te trekken. Hoewel? Cruz zei letterlijk dat hij zijn campagne zou ‘opschorten’. Volgens Infowars betekent dit dat de partij elite van plan is om tijdens de nominatie conventie in Cleveland alsnog Trump terzijde te schuiven, en tegen de grote meerderheid van de eigen kiezers in alsog de door velen gehate Cruz aan te wijzen, die tijdens de verkiezingen in november vrijwel zeker van Hillary Clinton zal verliezen.

Grote media zoals CNN, CNBC, ABC en Fox News hadden tijdens de voorverkiezingen de handen ineen geslagen om het ‘rechtse populisme’ en nationalisme te demoniseren en in extremistische hoek neer te zetten. Wij Europeanen kennen dat al langer van ‘onze’ eigen reguliere media, die op de achtergrond door dezelfde globalistische elite die de grenzen, culturen, democratiën en welvaart van het Westen willen uitwissen door onze landen met miljoenen moslimmigranten te overspoelen, worden bestuurd.

‘Trump is symbool tegen tirannie’

De communistische Chinese president Jinping, de Marxistische paus Franciscus, de autoritaire socialistische Mexicaanse president Nieto, de grote filmsterren en regisseurs in Hollywood, ze werden allemaal ingeschakeld om Trump zwart te maken. Hij werd zelfs voor terrorist uitgemaakt omdat hij de slogan ‘America First’ gebruikt.

Maar de Republikeinse kiezers lieten zich deze keer eens niet intimideren. Integendeel, hoe meer Trump werd belasterd, hoe groter zijn voorsprong in de peilingen werd. Infowars kopstuk Alex Jones vat de reden samen: ‘Trump is een symbool tegen tirannie. Alles wat de hoeren van de politiek, de ‘presstitutes’, deden, keerde als een boemerang tegen hun eigen verraderlijke hoofden terug.’

Jones zegt natuurlijk niet zeker te weten of Trump echt een goede president zal worden. ‘Maar ik weet wel dat de communisten in China bijna 100 miljoen mensen hebben vermoord, waarvan 84 miljoen door Mao Tse Tung. En die moordlustige schoften waagden het onze binnenlandse zaken te manipuleren, en hadden het lef ons te vertellen dat wij niet Trump mogen kiezen.’

Nationalisten in Oostenrijk en Duitsland in opmars

In Oostenrijk heeft een nationalistische presidentskandidaat afgelopen week de eerste ronden van de verkiezingen gewonnen. Natuurlijk noemen ook Nederlandse media Norbert Hofer valselijk ‘extreem rechts’, maar alles wat hij wil is zijn eigen land en volk, en daaraan verbonden hun welvaart en hun toekomst, beschermen tegen de door de Europese elite gewilde moslim migranteninvasie.

In Duitsland is de anti-immigratie / anti-islamisering partij AfD aan een grote opmars bezig, zozeer dat Angela Merkel inmiddels heeft aangegeven haar christendemocratische CDU toch weer wat conservatiever te willen maken, in de hoop de vele verloren kiezers terug te winnen. Onder Merkel is de CDU juist verworden tot een ultralinkse club die in veel opzichten als twee druppels water lijkt op De Groenen.

Globalistische elite in media en politiek in paniek

Partijen en politici  die de soevereiniteit van hun land en het zelfbeschikkingsrecht van hun eigen volk willen behouden en beschermen, worden door de Amerikaanse en Europese media steevast neergezet als extremisten en zelfs (neo-)nazi’s. En dat terwijl juist het streven naar een groot grenzenloos socialistisch imperium, met één centraal oppermachtig gezag, zoals de Europese Unie en ook de Democratische Amerikaanse presidentskandidaten Hillary ‘saringas’ Clinton en Bernie Sanders dat willen, rechtstreeks uit de kokers van de echte Nazi’s afkomstig is. Het globalisme is dan ook weinig anders dan een mooier verpakte vorm van deze levensgevaarlijke ideologie.

Jones waarschuwt dat de Republikeinse elite dermate in paniek is, dat ze mogelijk inderdaad de kleine lettertjes van hun eigen statuten gaan gebruiken om Trump alsnog terzijde te schuiven, en de door hem gewonnen gedelegeerden gewoon in meerderheid op Cruz laten stemmen. ‘Dus ze kunnen Trumps overwinning nog van hem stelen. Maar de globalisten kunnen de veranderingen die het volk wil niet meer stoppen.’

Amerikanen en Europeanen worden wakker

Het lijkt er dan ook op dat de Amerikanen eindelijk in de gaten krijgen dat ze voortdurend op schaamteloze wijze worden misleid en belogen door de grote media. Uit een laatste opiniepeiling bleek dat nog maar 6% van de bevolking vertrouwen heeft in de gevestigde massamedia. Nu Europa nog, en zeker Nederland, omdat veel mensen hier nog steeds denken dat ze objectief worden geïnformeerd door politiek-correcte linkse media zoals de NOS, RTL, NRC, AD, en noem ze (bijna) allemaal maar op.

Ook in Brussel zal de ongerustheid flink zijn toegenomen, want als Trump wordt gekozen zullen de nieuwe volks-vrijheidspartijen in Europa, zoals in Nederland de PVV, vermoedelijk extra gesterkt worden. De Europeanen zullen dan nog meer geloof krijgen dat ze van de ondermocratische, totalitaire, neo-Marxistische pro-immigratie / pro-islam elite in Brussel af kunnen komen, en de zeggenschap over hun eigen landen en toekomst weer terug kunnen pakken.

Xander

(1) Infowars

Zie ook o.a.:

02-05: Topjournalist Hersh: Hillary Clinton liet saringas aan Syrische rebellen geven

mercredi, 04 mai 2016

Hillary Clinton et la guerre néolibérale de Wall Street contre l’Amérique Latine

hillary-clinton-old-hag-3.jpg

Hillary Clinton et la guerre néolibérale de Wall Street contre l’Amérique Latine

Auteur : Eric Draitser
Ex: http://zejournal.mobi

Qu’un coup d’Etat soit en cours au Brésil et que la droite utilise des mesures politiques extraordinaires pour renverser Dilma Rousseff sont désormais des secrets de polichinelle.

Mais ce dont on parle peu dans tous ces débats sur la destitution de la présidente et la corruption qui gangrène le Brésil est le contexte plus large de toute cette affaire : comment la finance internationale travaille avec Hillary Clinton et d’autres élites politiques américaines pour réaffirmer le Consensus de Washington en Amérique Latine; comment la droite dans toute la région collabore à ce projet; et comment cela se manifeste dans les pays visés. Bien que les pièces de ce puzzle puissent être partiellement cachées, il est temps de les assembler pour découvrir le tableau d’ensemble.

Le Brésil et l’Argentine: des études de cas de l’ingérence de Wall Street

Tandis que le monde entier attend le prochain épisode du drame brésilien en cours, il est essentiel d’observer pourquoi avoir déployé un tel spectacle avec ce processus d’« impeachment ». Élue et réélue à quatre reprise au cours des quatre derniers scrutins, Dilma Rousseff et le Parti des Travailleurs constituent indéniablement la formation politique la plus populaire au Brésil, un pays connu pour ses profondes divisions entre une riche élite de droite et la masse des travailleurs et des pauvres qui soutiennent principalement la gauche, y compris, ces dernières années, le Parti des Travailleurs.

Avec cette dynamique, il n’est pas étonnant de découvrir que le gouvernement est en train d’être chassé par une coalition d’extrémistes de droite, allant de ceux qui soutiennent sans réserve la dictature militaire brésilienne installée par les USA à ceux qui veulent simplement voir le Brésil suivre un modèle plus néolibéral de développement économique. Cependant, ce qui pourrait surprendre pas mal de gens est le rôle clé que jouent dans ce processus les puissants intérêts financiers, et qu’ils continueront à jouer dans tout futur gouvernement au Brésil.

A la mi-avril, juste au moment où le vote d’impeachment devait avoir lieu, Reuters révélait que le vice-président brésilien de droite, Michel Temer, préparait déjà sa liste de candidats potentiels pour son cabinet présomptif, une fois chassés Dilma et le Parti des Travailleurs. Temer a désigné Paulo Lerne au poste de ministre des finances ou de directeur de la Banque Centrale. Lerne est président des opérations de Goldman Sachs au Brésil, ce qui en fait peut-être l’éminent représentant de Wall Street dans le pays.

On ne peut évidemment point passer sous silence l’influence considérable que des sociétés comme Goldman Sachs exercent, au-delà de leurs avoirs réels, dans le pays. Par exemple, le capital financier de Wall Street entretient de très bonnes relations avec le plus riche des Brésiliens, Jorge Paulo Lemann, un multimilliardaire qui possède Heinz Ketchup et Burger King, qui est l’actionnaire majoritaire de Anheuser-Busch et Budweiser, et qui est un proche associé de Warren Buffett. Avec son pedigree financier, il n’est pas surprenant que Lemann et les intérêts qu’il représente soutiennent financièrement les groupes impliqués dans les manifestations de rue réclamant la destitution de Dilma Rousseff. Parmi eux, le très visible VemPraRua (descend dans la rue).

Il n’est pas non plus surprenant que d’autres groupes essentiels engagés dans ces manifestations soient directement financés par d’autres intérêts de Wall Street, en particulier les Koch Brothers, tristement célèbres. Charles et David Koch sont les financiers clés derrière le Mouvement Brésil Libre (MBL) et les Etudiants pour la Liberté (EPL), à travers l’Atlas Economic Research Foundation et l’Atlas Leadership Academy, toutes deux ayant engendré quelques-uns des principaux leaders des manifestants.

Pour ces raisons, il ne faut pas s’étonner si des acteurs clés dans cette campagne d’impeachment au Brésil semblent prendre leurs ordres auprès de responsable américains, ou, au minimum, s’ils collaborent avec eux. En fait, le lendemain du vote d’impeachment, le Sénateur Aloysio Nunes se trouvait à Washington pour des réunions de haut niveau, avec le Sénateur républicain Bob Corker, président et membre de haut rang de la commission sénatoriale des affaires étrangères, et le Sénateur démocrate Ben Cardin, un soutien clé de Hillary Clinton. Nunes devait également rencontrer le sous-secrétaire d’Etat Thomas Shanon, le troisième plus haut responsable du Département d’Etat, qui est à la tête des affaires latino-américaines, de même que des représentants de l’organisation lobbyiste Albright Stonebridge Group, dirigée par le soutien indéfectible de Clinton, Madeleine Albright.

Ces réunions indiquent effectivement le désir de la part des fomenteurs de ce coup d’Etat de collaborer avec toutes les parties du Consensus de Washington – Républicains et Démocrates, capital privé et agences gouvernementales – pour mettre en œuvre une transition en douceur au Brésil soutenue par les Etats-Unis. En fait, on pourrait penser qu’ils s’occupent à refaire le coup du Honduras de 2009, auquel avait présidé Hillary Clinton et ses amis lobbyistes bien introduits à Washington.

Effectivement, il semble que tous ces discours lucratifs que Clinton a donnés chez Goldman Sachs ne visaient pas simplement à impressionner le géant de Wall Street en promettant combien son administration serait favorable à la finance au niveau national, mais également à démontrer les précieux services qu’elle pourrait fournir à ses mécènes en matière de politique étrangère. Pour se rendre compte à quel point Hillary Clinton et Goldman Sachs travaillent la main dans la main, il suffit simplement de regarder vers le Sud, depuis le Brésil, à savoir le brillant exemple de l’Argentine.

En novembre 2015, Mauricio Macri a évincé son rival en remportant la présidence de l’Argentine. Cette claire victoire de la droite en Argentine a été, en fait, l’équivalent politique d’une OPA hostile de la part de Wall Street. Dans les six jours de ce triomphe électoral, Macri avait déjà dévoilé son équipe économique clé constituée d’initiés de Wall Street et de représentants des Big Oil, entre autres industries.

Avec Macri, l’économie argentine est maintenant fermement entre les mains d’Alfonso Prat-Gay (le ministre des finances), un banquier de Wall Street de longue date, idéologue néolibéral et ancien président de la Banque Centrale d’Argentine. Francisco Cabrera (qui émargeait auparavant auprès du géant bancaire HSBC et d’autres institutions financières) a pris le poste de ministre de l’industrie, tandis qu’un autre idéologue néolibéral, Federico Sturznegger, sert à présent en tant que président de la Banque Centrale. De plus, le nouveau ministre de l’énergie, Juan Jose Aranguren, est l’ancien président de la division argentine du géant pétrolier Shell.

Avant tout, Macri n’a pas caché la proximité de son administration avec le capital financier et les grandes entreprises, ainsi que son équipe économique le démontre de façon criante. Et Macri a lui-même rendu cela aisément visible en capitulant, en février dernier, face aux exigences du milliardaire vautour, Paul Singer, l’Argentine acceptant de payer près de 5 milliards de dollars (75% de la demande) au groupe de Singer, qui avait tenu bon contre le refus constant du gouvernement de Christina Fernandez de se soumettre à la volonté des milliardaires de Wall Street. Avec ce seul acte, Macri a démontré au monde entier, et en particulier aux financiers de New York et de Londres, que l’Argentine est ouverte aux affaires.

mercosur.jpg

Hillary Clinton et le programme néolibéral en Amérique Latine

Il ne fait aucun doute que l’une des cibles en Amérique Latine reste les matières premières et les produits de base : le Brésil comme l’Argentine sont reconnus comme étant des sources majeures pour l’énergie et les autres produits de base, tandis que le Venezuela reste l’un des premiers producteurs mondiaux de pétrole. De ce seul point de vue, ces pays présentent donc évidemment une grande valeur aux yeux des chacals de Wall Street. Mais il y a beaucoup plus, alors que l’Amérique Latine est vue maintenant comme un point de convergence de la campagne plus large visant à étendre l’hégémonie des USA, de Wall Street et de Londres, à la fois dans les domaines économique et politique.

Peut-être les pièces centrales de cette campagne sont-elles le Partenariat transpacifique (TPP) et le Partenariat transatlantique de commerce et d’investissement (TTIP), lesquels créeraient une infrastructure commerciale supranationale des grandes entreprises, qui subordonnerait avant tout les nations individuelles à l’hégémonie des grandes entreprises et du capital. Naturellement, les forces progressistes de gauche en Amérique Latine, et leurs alliés, représentaient la pierre d’achoppement majeure à la mise en œuvre du TPP et du TTIP. Mais cela est bien parti pour changer.

Macri a signalé son désir d’utiliser le Mercosur comme véhicule pour entrer dans le TTIP, l’accord massif de libre-échange qui ouvrirait les participants au capital européen et américain. Il a indiqué de la même manière son désir de se rapprocher des pays de l’Alliance Pacifique, dont trois d’entre eux (le Chili, le Pérou et le Mexique) sont déjà à bord avec le TPP. De telles manœuvres sont rendues possibles par deux facteurs importants.

D’abord, il y a la suppression du gouvernement Rousseff qui, bien qu’il soit disposé à engager le dialogue sur le TTIP, n’a pas voulu se soumettre aux intérêts de Washington et du capital londonien.

Ensuite, il y a l’élection de Clinton qui pointe à l’horizon, laquelle reste la principale représentante de Wall Street dans la course présidentielle américaine. Bien que ses liens de longue date avec Goldman Sachs et d’autres banques puissantes soient parfaitement documentés, sa vénération pour le libre-échange au service de la politique américaine, malgré sa rhétorique de campagne vide, est également bien connue.

Clinton a menti sans se démonter durant les débats démocrates nationaux sur la question du TPP, en disant qu’elle s’y oppose maintenant, bien qu’elle y fût encore favorable en 2012 lorsqu’elle était Secrétaire d’Etat. Clinton disait alors que le TPP : « établit l’étalon-or des accords commerciaux ». Tandis qu’elle se fait passer à présent pour une protectionniste s’opposant à un accord qui serait mauvais pour les travailleurs, elle a démontré dans le passé son soutien infaillible pour ce type de soi-disant libre-échange.

Inversement, Donald Trump a vraiment indiqué son opposition au TPP, bien qu’il faille noter que son argument selon lequel celui-ci bénéficierait à la Chine est risible. Pourtant, Trump n’a pas le béguin pour ce type d’accord de libre-échange, et on ne pourra pas compter sur lui pour être capable de réunir les parties nécessaires pour le réaliser. Par conséquent, Hillary Clinton apparaît une fois encore comme étant le choix de Wall Street.

C’est peut-être pour cette raison que Charles Koch, du binôme des Koch Brothers, les infâmes milliardaires de droite, a admis récemment qu’il pourrait soutenir Hillary Clinton face à une domination de Donald Trump. C’est effectivement à présent la position déclarée de penseurs néoconservateurs très influents et de stratèges de droite, dont Max Boot, qui a décrit Clinton comme « éminemment préférable », Robert Kagan qui voit Hillary en « sauveteur du pays », et Eliot Cohen qui a décrit Clinton comme étant « de loin, le moindre mal ».

Et pourquoi ces néocons de droite, accouplés avec les idéologues néolibéraux de l’aile libérale de la politique américaine, s’alignent-ils derrière Hillary Clinton ? Il y a une réponse simple : Clinton tiendra parole. Et lorsqu’il s’agira de l’Amérique Latine, le plus gros lot de tous est le changement politique au service de l’exploitation et du contrôle économiques.

Depuis l’ascension de Hugo Chavez, l’Amérique Latine a suivi son propre chemin, en démocratisant et en s’éloignant de son ancien statut d’« arrière-cour des Etats-Unis ». Avec Hillary Clinton et Wall Street travaillant main dans la main avec leurs mandataires de droite en Amérique Latine, Washington vise à réaffirmer son contrôle. Et c’est le peuple de la région qui en payera le prix.

Eric Draitser est un analyste géopolitique indépendant basé à New York.

Traduction JFG-QuestionsCritiques

samedi, 30 avril 2016

What Would A Trump Presidency Mean For Europe?

politique,élections américaines,états-unis,donald trump,politique internationale,europe,affaires européennes

What Would A Trump Presidency Mean For Europe?

After winning primary contests in five more states, Donald Trump looks like he will most likely become the Republican Nominee. Indeed, Trump didn’t just win narrow victories, he won every single county and every single Congressional District in all five states. He annihilated his opponents — Cruz and Kasich — and may well have vaulted over the clutching tentacles of the #NeverTrump movement and squarely into the GOP captain’s seat, squaring-off against Hilary Clinton. 

In that general election matchup I feel strongly that Trump will win. He has proven himself to be light years ahead of every other candidate in terms of strategy. He has played the media like a fiddle, and understands the modern news cycle and how to position oneself tactically in ways previous candidates have never come close to. I predict that in a general election matchup against Hilary Clinton Trump will come away with a strong victory, an event that would have seemed completely impossible a year ago.

While I will leave it to others to analyze the impact this will have here in America where it is taking place, I am more concerned with the impact it might have in Europe, where the majority of my focus and concern rests, and where our people’s survival is most immediately threatened.

In this regard I feel there are both pros and cons to a potential Trump presidency. We face in Europe today a steadily-building wave of terrorism, mass rape, demographic replacement, and what can only be described as the purposeful genocide of White citizens by left-wing, negationist, suicidalist governments. This portends a crisis greater than WWI, WWII, or even the Black Death. This is not hyperbole. In most West European nations today, the 18-30 year old male demographic — those of fighting age — will be majority Muslim in the next 1-5 years.

This is the most sudden and violent societal transformation in the history of the continent, if not the earth, and bodes tremendously ill for native Europeans. There is no nation in the world’s history in which Muslims have become a majority that was not eventually conquered completely by Islam, with its non-Muslim inhabitants either forcibly converted or enslaved. And indeed in Europe today we already see the beginnings of this from the Muslim population. We are witnessing mass ethnically-driven rape against White women and children that would be considered war crimes in any other place on earth, as well as massive levels of criminality, complete opposition to their host societies’ governments, and continued, consistent anti-state terrorism (4th-Generation Warfare). All of this should have been expected, but as it was not, or was allowed to occur anyway.

Europe now looks likely to descend into horrors beyond our worst nightmares. What impact a Trump presidency might have on Europe at this critical juncture is thus a question of significant importance.

There are a number of potential positives which I will discuss first.

  1. A Trump Presidency would increase the visibility and legitimacy of White Identitarian thought. The President of the most important nation on earth could, to at least some extent, be referred to as “proudly White.” Through the temporary banning of Muslims, he would be publicly declaring that culture matters, that some cultures are superior to others, and that Muslims represent a threat to Western society. His administration would be supporting closed borders, and opposing unfettered multinational corporatism. Surely this must have a positive impact across the Atlantic, at least in its ability to project these thought-patterns into mainstream society.
  2. Trump could potentially exert leverage on European leaders to stop the wholesale genocide of their people. Trump has attacked European-suicidalism on numerous occasions, and just the other day endorsed Matteo Salvini [2], the anti-immigration Northern League candidate seeking to become Italian Prime Minister. The survival of White Europeans would be a concern of a Trump administration, which is more than we can say for most Western leaders. It should not be considered overly-optimistic to hope that Trump’s aforementioned strategic genius, and his obvious concern for Europe’s future, could combine to potentially improve the situation there for our people.
  3. Finally, and perhaps most importantly, is the template a Trump victory and Trump administration would represent for European nations. This is because Trump’s success is, among other things, a response to the increasingly 4GW nature of the world. William S. Lind, one of the fathers of 4th-Generation Warfare theory, says that this will be the century of the nation-state’s disintegration, as non-state forces and non-state identities increasingly rip apart the fabrics of the nation-state system. He predicts that only strong countries with robust, autocratic governments, working to cultivate and ensure strong “shared identity-groups,” will be able to survive. We are in fact already witnessing this phenomenon. In Russia it took place almost twenty years ago, and interestingly that could very well be attributed to the fact that Russia was at that time facing 4GW disintegration — where multiple non-state actors and identity groups were facilitating the destabilization of the Russian nation from within — that is very much like what is facing Europe today. The Russian people turned to Putin and his strength-based, nationalist, traditionalist policies, and have for the most part righted their ship and ensured their people’s continued survival. We are seeing the same thing today in Poland and Hungary, where nationalist, autocratic governments have been elected, and are taking pains to build their nations’ societal cohesion, eliminate or prevent the build-up of non-state threats (immigrants primarily), and set their countries on a course for survival. In my opinion the rise of Trump in America represents the exact same thing, as normal White Americans note with dread the rise of Hispanic Nationalism within their borders, “refugee” resettlement, Islam, left-wing hatred of Whites and White men specifically, and the insidious effects of multinational-corporatism. They are turning to Trump as an autocratic force from within their same shared identity-group, to (again) “right the ship” and expel those forces that threaten the American (or White American) “tribe.” This can continue the template that Russia, Poland, and Hungary represent, and hopefully demonstrate to Western European nations a potential path to survival.

Of course in Western Europe it will not be as simple as that, as most of these nations will need to fight violent insurrections if not civil wars with the vast populations of Muslims they have brought into their lands. This brings up the one “neutral” or “unknown” influence of a Trump administration I would like to point out, which is his position vis-à-vis ISIS, the Islamic State. So far at least, Trump has proclaimed his desire to invade Syria and Iraq, and forcefully take out ISIS. If he did this, it would be emotionally satisfying in the short term but disastrous from a 4GW vs. nation-state perspective. The main concern is that it would undoubtedly make ISIS far stronger, in that it would earn them the sympathy and loyalty of an even broader segment of the Muslim world. By attacking them, Trump would in fact give them legitimacy within the minds of Muslims. That could be a negative, and end up harming the Occident in several ways.

But it could also potentially be a positive. For the more powerful Islamism gets and the more outwardly aggressive Muslims in Europe become, the quicker all-out 4GW will begin within its borders. It is in our strategic interest for 4GW hostilities to break out in Europe now, rather than later, for every year Europe becomes home to far more Muslims, particularly in that crucially important male 18-30 year old demographic. The traitorous European elites can cite “official” statistics as often as they want that show Muslims only making up small percentages of various European populations, and while the vast number of White Baby-Boomers are still alive those statistics might even be half true. But the bottom line is that when over half of your nation’s fighting-age men are Muslims, you are already a Muslim nation or soon to be one. Demographics are destiny, one just has to know which statistics to look at.

That leaves us to discuss one negative impact I believe a Trump presidency would have on Europe. At first glance it appears almost incidental, but this is unfortunately not the case. This is the fact that the election of Donald Trump would cause the entire mainstream, Left-wing, self-hating White population of Europe to double-down on negationist, Cultural-Marxist insanity. It would be like the presidency of George W. Bush times 100, as millions upon millions of brainwashed Europeans dive into a suicidal orgy of virtue-signaling, heaping wood upon their already blazing funeral pyre. We might see the importation of Muslim “refugees” rise to levels far-surpassing what we see now. We very likely would see a negative electoral impact on Right-wing, anti-immigration parties. This would have disastrous effects upon Europe. And despite their idiocy there will be nothing funny about it, because all of these actions will lead to mass-rapes of White children, attacks on our vulnerable and elderly, overwhelming levels of crime, terrorism, and other manifold horrors. Not to mention an even-bleaker demographic picture.

This concern is similar to why Jack Donovan argued for a Hilary Clinton Presidency [3], since it will at least “wake men up” to just how reviled and unwanted they are by America’s ruling class. While this is humorous it also conceals a hugely critical truth, which is that our movement is almost never to be served by the election of parties or individuals just because they are moderately or ostensibly closer to our beliefs. In Europe especially, our greatest hope is for the system as a whole to fall apart, so that it can be replaced with something else. It is hard to see any path to survival in Europe if the current political systems continue — both those of individual nations and the EU as a whole. They are not functional and robust enough in their current form to face the battle that is coming, even were they to have the “right” political parties governing them. In this regard, if a Donald Trump victory in America strengthens governments and Left-wing parties in Europe, it could represent no less than a death knell for our ancestral homelands.

politique,élections américaines,états-unis,donald trump,politique internationale,europe,affaires européennesThe question of whether Trump is elected president, and what that would portend for Europe, is one more momentous issue for these turbulent times. Let us not be blind to the magnitude of events, for surely our descendants will read about them in the history books for long centuries to come. The next decade will mark either Europe’s submission and death, or its decision to fight and survive. A two thousand year old civilization stands on the edge of a knife.  And no matter what happens in the American Presidential Election, in the French one, in the Austrian one; I do not believe that politicians will decide Europe’s fate. It will be the individual members of our race that decide it. Our destiny resides in our willingness to fight; to give our time, our treasure, and perhaps our lives, for the future of our people. With this being the case, it lends clarity to the question of Trump’s — or any other candidate’s — potential victory. For we should hope for their election not for what they might do for Europe, but for how that result might aid the fight for its survival that we shall undertake.

About the Author

Julian Langness is the author of Fistfights With Muslims In Europe: One Man’s Journey Through Modernity [4]and is the editor of europeancivilwar.com [5].

Article printed from Counter-Currents Publishing: http://www.counter-currents.com

URL to article: http://www.counter-currents.com/2016/04/what-would-a-trump-presidency-mean-for-europe/

URLs in this post:

[1] Image: http://www.counter-currents.com/wp-content/uploads/2016/04/TrumpEconomist.jpg

[2] endorsed Matteo Salvini: http://www.theguardian.com/world/2016/apr/26/donald-trump-gets-my-backing-says-italys-matteo-salvini

[3] Jack Donovan argued for a Hilary Clinton Presidency: http://www.radixjournal.com/journal/2014/2/21/why-we-need-hillary

[4] Fistfights With Muslims In Europe: One Man’s Journey Through Modernity: http://www.amazon.com/gp/product/B01B2FNUI0/ref=as_li_tl?ie=UTF8&camp=1789&creative=390957&creativeASIN=B01B2FNUI0&linkCode=as2&tag=thesavdevarc-20&linkId=BSZYG34WYUDOWUJL

[5] europeancivilwar.com: http://europeancivilwar.com

 

vendredi, 29 avril 2016

Brzezinski réduit à la pensée-zombie

brzezinski-ancien-conseiller-a-la_8d837bb0f0517904ab74c103ab2259be.jpg

Brzezinski réduit à la pensée-zombie

Ex: http://www.dedefensa.org

Est-il encore utile de lire Brzezinski ? Oui, pour mesurer l’avancement de la néantisation d’une pensée qui veut malgré tout encore répondre aux exigences de ses propres théories hégémoniques dont la politique-Système semblerait l’application. Au contraire, cette pensée est le produit d’un Système, et donc de sa politique-Système, qui n’a d’autre but qu’une pseudo-hégémonie par défaut et par obligation puisqu’il a pour véritable but celui de l’entropisation du monde impliquant la néantisation de la pensée de ceux qui lui sont soumis. (Ainsi boucle-t-on un cercle vicieux en une parfaite démonstration du mouvement perpétuel vers le néant : l’hégémonie du monde par néantisation du monde.)

Ces dernières années, depuis la crise de l’Ukraine commencée avec le “coup de Kiev” de février 2014, il y avait eu des hauts et des bas dans la pensée de Brzezinski, alors qu’auparavant elle avait semblé pouvoir se fixer heureusement dans une vision révisionniste qu’on pouvait juger d’une qualité notable (voir en novembre 2012). Désormais, c’en est fait et c’en est fini ; l’âge dira-t-on par convenance, mais non, car Brzezinski pourrait sembler garder l’esprit vif ; bien plus encore certes et à notre estime, il s’agit de l’achèvement d’un périple intellectuel catastrophique qui n’a jamais abandonné ses racines fondées sur les illusions de l’école de pensée américaniste-moderniste pour aboutir finalement à l’accouchement de la néantisation-Système de l’achèvement postmoderniste. Le temps, d’ailleurs très rapide, a fait son œuvre, moins pour “vieillir” cette pensée (ce qui n’est pas nécessairement mauvais, comme le montre le bon vin) mais pour montrer ce qu’elle recèle en vérité, tout au fond d’elle-même.

(Pour le cas particulier de Brzezinski, l’affaire ukrainienne a joué un rôle spécifique, en ressuscitant ses vieilles racines polonaises et la haine du Russe qui va avec. Dans le cadre de cette pensée devenue pensée-Système, cela a permis la renaissance de l’“antirussisme” à visage découvert, sous forme d’une obsession créatrice des choses les plus extraordinaires de l’inversion de l’esprit, dont l’archétype est certainement le phénomène du déterminisme-narrativiste qui joue un rôle fondamental, à la fois d’emprisonnement et d’entraînement de la pensée.)

... Par conséquence de tout ce qui précède, il ne nous paraît pas très utile de reproduire, ni de lire précisément le dernier texte-doctrine de Brzezinski du 17 avril 2016 dans The National Interest, sous le titre « The Global Realignement ». Reportons-nous au texte de Katehon.com du 21 avril (repris par Russia Insider [RI] le 23 avril). Il nous en donne une analyse critique suffisante pour comprendre ce qu’il y a dans l’esprit de Brzezinski et ce qu’il y a de faussaire dans la pensée de Brzezinski. On se contentera de mentionner le sous-titre du texte de Brzezinski qui, à lui, seul, offre un exemple stupéfiant de schizophrénie dans sa contradiction interne, dont l’interprétation en termes simples est à peu près ceci : “puisque nous sommes de moins en moins fort, c’est à nous de prendre la direction des choses...” (« As its era of global dominance ends, the United States needs to take the lead in realigning the global power architecture »), – “plus nous sommes faibles, plus nous sommes forts”, ou mieux et doctement dit, en “déplaçant à peine le curseur” des vertus nominées : “plus nous sommes zombies, plus nous sommes génies”, tout cela terminé par l’immortelle citation de notre Sénèque-cinématographique très souvent rappelée utilisée ces derniers temps (« Les cons ça ose tout, c’est même à ça qu’on les reconnaît »)... Mais quoi, ne s’agit-il pas là d’une conception absolument correspondante aux temps que nous vivons où l’inversion constitue le fondement de la logique ?

Rien que cette introduction nous donne la nausée devant la tâche, pourtant réduite au minimum syndical, de donner un rapide aperçu de la pensée de Zbigniew  Brzezinski... Et répétons-le tant nous en sommes convaincus, d’instinct et d’intuition dirions-nous, assurés que nous sommes que Brzezinski n’est nullement gâteux. Ce qu’il dit correspond tellement bien à ce que pense le Système : zombie d’accord, mais gâteux certes non. Ainsi, nous dit-il comme s’il nous présentait une terrible Vérité inspirée des dieux : l’hégémonie des USA est en grande déconfiture, et sa puissance, notamment d’influence, à mesure. (C’est nous qui complétons par la deuxième proposition qui est évidemment inéluctablement conséquence directe de la première.) Ce qui le conduit aussitôt à proposer un certain nombre de mesures que l’on confiera aux seuls USA pour empêcher le monde de sombrer dans le chaos, – puisque sans hégémonie US, qui est la cause du chaos où nous nous trouvons, le monde sombrerait dans le chaos.

... Par conséquent, les USA en déclin, en repli, en plein processus de réduction de leur puissance et de leur influence doivent entreprendre diverses manœuvres stratégiques pour empêcher que le monde, qui est dans le chaos avec eux et grâce à eux, sombre dans le chaos. Seul celui qui a institué le chaos est capable de contenir le chaos qu’entraînerait son retrait, ou plutôt dirait-on de maintenir un chaos made in USA, une sorte de chaos exceptionnaliste si vous voulez, pour prévenir n’importe quelle autre sorte de chaos... Ces mesures impliquent une présence et une influence maintenues sinon augmentées au Moyen-Orient, une implication de la Russie et de la Chine dans une guerre contre le terrorisme (au Moyen-Orient), sous impulsion et machination US, tandis que les USA alimenteraient également les terroristes de façon à embourber la Chine et la Russie dans cette guerre antiterroriste. Entretemps ou parallèlement, la politique de regime change serait évidemment poursuivie sous l’expression gracieuse de “global democratic awakening”, Poutine liquidé, la Russie intégrée à l’Europe qui serait bien entendu sous contrôle US. Pour la Chine, on verra plus tard, mais il est entendu que son destin est scellé. Mais nous arrêtons là, – le texte ci-dessous, vous éclairera peut-être plus, pour notre part nous ne voyons aucun intérêt à éclairer pour l’explorer le trou noir de la néantisation de la pensée : éclairer un “trou noir” représente un exercice dont l’absurdité rend compte d’elle-même de son inutilité proche de la perfection.

Brzezinski n’est pas un original, ou bien un malade mental qu’il faut rapidement extraire des salons washingtoniens, encore moins un gâteux répétons-le avec force, à moins que l’on conclurait que le Système lui-même est gâteux ; bien au contraire il exprime assez joliment et avec une assurance sans pareille, une sorte d’exceptionnalisme de l’arrogance, des sentiments généraux qu’on trouve dans tous les milieux de sécurité nationale qui comptent à Washington. Véritablement, la direction-Système actuellement en place, avec ses sénateurs fous (McCain, Graham), avec sa multitude d’experts, de think tanks, de lobbies, avec sa gestion exotique d’une campagne présidentielle qui explose comme un feu d’artifice de désordre, de fraudes, de démagogie et d’exclamations où l’on distingue comme par inadvertance quelques bonnes vérités-de-situation, la direction-Système pense exactement dans le sens que nous décrit Brzezinski, à la même hauteur et selon la même méthodologie, secouée des mêmes spasmes de zombie. En fait, l’énoncé et l’évolution de la “pensée stratégique” US se limitent à une question de titre et de sous-titre : vous gardez constamment la même non-politique de chaos et de néantisation, et cela constitue le titre inamovible, que vous saluez régulièrement comme une ruse pleine de trouvailles, et que vous rebaptisez régulièrement “au goût du jour” (sous-titre) : hyperpuissance, Empire, hégémonie, déclin, exceptionnalisme, décadence, nation indispensable, effondrement de la puissance, etc., – qu’importe l’étiquette pourvu qu’on ait l’ivresse.

zb-strat980166bf4f9c04c127439d9f531.jpgTout cela n’a plus rien à voir avec la vérité-de-situation, ou quoi que ce soit ayant le moindre rapport avec la vérité (la réalité, elle, n’existant plus comme on le sait). Il s’agit d’un pur raisonnement de type déterminisme-narrativiste où la donnée déterminante, la   conception impérative, est que les USA doivent rester la chose dominante de tout, et de toutes les façons. Même en déclin, même en cours d’effondrement, même en perte vertigineuse d’influence, même non-existante et disparue, elle reste cette puissance exceptionnaliste et unique qui est absolument nécessaire au bon ordre du monde ou au désordre total du monde, ou aux deux à la fois puisque bon ordre et désordre total ne font qu’une seule et même chose au début et au bout du compte.

Ce qui est remarquable dans ce cas, c’est que des esprits comme celui de Brzezinski, qui a connu le Guerre froide, et qui tenait compte de la réalité du monde (qui existait encore), que l’on aimât ou non ses orientations stratégiques, ait succombé à son tour aux extraordinaires conditions de communication existantes à Washington, et notamment au déterminisme-narrativiste qui contrôle tous les esprits du domaine... Cela conduit à renforcer notre hypothèse courante selon laquelle l’influence du Système, dans sa surpuissance autodestructrice, n’a jamais été plus haute et plus grande, qu’elle a littéralement transmuté les esprits en résidus de zombie (et cela à Washington bien plus qu’ailleurs car à Washington, chez un McCain, un Graham ou un Brzezinski, on croit à ce qu’on dit, alors que dans les pauvres colonies européennes, on préfère ne pas penser du tout de crainte de penser mal un instant, par pur réflexe d’incontinence).

Toujours “plus que jamais” puisque le mouvement ne faiblit pas et accélère au contraire dans le même sens, nous nous trouvons dans une situation pseudo-politique qui est totalement exempte du fait politique en tant qu’acte raisonné et conçu d’une manière délibérée. Le “politique” des USA (avec celle du bloc BAO, qui suit aveuglément et sans plus essayer à y rien comprendre celle des USA) est un phénomène totalement étranger au moindre contrôle humain et au moindre dessein humain. Elle ne répond à aucune logique familière à l'esprit, fît-ce celle de la conquête, celle de la destruction, etc. Elle est emportée par un flux dont l’“inspiration” est évidemment extérieure à elle-même et n’a plus rien de spécifiquement humain, pour suivre une mécanique de destruction jusqu’à l’anéantissement à laquelle elle ne comprend rien. Les plus grandes intelligences, – Brzezinski n’en est certainement pas dépourvu, – se sont placées au service de ces forces par faiblesse de caractère et vulnérabilité de la psychologie. Ils suivent un courant dont ils ne comprennent ni la signification ni le sens. Ils pondent des doctrines comme les poules des œufs, toujours de la même forme, avec toujours le même contenu, chaque fois en jurant faire du nouveau.

Brzezinsky Forced to Downsize US Imperial Ambitions

zbigniew-brzezinski_1978-07-20.gifFamous American political scientist Zbigniew Brzezinski once again frightened mankind by saying that “the end of America's global role ... would most probably be global chaos”. To avoid this, the supporter of the American hegemony of the United States suggested Global Realignment. That's the name of his article in the JournalThe American Interest. So, what is the American Interest according to Brzezinski?

To briefly summarize the content of Brzezinski’s article it boils down to two theses:

1) The United States is no longer a global imperial power.

2)  As was already mentioned above - the probable chaos as a result of the collapse of the US imperial hegemony. In order for the United States to maintain its power, Brzezinski offers several recipes:

a) Make the main geopolitical rivals of America - Russia and China - work towards US interests. This is supposed to use the crisis in the Middle East as a source of supposed common threats to all three powers.

“America can only be effective in dealing with the current Middle Eastern violence if it forges a coalition that involves, in varying degrees, also Russia and China”.

"The political prospect for China in the near future is to become America's principal partner in containing global chaos, of the sort that is spreading outward (including to the northeast) from the Middle East. If it is not contained, it will contaminate Russia's southern and eastern territories as well as the western portions of China".

 b)    Making the Islamic world work towards US interests. To do this, Brzezinski once again recalls his doctrine of "global democratic awakening", which justifies US involvement in Arab Springs. The gist of it is simple: use the anti-American forces to strengthen US domination through the various mechanisms of influence and direct infiltration. Brzezinski states that special attention should be focused on the non-Western world's newly politically aroused masses, and this can be understood only in the context of his theory of global democratic awakening. The emergence of ISIS, and before that the color revolutions of the Muslim Brotherhood, in the Islamic world can be regarded as the practical application of this particular strategy. These forces “surprisingly” create problems for anyone except the United States.

c) To maintain the US military presence in the Middle East by any means. The text states that this is crucial for the United States, as withdrawal will immediately trigger the collapse of American hegemony:

“A comprehensive US pullout from the Muslim world favored by domestic isolationists, could give rise to new wars (for example, Israel vs. Iran, Saudi Arabia vs. Iran, a major Egyptian intervention in Libya) and would generate an even deeper crisis of confidence in America's globally stabilizing role. In different but dramatically unpredictable ways, Russia and China could be the geopolitical beneficiaries of such a development even as global order itself becomes the more immediate geopolitical casualty. Last but not least, in such circumstances a divided and fearful Europe would see its current member states searching for patrons and competing with one another in alternative but separate arrangements among the more powerful trio”.

In other words, Brzezinski offers the following strategy, where the Middle East is playing a key role:

1.     To foment chaos and war in the region, relying on the strength of "global democratic awakening."

2.     Declare war on terrorism and to shift the burden onto Russia and China, drawing them into a hopeless conflict in the region.

3.     Maintain or even increase its military presence under the pretext of preserving stability in the Middle East.

Of course, all of this is masked by the theses of the struggle against terrorism and paying attention to the suffering of Muslims and the inhabitants of the Third World in general, and because the main actors in the crisis in the Middle East chessboard of Eurasia - Russia, China, Iran, Turkey, Israel, Egypt, Europe, and Saudi Arabia - are invited to participate in it. The pretext is that they are all interested in resolving the conflict, but in fact it will only lead to a conflict of interest and increase the chaos.

"The overall threat of Islamic terrorism" is not a “threat” per se. The US were seriously hit by Islamism only once in its history, on September 11th, 2001. In the US, Muslims consist of around 1% of all citizens, as opposed to the multi-million Muslim populations of Russia and China. And unlike these two countries, there is no region in the US where the threat of Islamist separatism may emerge.

The US is separated from the conflict region by the Atlantic Ocean. Thus, the US can afford to play at two tables at once - to covertly support extremists and combat terrorism, drawing Russia and China into the conflict and subsequently weakening the Islamic world as well.

America hopes to use the US-grown Islamic extremists to re-engage Russia into their orbit, as has been noted - probably post-Putin. It will be the threat of Islamism that will be used in order to engage Russia in an America-centric system. Brzezinski openly declared that this pro-Western strategy relies on Russian nationalism, or on Russia’s transition from the Byzantine imperial expansionist ideology to the concept of Russian national bourgeois European states as part of the Western world:

“Russia's own future depends on its ability to become a major and influential nation-state that is part of a unifying Europe”.

It is significant that Brzezinski, in accordance with the classical geopolitical tradition, considers the main US enemy to be Russia, not China:

“And that is why it behooves the United States to fashion a policy in which at least one of the two potentially threatening states becomes a partner in the quest for regional and then wider global stability, and thus in containing the least predictable but potentially the most likely rival to overreach. Currently, the more likely to overreach is Russia, but in the longer run it could be China”.

Brzezinski’s analysis is based on a manipulation of facts and outright lies, designed to hide the rough edges of his vision.

Firstly, he is absolutely wrong when he assesses Russia's position. From the point of view of Brzezinski, this country is in the latest convulsive phase of its imperial devolution. Meanwhile, Russia reunified with Crimea in 2014, and before that in 2008, conducted a successful military campaign in Georgia. In 2015-2016, for the first time since the collapse of the USSR, Russia launched a military campaign overseas - in Syria. Russia demonstrates not imperial devolution, but imperial renaissance. Even if Russia tries to become a nation-state, is will only push it to expand, as millions of Russians live in the territories of Ukraine, Belarus, the Baltic countries, and Kazakhstan. Both imperial and truly national versions of Russia do not fit into the Brzezinski’s vision of Russia - as one of the states of the European Union.

Secondly, Brzezinski did not take into account the new rising superpowers: India, Brazil, and South Africa. Indirectly, this may mean that the United States dropped them off, hoping to overthrow their independent elite by color revolutions and coups, like what is currently happening in Brazil. However, their demographic, economic, and, as in the case of India, ideologically anti-Western potential is extremely high.

Thirdly, he overlooks the potential for disintegration within the " European Union". The migration crisis, the collapse of the Schengen, diametrically opposite positions between leaders of states on key issues, and the growth of Euroscepticism, are all problems in the euro zone. This is not a Union that Russia would like to enter. This is not a Union where Brzezinski's ideas may promote the globalist agenda: “play a constructive role in taking the lead in regard to transnational threats to global wellbeing and even human survival”.

Fourthly, Brzezinski demonstrates thinking within the neorealist paradigm of "hegemonic stability". The collapse of US hegemony in his opinion would mean the collapse of the world order as such. But, first of all, the US does in no way contribute to the preservation of world order, turning the whole world into a zone of controlled chaos using the theory by another American analyst - Steven Mann. Why would it be a factor of stability in the future? Secondly, a number of neo-realists believe that the bipolar world will have a greater equilibrium than a unipolar one. Thirdly, there is a model of a multipolar world as a world divided by the imperial "big spaces", which takes into account the diversity of the world’s civilizations. It is also not chaos, but the most adequate alternative to American unilateralism.

It may be concluded that Brzezinski’s article demonstrates the desperate attempts of the American elite to maintain its hegemony in the world. At the same time it is full of propaganda clichés, and in many cases its assessment of the situation does not correspond to reality.

 Katehon.com (Russia Insider)